〻Ultraviolence〻 Jimsu.

ᝰTwo

Yoongi suspiró por enésima vez mientras leía el menú de aquel restaurante, habían pasado unas cuantas semanas desde el incidente en la cocina y las cosas habían estado sorprendentemente bien.

Jimin ya no gritaba y no le había levantado la mano ni una sola vez en ese tiempo. Esperaba a su novio quién hablaba con el hombre que dirigía el proyecto Kim. Kim Namjoon, tenía el cabello negro igual que Yoongi, era un hombre bastante alto con un rostro hermosísimo y no, no es que Yoongi lo detallara pero es que llevaba como media hora hablando con su pareja.

Jimin sonreía abiertamente haciendo que sus ojos se entrecerraran, el moreno que hablaba con él animadamente en la entrada del restaurante sonrío también mostrando un par de hoyuelos adorables. Joder, era hermoso.

Un mesero se acercó a la mesa de Yoongi quien se encontraba absorto en la conversación que se llevaba a varios metros de él pero aún así no podía llega a escuchar nada de ella.

-¿Que puedo ofrecerle? -Min volteó su vista y se sonrojo, ¿Hoseok trabaja allí? Al parecer el pelirrojo también lo reconoció al ver mejor su rostro, vaya que el pálido había cambiado mucho últimamente.- ¿Yoongi?

-Oh, hola Hoseok. Hace mucho no se de ti. -susurró nervioso mientras bajaba el menú y respiraba profundamente, Jung había sido su mejor amigo tiempo atrás pero por petición de Jimin, dejo de escribirle y verlo.

-¿Después de tantos años eso es lo que tienes que decirme? ¿Sigues con el idiota de Jimin? -el mayor se removió en la mesa algo incómodo con el tono en el cual dijo aquello, no tenia nada que decirle a Hoseok de su vida personal. Al no recibir respuesta el mesero suspiró.- ¿Después de aquella golpiza, te quedaste con él? -Yoongi relamió sus labios tomando la copa de agua que se encontraba delante de él bebiéndola lentamente mientras recordaba cuando había querido estudiar en la universidad y Jimin le sugirió que no lo hiciera por que no podrían verse más seguido.

La primera vez que lo golpeó fue cuando se entero que se había inscrito en la universidad gracias a Hoseok, fue horrible.

Terminó con una muñequera y un desplazamiento en dos costillas, su mejilla había estado hinchada por varios días y pero el dolor en su pecho era terrible, mucho más que el físico.

Su mejor amigo lo había visitado para saber por que de la nada retiro todos sus papeles de la universidad y lo encontró allí, tirado y lloroso en el suelo del departamento que tenia en aquella época junto a Jimin. Habían qpeleado recientemente y un nuevo cardenal de oscuros moretones se formaba en la piel pálida del menor.

-Amor, debo irme. Tengo que revisar unas cosas en la oficina junto a Kim.-Park se acercó a la mesa y fulminó con la mirada a Hoseok reconociéndolo inmediatamente, había ido a hablar tan solo unos segundos con el señor Kim para aclarar unas cosas del proyecto.- Jung Hoseok que sorpresa encontrarte aquí, ¿Eres camarero? Se venía venir, digamos que es donde debes estar. Una basura como tu debe ir en el basurero.

- Jimin. -Yoongi regaño a su novio arrepintiéndose en el acto, pero no podía dejar que le hablara así al que había sido su amigo por muchos años, incluso más años de los que llevaba saliendo con Park, con las manos algo temblorosas tomo el brazo de su novio colocándose de pie. Tomando una profunda respiración mientras se preparaba mentalmente a las consecuencias de lo que estaba haciendo.- Vamos, debes ir a trabajar y yo realmente no tengo hambre, el señor Kim debe estar esperándote.

Por el momento Jimin no pensó en gritarle o golpearlo por haberlo interrumpido e incluso atreverse a regañarlo. Solo pensó en lo que había dicho y una sonrisa se instalo en su rostro, era cierto, el señor Kim lo debía estar esperando y Jimin no era una persona a la cual le gustaba hacer esperar al resto. Ignorando al pelirrojo quien apretaba con fuerza el bolígrafo en su mano y lo miraba con odio, tomó la mano de su novio acariciándola con su pulgar y observándolo con una adorable sonrisa, Yoongi sintió miedo, miedo real al ver a su novio tan feliz.