Justin
Sigo notando a mi Kendall muy intranquila, sé que esto de no recordar nada la tiene tan inquieta, sumándole que no he podido estar con ella estos últimos días. Por fin hemos terminado toda la publicidad de nuestro nuevo lanzamiento en mi empresa, así que requería de mi atención. Pero finalmente me puedo dar las vacaciones que quería a lado de ma princesse.
Hace un rato la dejé descansando, anoche me dejó dormir a su lado, nunca había dormido así de bien desde hace mucho tiempo. Reconozco que por mucho que la deseo, nunca haría algo que ella no quisiera, nunca la lastimaría, pero poco a poco haré que se gane mi confianza.
Hoy amanecí de muy buen humor, así que despertaré a Kendall, digo a "Channel", para que desayunemos en la terraza.
—Amour, despierta.— Susurro en su oído mientras ella sigue aferrada a mi con su cabeza recostada en mi pecho. Acaricio su cabello mientras huelo el maravilloso olor que tiene, es tan perfecta. —Tenemos que desayunar, tengo todo un día planeado para tí.— Ella se empieza a remover entre mis brazos y poco a poco abre sus ojos y los talla acostumbrándose a la luz.— Bonjour cheré.
—¿Qué dices?— Río ante su reacción. Bueno es comprensible, no pudo recordar ni su nombre, dudo mucho que recuerde algunas clases básicas de francés que estudias en toda escuela.
—Sólo dije buenos días.— Le señalé con una sonrisa en mi rostro. Ella al momento captó y se sonrojo apenada por no haberme entendido— ¿Cómo amaneciste?
— Muy bien, dormí mejor que los días anteriores.— Reconoció con ese toque de timidez que posee.
— No puedo estar más de acuerdo contigo.— En ese momento me acerqué a ella cautelosamente y selle mis labios contra los suyos, fue un beso corto y delicado pero su continuaba sabía que no podría detenerme después.
—Estuve pensando que podríamos tomar el desayuno en la terraza, hace un día soleado, es perfecto.— A mi Kendall se le iluminó el rostro ante mi propuesta, debe estar emocionada por salir de aquí, la he tenido días encerrada, casi y me siento mal al ver que está algo pálida.
—Me encantaría.— Dijo mientras me regalaba una gran sonrisa. Amo que sonría, y me voy a encargar de que dibuje más en su rostro.— Sólo necesito darme una ducha y enseguida iré contigo.
Pensé en ofrecerme a ayudarla a bañarse, pero eso sería un grave error, ella me pidió tiempo, y tengo que evitar cualquier tentación que pueda atraerme. Suficiente tengo durmiendo pegado a ella. Además necesito ordenar todo para ir a desayunar.
—No hay problema, enseguida le hablo a la enfermera para que te cambie la venda y te ayude.— Agregué mientras me ponía de pie de la cama.— Por mucho que quisiera ayudarte amour, sería demasiado tentador para mi.— Desvió la mirada de mí con la cara colorada y una sonrisa divertida plasmaba mi cara, me encanta cuando se sonroja.
Salgo de la habitación no sin antes darle un casto beso.
Busco con mi ama de llaves para que prepare un gran banquete para la terraza, y que se encargue personalmente de la decoración con las flores más bonitas que encuentre. Mientras me dirijo a mi habitación a darme un baño.
—Espero que te guste Channel, fue algo improvisado pero éste día apenas comienza.— Tomo su mano para darle un beso y veo que me sonríe en agradecimiento y empieza a comer. Mientras comemos en un cómodo silencio se me ocurre que podemos salir a la piscina un rato, a tomar el sol. Por mucho que quiera salir con ella a pasear, no quiero arriesgarme, más cuando me enteré que ya se ha emitido una alerta de su búsqueda. Dios me empieza a preocupar todo esto, quizás si me precipite al hacer las cosas de esta manera. Pero cuando la veo, sé que no hay nadie más con quien quisiera estar. Tendré que seguir con esto.
