La Guardería

Todo un caos...

Al entrar a la habitación decorada con colores vivos que contaban con imágenes la historia de la comunidad, Yoongi sintió un fuerte olor que lo sacudió de pronto, un escalofrío recorrió su cuerpo y sus ojos se abrieron buscando la fuente de ese dulce olor, - flores, flores de inicio de primavera y fresas recién cortadas, es delicioso - pensó, trató de huir pero Hoseok le pasó un brazo por el hombro y sonrió confiado diciéndole a Jin - ¡ya llegaron los niñeros Cool! - Jin y Nam se miraron y se rieron sin darse cuenta de lo que estaba pasando con Yoongi.

Yoongi se sentó al lado de los pequeños, el aroma lo embriagaba y sentía la necesidad de buscar de donde venía, nunca antes le había pasado esto, había captado algunos olores antes de algunos de los demás miembros de la comunidad , cuando su hermano encontró a su pareja y cuando sus padres salían por la mañana tenían ese olor de su pareja impregnado, pero nunca sintió necesidades ni le habían causado algún sentimiento particular, sintió su pantalón ajustándose poco a poco entre las piernas y sólo acertó a bajar su camiseta para cubrirlo, debía salir de ahí y pronto, no podría decirle a nadie de eso y menos a 4 desconocidos y a un montón de cachorros.

Empezó a descartar mentalmente, Hoseok no puede ser, venimos caminando juntos hace unos treinta minutos y no sentí todo esto, Nam tampoco, nos abrió la puerta y camino frente a nosotros y no capté este olor, ¿podría ser Jin?

Jin empezó a despertar a los pequeños, y al estar cerca de Yoongi, este último se cercioró que Jin no era la fuente de su ansiedad, y entonces lo golpeó la realidad, si no era ninguno de ellos sólo quedaba otra posibilidad, una que le parecía aún más estresante, era uno de esos niños, uno de los niños era la fuente de ese embriagante olor y el o la causante de ese bulto que lo estaba incomodando tanto, Jin miró de reojo a Yoongi para después observarlo más detenidamente, - ¿te sientes mal pequeño? - le preguntó Jin haciendo un ligero ceño en su frente.

Yoongi apenas podía moverse sin sentir de nuevo escalofríos, en ese momento los últimos pequeños iban despertando, Jiminie comenzó a quejarse de calor, Yoongi lo escucho quejarse y lo lo miró detenidamente, ese chiquillo era la cosa más tierna que había visto, además de su pequeña mascota no había sentido ternura por otro ser vivo, Jimin se incorporó despacio mientras se tallaba los ojos y empezó a olfatear, miró a su alrededor, se puso de pie soltándose de la mano de Tae y camino tambaleándose hasta Yoongi, olfateó de nuevo de pie frente a él se acercó tomo entre sus pequeñas manos la cara del adolescente y lo observó detenidamente, le dijo entonces con una voz aún más chiqueada y aguda de lo regular en Jimin, -hueles muy rico, ¿me abrazas?- le dijo casi susurrando frente la boca de Yoongi sin dejar de mirar sus labios, Yoongi podía sentir el calor del aliento del pequeño pero antes de que pudiera moverse y salir huyendo de ahí el pequeño se dejó caer sentado en su regazo aferrado a su camiseta adormilado aún, sus mejillas estaban sonrojadas y jadeaba un poco por la súbita elevación de temperatura en su cuerpo, Yoongi temblaba y apretaba fuertemente su pantalón a los lados de sus muslos, trataba de evitar reaccionar a ese animal dentro de él que le urgía tomar a ese chiquillo y robarselo, sabía que eso estaba mal y que ese era sólo un niño, por lo que estaba sintiendo seguramente su pareja destinada pero siendo sólo un niño, no podía causarle mal ni dejarse llevar, recordó entonces hace un par de años lo que sintió, en estas fechas, en una de las fiestas en su casa, muchas de las familias se reunieron llevando a sus hijos, recuerda que sintió algo parecido y subió a encerrarse a su cuarto, más tarde su madre le mencionó de una familia que tuvo que irse porque su pequeño empezó con fiebre, entonces no le dió importancia y le dió vergüenza decirle a su madre de lo ocurrido, quizá ni siquiera estaba relacionado, el pudó reaccionar a cualquiera de los tantos presentes en la fiesta y el niño pequeño simplemente estar enfermo, ahora tenía sentido, ese pequeño era aquel de la fiesta y por eso estaba en estas épocas aquí en la guardería.

Jin entendió lo q sucedía, ya había visto algo parecido cuando uno de sus hermanos conoció a su pareja que tenía más o menos la misma edad, ambos eran muy pequeños así que los separaron de inmediato pero ambas familias comenzaron a discutir la segura unión futura y ponerse de acuerdo para evitar su encuentro hasta quizá terminando la adolescencia.

- ¡Oh no! ¡¡¡Nam ayúdame!!!! -gritó Jin, fue lo último que escuchó Yoongi antes de perder el conocimiento, le pareció alcanzar a oír gritos de niños a lo lejos.