Los Ojos del Alfa《ChenMin》#2

• S I E T E •

- Puedes sentirlo.

- Si.

Minseok acarició el pecho de JongDae mientras sentía perfectamente los latidos de su corazón, frenéticamente ruidosos. Era asombroso como ese sonido se acoplaba al mismo tiempo con el suyo, su corazón estaba igual de agitado. Se habían besado tanto que a veces olvidaban que no tenían mucho tiempo, el descanso de Minseok iba a terminar y JongDae debía regresar. Sin embargo, era imposible hacerlo si ambos no se separaban. Minseok quería permanecer a lado de JongDae, deseaba poder detener el tiempo y que ese momento durara para siempre. Pero nadie podía escapar de la realidad, ni siquiera el propio alfa.

Volvieron a besarse una última vez hasta que uno de los parecía reaccionar.

- Tienes que irte

- Lo se, pero no quiero - el alfa inclinó la cabeza del Omega y volvió a besarlo. Solo hacía que fuera más difícil para Minseok el negarse.

- Dae... Para - sus palabras no estaban acompañadas de sus actos y apenas y podía resistir la tentación. Besar a JongDae era demasiado adictivo para su bien - Mí turno está por comenzar... Alguien puede entrar - entre besos y caricias Minseok siguió insistiendo, tratando de cobrar en sentido común que estaba perdiendo. Sin embargo eso no duro y su mente se aclaró cuando el alfa susurró sobre su oído un apodo que hace tiempo no escuchaba.

- Minnie...

El rostro de Minseok se contrajo por completo, sintiéndose asqueado por la palabra y todo lo que esta significaba para el. Dejó de besar al alfa y se alejo de sus brazos.

- No me digas así, odio ese apodo - el frío sonido de su voz fue suficiente para hacer entender al alfa que no estaba bromeando. Minseok se mantuvo alejado de JongDae, mientras observaba al alfa, solo unos centímetros los separaba, pero parecían metros de distancia.

- Minseok, lo odias tanto. Lo siento, lo siento mucho - el no sabía porque Minseok estaba tan dolido y enojado al mismo tiempo, no sabía la razón del desprecio al apodo. Sin embargo, el no preguntó y solo se disculpó.

JongDae no hizo nada más que disculparse y eso hacía que Minseok se sintiera peor. Era algo que no podía evitar y lamentaba que sus traumas le afectaran en los momentos menos indicados.

- No es tu culpa, no te disculpes. No lo sabías después de todo - quizás debió estar en silencio pero JongDae parecía igual de dolido por su inconciente actitud ante solo un apodo - Minnie... Así es como el siempre me decía - lo que alguna vez siempre había amado oir hoy lo odiaba - Mí antiguo alfa. Los siento es mí culpa por no decirlo - nombrarlo era siempre recordar su lamentable rostro y su abandono.

- Minseok...- JongDaeDae se acercó y acarició el rostro del Omega - Estoy bien lo entiendo, si. Te quiero - JongDae beso la frente de Minseok y lo abrazó.

Se mantuvieron en silencio mientras la calma volvía a invadirlos, había tantas heridas que sanar y tantas cosas que ambos no sabían del otro. Pero eso no evitaba que su amor se viera afectado, ni la confianza que comenzaban a construir poco a poco.

JongDae se despidió de Minseok después de eso y salió del hospital directo a la reunión que tenía pactada con el resto de los alfas del consejo. Últimamente estaban teniendo más reuniones de las que deberían y sumado a que lo temas parecían siempre los mismos, se había cansado. Por eso en esta ocasión había sido él quien citó a cada integrante, dejando al alfa Lee por último, ya que era quien siempre insistía con el mismo tema en cada reunión. Su plan para traer a Sehun de vuelta debía empezar y el alfa Lee solo estaba retrasando todo. El exilio de su hermano, el cual había sido obligado a tomar fue injusto y era momento de que algo como eso no volviera a pasar. Solo esperaba que los aldeanos entendieran algo tan simple.