KEYLA
Me desperté al otro día confundida, no estaba en mi cama, ni en mi habitación, mucho menos en mi apartamento. Me senté en la cama y recordé que estaba en la casa Evans.
Me quedé ahí un momento recordando el día de ayer, definitivamente había sido increíble, de no ser nadie en la vida de Noah ahora era la "niñera" de su hermana y hasta él me consideraba su amiga, quien lo diria, es algo que siempre soñé, pero que nunca pensé que sucedería en la realidad.
La noche anterior Noah me habia dejado algo de ropa, toallas y cosas para asearme en la mañana, así que fui al baño de la habitación, porque si, la habitación de invitados tenia su propio baño, como cada habitación de la casa.
Me di una ducha y me vestí con un buzo de Nate que me habia prestado Noah ayer para que hoy estuviera cómoda, me quedaba algo grande pero no lo suficiente para que se me cayeran los pantalones, asi que luego de estar lista, y de arreglarme lo que más pude para estar decente me dirigí a la cocina, donde ya se encontraba Noah y Nataly desayunando.
-Hola chicos - los saludé en el momento en el que notaron mi presencia.
-Key! - Naty me vio y vino corriendo a abrazarse de mis piernas, cosa que me tomó por sorpresa al principio, pero que luego de reaccionar la abrace enseguida correspondiéndole - no sabia que estabas aquí, ¿dormiste aquí? - me preguntó incrédula mientras se separaba de mis piernas y me miraba con ojos grandes.
-Si se quedó porque anoche se hizo muy tarde y como hoy vendría también, le dije que se quedara- respondió Noah tranquilamente mientras miraba a su hermana dandole la respuesta que pedía.
-Wow ni Danae se ha quedado aquí y tú si - me dijo sorprendida pero feliz a la vez, luego hizo que me agachara para decirme algo al oído y asi lo hice - tú te puedes quedar, ella no me cae bien pero tú si - me dijo susurrando para que Noah no escuchara, pero estoy segura que si lo hizo ya que hizo un gesto extraño, a lo que solo pude sonreírle a Naty y decirle que volviera a su silla para que terminara de comer.
Al estar ya los tres sentados comiendo, Naty notó que traía la ropa de su hermano.
-Traes la ropa de Nate! - dijo riendo sosprendida por segunda vez en el día haciendo que ambos rieramos con ella también. Si que es una niña fácil de sorprender me dije a mi misma mientras la observaba reírse.
-Si, la mía se esta lavando - le respondí - aunque me queda un poco grande - le dije mostrándole que las mangas cubrían mis manos.
-No le digan a Nate - se acerco un poco a nosotros y susurró - pero te queda mucho mejor a ti. Y ahí estábamos otra vez riendo por las cosas que decía esa pequeña. Definitivamente sería otro día increíble.
Pasaron las horas, en las cuales almorzamos en el hermoso jardín trasero que tienen, vimos algunas películas animadas, fuimos por helado a un parque cerca de aquí, ayude a Naty con su tarea para mañana, y ahora nos encontrabamos cenando en la sala de estar mientras platicábamos y reíamos de cualquier cosa.
Mientras reíamos de uno de los tantos chistes de Naty, ella sin querer dio vuelta su jugo sobre mi ropa, mojando la capucha de Nate, rápidamente intente secarla, pero Noah fue por una capucha suya para que me cambiara, en lo que la mía seguia en la secadora.
Asi que fui hasta la habitación en la que había dormido y me cambié. Era el día más lindo que habia pasado después de tanto tiempo, sin dudar los tres hermanos Evans tenian algo que me hacían muy feliz, estaba pensando en eso mientras podia sentir el aroma de Noah impregnado en su capucha.
Esta si que era una forma increíble de terminar este grandioso día, pero como todo no puede ser perfecto...
Me estaba por sentar nuevamente a la mesa para terminar de cenar, pero escuchamos que alguien entra, luego unos pasos y segundos después teniamos al Sr y a la Sra Evans frente a nosotros mirándonos de manera extraña y desaprovatoria. Corrijo, mirándome de manera extraña y desaprovatoria.
-Papis - Naty se levantó corriendo y fue a recibir a sus padres muy feliz. En lo que note a Noah tensarse y en lo que yo simplemente me puse nerviosa, que es lo que mejor sabía hacer últimamente.
-Buenas noches - habló su padre con una media sonrisa en su cara luego de unos segundos que para mi fueron eternos.
A sus padres los habia visto un par de veces, pero nunca hemos sido presentados formalmente, solo los he visto caminar por la casa, la mayor parte del tiempo no se encuentran ya que trabajan y viajan bastante. Y por lo que me habia dicho Ivy, eran muy estrictos y mal genio, no aprobaban del todo la relación de Nate y ella, pero a ellos poco y nada les importaba su opinión. Lo que le daba otro punto a la linda relación que tenían ese par de tortolos.
- Hola - responde Noah mirándolos serio. Era una de las pocas veces que veía a Noah totalmente serio, lo que me pareció extraño ya que él es don sonrisas. Pero no tenia tiempo para pensar en eso ahora, estaba en una situación mil veces más importante.
-Jovencita ¿quién eres y por qué estás usando la ropa de mi hijo? - me preguntó su madre directamente, sin filtro alguno haciéndome sentir mucho más nerviosa e incómoda que antes.
Al ver que no respondí enseguida, ya que los nervios no me dejaban formular frases, dirigió su mirada a Noah.
-Noah, ¿quién es?, ¿qué hace aquí?, ¿y por qué está usando tu ropa? - lo bombardeo de preguntas mientras que en la última hizo énfasis en "tu ropa" - sabes perfectamente que a Danae no le gustaría nada saber esto - agregó bruscamente después en forma de reproche con una mano en su cintura.
Lo único que pude pensar en ese momento era en que el día había sido muy bueno para ser verdad...
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Me demoré un poco más de lo planeado :( pero aquí está.
Mañana el próximo🖤
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Another love story... Or not?
Teen FictionDos desconocidos con cercanos en común, fue imposible no conocerse, no compartir el uno con el otro, no quererse, hasta les fue imposible enamorarse... Pero eran jóvenes: inexpertos, tercos, cometieron errores, las circunstancias y el tiempo no est...