Tormenta.

capítulo.- 3

Nozomi era la mejor amiga de Nico, se conocían de mucho tiempo cuando comencé a salir con Nico en la preparatoria ellas ya se conocían, Nozomi era agradable, siempre nos ayudaba cuando Nico y yo peleabamos.

Ahora dudo mucho que quiera ayudar, pero no importa necesito encontrar a Nico y pedirle perdón.

-Nozomi, cuanto tiempo.- Salude de forma normal, ella solo me miró sin ninguna emoción en su rostro.

-Maki, ya ah pasado un tiempo.- Hablo aún sin mostrar ninguna emoción.

-Ahora mismo tengo clase, pero podemos hablar después, te parece? Realmente hay algunas cosas que necesito preguntarte.- Mire mi reloj afirmando que solo tenia pocos minutos para llegar a mi clase, pero realmente quería saber de Nico.

-Yo...no.- Miro alrededor de forma incómoda.- si lo que quieres es saber de ella, lamento decirte que no te diré nada, la dejaste muy mal y lo último que quiero es verla así de nuevo.-Me miró un poco molesta y dio la vuelta para irse.

-Espera.- La tome del brazo para impedir que se marchara.- Quiero hablar con ella, una ultima vez,yo...por favor.- sentí las lágrimas queriendo salir de mis ojos.

-No pienso decirte nada, ella ahora está muy bien, Adiós Maki.- Dio la vuelta y se fue.

Llegue a mi clase atrasada por cinco minutos, preste toda la atención posible pero mi cabeza esta pensando en Nico, quería saber de ella, necesitaba encontrarla.

Las clases terminaron alrededor del medio día, tenia ensayos y proyectos que entregar para las próximas semanas, además debía ayudar a mis padres en el hospital.

Aun tenía tiempo de ir por algo para almorzar antes de llegar al hospital, fui a la cafetería de la universidad para comprar un café y algún sándwich, estos meses apenas y conseguía comer tres veces al día, no tenía tiempo ni de comer algo, ya sea por estar en el hospital, haciendo algún proyecto atrasado o solo por pensar en ella.

Entre a comedor donde intercambiaban el dinero por ticke's de comida, escogí un sándwich de huevo y un jugo de naranja, fui a donde me daban mis alimento y me dirigí a buscar un lugar tranquilo para comer. En unas de las mesas vi nuevamente a Nozomi junto a una chica de cabello rubio.

Me acerqué a ellas, no importaba lo que tendría que hacer, conseguiría que me dijera algo sobre el paradero de Nico.

-Nozomi. - La llame cuando ya estaba cerca de su mesa, ambas mujeres voltearon a verme, la cara de desagrado de Nozomi no paso desapercibida por mi.

-Nishikino-san creo que ya te dije que no te diré nada de ella - Hablo con fastidio regresado a su posición anterior.

-Nishikino-san?. - Me miró sorprendida la rubia. - Es ella Nozomi? es la misma que lastimó a Nico? - Ahora me miró con molestia mientras tensaba la mandíbula. - Vete si no quieres que te muela a golpes.

-Yo solo quiero saber de ella. - Hable mirando al suelo. - Me arrepiento muchísimo, quiero hablar con ella, necesito saber donde esta. - Mi voz se quebró al finalizar mis palabras, día con día me atormentaba por mis acciones, yo también estoy pagando caro.

-Deja de dar lástima y vete, tu sola presencia es desagradable. - La rubia se acomodo en su silla y siguió comiendo.

Aun con la cabeza gacha camine afuera de la cafetería, el hambre se me había ido por completo, como mi oportunidad de saber algo de Nico.

Ya había pasado casi tres meses de mi aniversario con Nico, tres meses donde solo me centre en mis estudios y en ahogarme en mis pensamientos negativos.

Aun mis padres no sabían de mi ruptura con Nico, ellos la querían como otra hija, Nico siempre fue agradable con ellos y viceversa, mis padres estaban seguros que ella sería mi compañera de vida, yo también los pensaba.

Por las noches aún me preguntaba por que hice esas estupideces de engañar a Nico, que pensaba, lo tenia todo, mis padres me apoyaban en mi relación, tenia una hermosa y amorosa novia que me consentía cada que llegaba de un tedioso día de estudios.

Simplemente era una imbécil.

Estaba tan enfrascada en mis pensamientos que no escuche mi teléfono sonar en mi bolsillo, rápidamente lo saque y cheque que tenia una llamada perdida de mi padre.

Rápidamente le devolví la llamada.

- Maki, necesito que vengas al hospital.- La voz fuertemente de mi padre sonó en la bocina.

- Estaré en unos quince minutos, padre. -

-Hay algo que necesitamos hablar. - Y corto la llamada.

Esto me preocupo demasiado, se escuchaba enojado y eso no era para nada bueno.

Rápidamente tome el bus que me dejaba casi frente al hospital, mientras mas rápido llegue mejor.

Llegue al gran hospital Nishikino, no necesite identificarme ya que todos sabían que era la hija de los dueños, subí por el elevador para dirigirme directo al despacho de mi padre, y antes de entrar toque tres veces.

-Adelante. -

-Permiso. - Hable con voz suave. - Qué necesitas padre.

-Hace un rato recibí una llamada de la universidad, preguntado si estábamos teniendo problemas, tus calificaciónes son bajas, mucho, además estas apunto de recursar dos asignaturas. - Me miró directo a los ojos buscando una explicación, su nariz estaba ligeramente arrugada y su ceño fruncido.

-Yo no voy a recursar, estoy segura que juntare los puntos para pasar, te lo aseguro padre. - Apreté mis puños y baje la mirada.

-Es obvio que no vas a recursar, primero te desheredo, como es posible que tengas unas calificaciónes tan mediocres?. - Ahora se levantó de su silla y camino delante de su escritorio, parándose frente a mi. - Qué está pasando contigo hija? Tienes problemas con Nico-san?. - Al escuchar su nombre sólo me encogí de hombros.

-Padre es algo que quería contarles a ti y a mamá, sobre Nico-chan. - Me frote las manos de forma nerviosa, no estoy segura de como se lo tomarán. 

Mi padre llamó a mamá que no tardó en llegar al despacho, mirando con confusión la escena.

- Qué está pasando querido?. -

- Maki quiere decirnos algo. -

Mire a mamá que me miraba con preocupación.

-Nico-chan y yo terminamos desde hace unos meses, no se los quería decir porque no se como se lo iban a tomar, mis calificaciones bajas no tienen nada que ver con ella, todo es mi culpa, no supe ser una persona responsable. - Me incline pidiendo disculpas.

-Qué sucedió? Por que rompieron?. - Pregunto mi madre preocupada.

-Fue mi culpa, todo fue mi culpa. - Solté unas cuantas lágrimas al decir eso.

-Maki que sucedió?. - La voz autoritaria de mi padre resonó en la habitación.

-Yo... - Tenía que ser sincera así me ganará sus peores palabras, me lo merecía. - Le fui infiel con una...unas chicas.

Mi madre me miró con asombro me tras llevaba sus manos a sus labios sorprendida, y mi padre negó lentamente.

- Me avergüenzo de ti Maki. - Hablo con voz fuerte. - Tu madre y yo no criamos a una cobarde, no te enseñamos de esa manera.

Sus palabras me dolían pero me las merecía.

Eso y mucho más.

Fin del capitulo.

Tuve unos problemas al actualizar, pido disculpas.

Voten y comenten.    M.A