Una miko pareja de un yokai???? (Sesshome)

capitulo 37

los tres hermanos se encontraban caminando, ya habia pasado un dia desde que se habian separado de todo el grupo para poder recuperar sus poderes que necesitaban para vencer a naraku, todos iban sumidos en un comodo silencio, sesshomaru iba en el centro y sus hermanos a sus lados, segun lo que les explico el monje miroku para llegar a aquel bosque durarán cinco dias en llegar, apenas comenzaba a amanecer y ya los hermanos estaban caminando.

HIKARI

QUE ABURRIMIENTO!!!!!!!!!!!me voy a morir.

dios, pero bueno podemos aprovechar este tiempo para hablar.

-digo lo mismo, al final no hemos podido hablar luego de la coronación- 

-creo que eso  fue mi culpa, estuvimos muy ocupados con este viaje y lo lamento mucho yukine- mire el camino, podia hablar con yukine, pero tampoco queria caerme de cara.

-no importa...hikari quiero saber algo- senti como mi bestia se removía en mi cabeza, caminando de un lado a otro. bufe.

-cálmate que me va a doler la cabeza- susurre en voz alta llamando la atencion de sesshomaru que poso su mirada en mi. sonrei y le tome el brazo para evitar caerme en cualquier lugar.

-pronto llegaremos a una aldea, podemos aprovechar para buscar un poco de comida- dijo inuyasha señalando una desviación que se encontraba en el sendero. 

inuyasha y yo posamos nuestra mirada en sesshomaru que asintio, una sonrisa salio de nuestros labios, sesshomaru al aceptar a inuyasha como otro hermano se volvio mas sensible, bueno el siempre ha sido a si, pero lo oculta y la gente le cree, pero el me ama y ese amor hace que consienta, el a todo ser que ame consiente es algo que no puede evitar mi hermano, el expresa de esa forma su amor y inuyasha al adentrarse en nuestro mundo, inconscientemente sesshomaru le dio los mismos privilegios que a mi.

-espero que no se de cuenta inuyasha, se podria aprovechar, jajajaja- escuche la voz de yuki y tenia toda la razon, si inuyasha se enterara quien sabria lo que se le meteria en la cabeza.

caminamos e hicimos la desviación al pueblo, nuevamente yukine y yo decidimos pasar la conversacion para los sueños, yo tenia que compartir con mis hermanos un rato, retomando los años de soledad y no solo mios, tambien de mis hermanos.

cuando llegamos al pueblo todas las miradas se encontraban en nosotros, me sentia incomoda, nunca me habia gustado llamar la atencion, se el porque nos estan mirando, el cabello blanco de sesshomaru y el mio no era algo muy comun, tal vez en los demonios, pero entre los humanos; me acerque mas a sesshomaru y el solo suspiro fastidiado, mire a inuyasha que aguantaba las ganas de reir. bufe, odiaba la suerte del idiota de mi hermano.

seguimos caminando, inuyasha preguntando cada cierto tiempo donde quedaba la cabaña de la sacerdotisa, luego de unos minutos caminando llegamos, pasa que la loca que estaba hay, vivia lejos del pueblo casi cerca del bosque, mientras mas nos acercabamos senti un raro aura, que en realidad me recordaba a...

YO

de la cabaña salio una niña pequeña, tenia unos cinco años, miraba con curiosidad a los tres hermanos, les brindo una sonrisa y con una seña los invito a entrar. la pequeña de pelo rojo entro al lado de hikari que miraba todo, buscando la presencia que conocia, miro a la pequeña y se agacho ante la mirada de sus hermanos.

-¿donde esta tu mama?- pregunto mostrando bien los movimientos de sus labios, la pequeña fruncio el ceño y luego le sonrio para comenzar a caminar por un pasillo. la cabaña era mas grande de lo que aparentaba por fuera, caminaron por el pasillo, sesshomaru e inuyasha se preguntaban por la pregunta que habia hecho su hermana, mientras que hikari solo se mantenia en silencio deteniéndose los tres cuando la pequeña lo hizo, delante de una puerta decorada con mariposas, hikari abrio la puerta y en medio de aquella sala se encontraba un mujer con una venda roja en los ojos y un vestido largo de color negro con mariposas blancas, sus cabellos negros por debajo de la cintura y estaba preparando te, los tres hermanos entraron y se arrodillaron delante de aquella mujer, el silencio duro unos minutos hasta que la sacerdotisa les entrego a cada uno su correspondiente te, aunque eran diferentes a su manera.

-caliope- hikari hablo despues del primer sorbo de te- cuando tiempo- la mujer de la venda sonrio cariñosamente.

-digo lo mismo pequeña aunque hay que decir que no te esperaba tan...distinta- hikari se rio sin poder evitarlo.

-digo lo mismo ¿donde se encuentra ren? - los dos hombres en aquel lugar se encontraban extrañados por la conversación, no sabian que su hermana conociera a una sacerdotisa tan peculiar.

-esta ayudando a entrenar a unos chicos, quieren ser guerreros- la mujer rio, la risa era tan melodiosa que es como si se estuviera escuchando un canto angelical.

-me lo imagino, nunca puede quedarse quieto- la peliblanca suspiro- ellos son mis hermanos mayores, sesshomaru y inuyasha- dijo para luego seguir tomando su te.

-un yokai y un hibrido... ¿porque no me sorprende que tengas familiares tan distintos? -asintio hacia donde se encontraban los hermanos que miraron a la mujer sorprendida, pero ambos se tranquilizaron al recordar que era una miko y bueno sus auras solo cambiaron un poco.

-¿sera porque los tuyos también lo son?-hikari se levanto y se coloco detras de caliope y comenzó a hacerle una trenza con sus cabellos.

-extrañaba esto- admitio la mujer mayor, hikari rio y asintio con una sonrisa.

-yo tambien...caliope estoy con mis hermanos en dirección al bosque que no te gusta que se nombre- la mujer se tenso- necesitamos pasar por ese lugar para lograr recuperar nuestros poderes demoníacos- explico y la mujer se volteo mirando a la peli blanca.

-es muy peligroso y lo sabes, te lo explique millones de veces tora- la voz de la mujer seguía serena, pero se notaba lo alterada que se encontraba.

-lo se, pero pronto tendremos que luchar y no podemos en estas condiciones, tenemos a una mujer en cinta caliope- susurro con los ojos en lagrimas, la mujer suspiro.

-ok...len- la pequeña niña volvió a aparecer por la puerta, se acerco a su madre y la abrazo, la pequeña sonrio y caliope no pude evitar seguirle- pequeña traeme el anillo que esta en el cuarto sagrado por favor- la pequeña salio corriendo y a los minutos regreso mostrando un anillo de lo mas sencillo y se lo entrego a la taisho menor que la abrazo.

-gracias- la mujer sonrio y miro a los dos taisho que no habian abierto la boca en ningun momento.