Detrás de la Máscara [Inosuke x Lectora]

Capítulo 6

Aquella caja negra estaba llena de polvo y un poco rota en algunas partes. Una vez que la sacaste guardaste todo sin doblar y cerraste amontonando todo.

Abriste lentamente la caja y te encontraste con aquella filosa espada. Tenía leves rupturas. La hoja de aquella era naranja rojizo el cual se degradaba en el filo con un blanco crema. La empuñadura era de un naranja más oscuro con rayas negras rodeandola

-a si que esta era tu espada abuelo...- te dijiste a ti misma

Tocaste con delicadeza aquel metal y un escalofrío recorrió todo tu cuerpo. Recordabas haber visto al abuelo por última vez peleando con aquel fuerte demonio.

-eras realmente fuerte...pero sigo sin entender por qué rechazaste la oferta de ser un pilar...tenias demaciado talento...- miraste la espada un poco más hasta que la curiosidad te invadió por completo y no resistirse tomar aquella empuñadura

-mmh...es...un poco pesada- dijiste, por suerte tenías bastante fuerza tal vez un octavo de lo que tu abuelo tenía

La miraste un poco más. Luego recordaste las espadas de inosuke, estas no eran como una espada normal, esta tenían el filo en sierra.

-mmhh...aunque...dijo que fue el quien las creo, tal vez no necesita a alguien que las haga por él...impresionante- dijiste-...pero...que aliento usaba el abuelo?...- realmente no lo recordabas

Y es que, aunque no lo pareciera, sabías bastante sobre los cazadores de demonios, gracias a las anécdotas y enseñanzas del abuelo. Sabías que existían distintos alimentos. Aliento de agua, Aliento de fuego, Aliento de viento, Aliento de roca, Aliento de niebla Y así. Pero no recordabas con exactitud el aliento que usaba tu abuelo

-aveces los espadachines tienen espadas con características similares a las de su aliento...- pero, la espada del abuelo no tenía ninguna característica rara...o si?

Miraste la empuñadura y notaste lo singular que era esta. Sin mencionar la guarda de aquella, la cual parecía dos garras que simulaban sostener la hoja.

-parece un animal salvaje...depredaror tal vez...- pensaste- lo mas probable es que el abuelo haya tenido alguna especie de aliento de depredador, de mamífero....ahg!! Piensa!- golpeaste tu cabeza-....bueno....creo que ya debería irme a dormir...- miraste desganada la espada. Este día fue muy raro, sin darte cuenta tuviste una pequeña crisis existencial algo comun para tu edad por suerte.

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Seguías en tu cama la mañana siguiente. El sol había salido hace bastante tiempo pero decidiste no vender más por un tiempo. Estabas entre las sábanas sin ganas de levantarte, La verdad no solias dormir hasta tarde pero realmente te encantaba.

Un ruido llamo tu atención, rápidamente te levantaste mientras que tu cabello se encontraba despeinado, parecía una escoba. Miraste por la ventana y te encontraste con un cuervo te miro, giro la cabeza un par de veces y volvió a golpear la ventana

Saliste de entre las sábanas, acomodaste un poco tu cabello para estar medianamente presentable y abriste el vidrio

-hola amigo...- lo miraste con un poco de tristeza mientras lo acariciabas-...tienes suerte de que inosuke no este aquí...te abría querido devorar jaja- sonreiste

Bajaste un poco la mirada y notaste que aquel animal traía un papel enrollado consigo

-mh?...que es esto?...-lo tomaste con delicadeza para no lastimar al animal