Capitulo 5

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Evelyn

El sabado por la mañana aún me encontraba lavando mi cabello. Con todo y haberlo lavado mas de 4 veces, sentía el olor a huevo.

- Maldita sea... - Susurré mientras seguia cepillandolo.

Me rendí y tiré el cepillo en mi cama. Estaba tan irritada que ni habia podido pensar en la forma en la que me vengaria. Aunque ya a este punto ni me importaba, daria todo para quitarme este horrible olor.

Busqué mi movil en mi mesita de noche y marqué el numero de Cilix. A la primera no contestó, pero seguí llamandola para molestarla.

- Jodes mucho. - Contestó, adormilada.

- ¿Como se quita el olor a huevo? -

- Depende al que te refieras. - Se burló.

- No seas asquerosa, - Soltó una risa ronca. - Nael me partió un huevo en la cabeza.

- Nisiquiera preguntaré porqué. - Suspiró.

- Solo dime, llevo tres horas lavandolo. - Me quejé.

- Son las 9am, asi que lo dudo mucho. - Escuché como cerraba puertas.

- Quizás el shampoo que usas es marca pirata. - Continuó.

- Cuando yo use porquerias en mi cabello, tú conseguirás novio. - Cilix empezó a reirse como una loca.

- No le veo lo gracioso. - Me senté en mi cama.

- Mira, solo dale tiempo, - Dijo entre risas. - ¿Quieres ir a una fiesta conmigo?

- No iré a una fiesta apestando a huevo. -

- Te dije que se irá eventualmente. - Escuché unos ladridos al otro lado de la linea y los recuerdos de la noche anterior me atacaron.

Me reí por lo bajo mientras recordaba la cara de Nael.

- Vamos, no seas mala. Ven conmigo. - Pidió Cilix, refiriendose a la fiesta.

- No te soporto, pero iré. -

Si me quedaba en estas cuatro paredes, me volveria loca.

- Perfecto, es una cita, asi que ponte tu vestido mas seductor. - Reí ante sus palabras.

Los ladridos de su lado cesaron, probablemente le estaba echando comida a Molly, su perrita. 

- Si, si, Romeo. ¿A que hora me vas a pasar a buscar? -

- 9pm, si no estas afuera cuando llegue, me largo. -

- Que romantica. - Le colgué y me levanté para dirigirme a la habitación de Trevor.

- ¡Trevor! ¡¿Quieres ir conmigo a una fiesta?! -  Pregunté desde el otro lado, después de tocar 3 veces.

No lo veo desde ayer, probablemente seguia molesto, asi que llevarlo a la fuesta seria una ofrenda de paz.

- ¡Evelyn, son las nueve de la mañana! - Me gritó mi padre desde su habitación.

Rodeé los ojos y continué tocando la puerta de mi hermano, después de todo, mi mejor habilidad es fastidiar.

Cuando estuve apunto de rendirme, Trevor abrió la puerta de mala gana.

- Buenos dias. - Sonreí inocentemente.

- Cada dia rezo para que te parta un rayo. - Se recostó del muro de la puerta.

- Cilix y yo iremos a una fiesta, ¿Quieres venir con nosotras? - Ignoré lo que dijo antes.

-¿Solo iran ustedes...? - Se cruzó de brazos.

- Pues claro, ¿Con quién mas iremos? - Dije, obvia.

- ¿Hora? -

- 9pm. -

- Ok. - Cerró su puerta.

- ¡De nada! - Grité mientras me alejaba.

- ¡Evelyn, si te vuelvo a escuchar gritando, no te dejaré ir a esa fiesta! - Amenazó mi padre desde su habitación.

Mira quien habla.

[🥀]

El dia pasó rápido, tan rapido que ya me encontraba alistandome para la fiesta. Eran las 8:30pm y aún me faltaba el maquillaje, pero Cilix puede esperarse, no hay manera de que salga de aqui sin maquillaje.

Dicidí usar un vestido negro, se pegaba a mi a mi cintura, pero no a mis piernas. Con todo y llegarme hasta por encima de mis muslos, la forma del vestido daba una imagen de niña inocente, pero el color claramente demostraba lo contrario. Las botas altas que llevaba me quedaban a la perfección, mi altura era una bendición.

También me aseguré de llevarme una chaqueta, la cual llevaria en la cintura si era necesario, por si algún chico queria pasarse de listo.

Nisiquiera quiero hablar de mi cabello, intenté todo lo que pude, pero aún sentia que apestaba, quizás ya eran cosas mias. Terminé haciendo una cola alta, dejando algunos flequillos afuera.

No es por ser egocentrica, pero me veia como toda una chica mala.

Por esa razón, para terminar con mi atuendo, decidí ir con un maquillaje oscuro y labial rojo.

Mientras me tomaba fotos para subirlas a mis redes sociales, mi hermano gritó.

- ¡Evelyn! ¡La loca de tu amiga esta haciendo un escandalo allá afuera! ¡Haznos una favor y vamonos! - Me imaginé que estaba en el primer piso.

Tomé mi bolso y metí mi celular en el. Bajé las escaleras y alfin pude escuchar el escandalo que estaba haciendo Cilix con su auto.

Mi hermano se veia desesperado y desde que me vió, salió.

- ¡Que ya viene! - Lo escuché discutir con Cilix mientras él se acercaba al auto.

Cerré la puerta y me uní a ellos.

- Trevor, hoy andas de tercera rueda. - Dijo Cilix, mientras manejaba.

Ella optó por usar un vestido pegado a todo su cuerpo, de verdad que el blanco le quedaba de maravilla.

- Eso quisieras tú. - Contestó Trevor.

Se nota que Trevor no pasó trabajo con su atuendo, solo esta usando unos pantalones negros y una camisa azul. Diría que se veia guapo, pero los hermanos no hacemos eso, encima de que para mi se veia muy basico.

- Hoy disfrutaremos como se debe, ¿Ok? - Les recordé a ambos.

- ¿Donde es la fiesta? - Preguntó Trevor.

- Bueno... - Cilix soltó una risa nerviosa.

- ¿Qué? - La observé.

- La fiesta es en la casa de Carl... -

Cambios Del CorazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora