V E I N T I U N O

1.2K 118 59
                                    

—Janeth, ¿qué le paso? ¿Qué hace aquí?-preguntó. La mujer miraba el suelo con nervios, paso con vergüenza, saludando a su consuegra.

—Soy Janeth, su consuegra...- dijo con una sonrisa tímida.

—Sobre eso...Tía..Felix terminó conmigo hoy día. - dijo puchereando.

—Ay, Binnie. ¿Qué te dije? Paciencia. No es definitivo...- dijo su mamá. Janeth alzó las cejas con sorpresa y suspiró, sin saber bien que hacer.

—Entonces yo...

—Pero cuenteme noma. ¿Quiere un cafecito? Dos de café y tres de azúcar ¿verda?- ella asintió y se sentó junto a su consuegra, conversando un poco. El joven volvió con la taza y la mujer frunció los labios, agradeciendo.- ¿Qué paso tía?

La mujer tiritó un poco y terminó sollozando, abrazando a su yerno.

—Pensé que era algo... Simple.- dijo cómo pudo y sacó los papeles de la carpeta. -Hace rato vengo con dolores, con... ardores, y molestias que ignoré demasiado, las atribui a la edad, el estrés... Changbin..- enseñó las radiografías, de su abdomen y las manchas destacadas, las cuáles el menor no entendía. - De hace mucho venía sin poder respirar bien... y dije, ya, quizá estoy resfriada, voy a ir porque ya me siento mal, que me receten algo y listo.. pero..  - Changbin tomó peso de su situación, imaginando cualquier cosa, sintiendo aquel mal presentimiento.

—No sé cómo decirle a Felix.- la angustia en su voz.- Yo... No sé si me voy a morir o si no..- el joven y su madre acunaron a la mujer entre sus brazos, el chiquillo beso su cabello, apretando su agarre, mostrándole con su abrazo el apoyo que le daba y le daría siempre. No podía digerir bien la noticia aún.

—Pero... ¿cómo le digo a mi hijo que tengo cáncer?-

Changbin mordió su labio, aguantando el nudo en su garganta mientras ella lloraba en sus brazos. -No sé cómo decirle...Es...Es mi bebé, ¿cómo?

—Tía...- dijo suavecito.-Voy a estar siempre con ustedes, voy a acompañarlos en esto, usted tiene que...Ser suave al contarle pero...Tiene que hacerlo y pronto.

—Lo sé...-dijo.-Pero no puedo con esto... Y no sé si el pueda..

—Claro que van a poder son fuertes...Vamos a poder. No los voy a dejar solos. Menos ahora.- dijo el pelinegro. -Hay que tirar para arriba no ma pue tia. Tenemos que cumplir bien sus tratamientos, cuidarla mucho y tener fe en que uste va a salir de esta  ¿ya? -dijo tomando su mano. Ella asintió y tomó del café para relajarse un poco. Changbin acarició su pelo, abrazandola.- Ya...No llore más, que se pone fea.

La mujer rió suavemente.

—¿Y por qué te terminó mi hijo?- preguntó.

—Ah... Fue mi culpa, yo...Me puse weon. -dijo. -Yo...Le grité y lo zamarree del brazo. -dijo con un suspiro frotando el puente de su nariz.- Y hace un tiempo le dije que si me llegaba a poner así de weon con él, que terminara conmigo. Y...Cumplió con su palabra.

—Pero... Puta oh, Binnie que las cagas.- el joven bufó.

—Si ya sé que las cagué, pero estaba muy enojado y decepcionado. Y... No es por justificarme, pero la había pasao de la perra todo el día y Felix no me contestaba...Me enojé. - se golpeó la pierna y suspiró.-Él... Había estado ocupando los hielos. Los ocupó todos, las cubeteras estaban peladas.- dijo.- Y tenía los brazos pero congeladisimos, y estaba llorando mirando un punto fijo. Le pregunté si lo había hecho, y no me respondía, me miró no ma. Le seguí preguntando. Y le grité, que si lo había hecho que aceptara el cagazo, que me respondiese y le agarré el brazo. -narró. - Pero tenía rabia. Porque él sabe qué... Puede hablarme, que puede decirme lo que sea que pase por su cabeza. Qué si no quería estar solo me llamase, yo iba a llegar allá igual. Además me prometió que no lo iba a hacer nunca más porque para el, colocarse los hielos es lo mismo que cortarse...

—Felix de verdad esta mal últimamente. -dijo ella con preocupación. Changbin asintió.

—Yo no sé que hacer, no cacho na de eso así que no sé cómo apoyarlo o que hacer en caso de que le den crisis. Cuando le dio una, yo solo... Atine a inculcarle ley de atracción. Onda le dije que repitiera en su cabeza que estaba bien, que iba a estar bien. Y ahí se me tranquilizo...Pero tía a Felix no le hace bien el psicólogo.

Janeth suspiró, asintiendo.

—Me he dado cuenta. Este tipo, solo le receta pastillas, pastillas, y más pastillas. Ni siquiera le aconseja no se po, hacer actividad física, nada. Siento que nisiquiera lo escucha. -

—Guaton... ¿Y no has probao con llevarlo dónde tu tío?- preguntó su mamá. Changbin abrió los ojos y asintió.

—Verda... Tia Jane, mi tío es psicólogo y bueno no sé no cacho mucho pero se supone que hace bien su pega. Voy a hablar con él onda... Si puede darle una terapia y que no involucre pastillas... -dijo el pelinegro. Ella sonrió.

—Gracias, Changbin. De todo corazón.

—Aquí estoy para ustedes, tía.-

《♡》
ÑIÑIÑI cortito pero llevo muchos días sin subir cap u.u no me odien

Yo soy de calle 《Changlix》 》Chilensis《Donde viven las historias. Descúbrelo ahora