Esta vez no estabas sola, estabas acompañada de un tipo muy guapo, en aquel momento supuse que era tu novio.
Al instante que nuestras miradas se cruzaron, él se dió cuenta de mi presencia, pero pareció no darle importancia, tú me dedicaste una tierna mirada y luego una muy suave pero muy cálida sonrisa, yo estaba muy sorprendido al verte luego de casi cuatro meses y no tenía ninguna expresión en mi rostro aparte de la confusión y seguramente la sorpresa, entonces él sujetó tú mano y te condujó a tu asiento.
Y yo no pudé evitar notar que tú te veías muy hermosa.
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Te Amé, Te Amo Y Te Amaré.
Short StoryPara la mujer que amé, amo y amaré, con la esperanza que algún día me recuerde... Gabriela, en nuestras vidas siempre hay situaciones que no podemos controlar, aveces cuando suceden cambian todos nuestros planes y por más que deseemos nunca volverán...
