Tormenta.

Capítulo. 4

La pelea con mi padre me dejo abatida, siempre intente ser una hija ejemplar, con buenas calificaciones una conducta impecable y buenos modales, tal como mi padre me enseñó, todo para que el estuviera orgulloso de mi.

Sus palabras me hirieron demasiado, justo lo que merezco. Mi madre me miró con tanta decepción que mejor evite su mirada todo el tiempo. Ni siquiera yo se porque hice aquello, quisiera regresar el tiempo para evitar mis acciones y amar a Nico de la forma en que ella lo merecía, siempre fue la mejor conmigo.

Llegue al departamento que compartimos, aun permanecía su olor dulce a frutas, me fui directo a la habitación para recostarme a llorar en la cama, después de las pelea con mis padres me quede un rato deambulando por el hospital pensando en lo que me había dicho.

Me quitaría las tarjetas de crédito y dejarían de pagar el alquiler de este departamento, ahora mis horas en el hospital no eran opcionales, debía trabajar ahí para poder pagarme la universidad y el alquiler, dijo que para que aprendiera a ser mas responsable y enfocarme en lo que es verdaderamente importante, mis estudios. Ahora tendría más cosas en que pensar y ocupar mi cabeza, al menos así ya no pensaría tanto en ella.

Así pasaron algunos días, No tenía amigos en la universidad, los únicos que consideraba amigos sólo me querían por mi dinero, ahora mis días eran por la mañana universidad y en la tarde estaba en el hospital hasta que mi padre me dejara ir, algunas veces era temprano otras llegaba hasta media noche a dormir.

Hoy era viernes y entraba tarde a la uni, el profesor mando un comunicado diciendo que no se presentaría, me levanté más tarde de lo habitual, realmente necesitaba esas horas extra de sueño, últimamente llegaba sólo a dormir después de las guardias del hospital. Me dirigía a la cocina, al llegar me vino una imagen a la cabeza, cuando Nico aún estaba aqui, cuando preparaba el desayuno mientras cantaba una de sus tantas canciones favoritas.

Uno pequeña sonrisa se asomo de mis labios al recordar,;

-Flasblack-

El sol me daba directamente en la cara, me tape nuevamente con las cobijas pero el ruido en la cocina y un olor delicioso hicieron que fuera imposible conciliar el sueño otra vez, me levanté frotandome los ojos para despejarme un poco, camine al baño para lavarme el rostro y los dientes, cepille mi cabello y me fui a buscar un cambio de ropa.

Ya con un pantalón claro y una polera rosa camine hacia la cocina, escuchando más fuerte la voz de Nico cantando.

Estaba paraba frente a la estufa con su hermoso mandil rosa de conejitos, me puse detrás de ella mirando que cocinaba un poco de tocino con algunas verduras.

-Uhmm~ huele delicioso Nico-chan.- Hable suavemente poniendo mi cabeza en su hombro

-Maki-chan Buenos días - Nico tomó una de mis manos para que rodeará su cintura, ella se giro para quedar frente a mi. - Por las mañanas siempre eres muy cariñosa.- Nico soltó una pequeña risa y tomó mi rostro entre sus manos para darme un suave beso que correspondí al instante.

Después de nuestra sesión de besos le ayude a servir el café y llevar los platos a la mesa para desayunar juntas, normalmente hablábamos de nuestros días o algunos pendientes de las compras que debíamos hacer para la cena.

-Fin de flasback-

Parpadeo sintiendo lágrimas caer por mis mejillas, ahora lo único a lo que puedo a aferrarme son los recuerdos, que al mismo tiempo me atormentan, deje ir a la única persona que necesitaba para seguir adelante.

Mire el departamento, ahora frío y sombrío, todo perdió color desde su partida.

Aun tengo motivos para seguir viviendo?...

Fin del capitulo.

Ey!

Siento que estoy alargando un poco el sufrimiento de Maki-chan pero quiero crear una historia donde ella sea quien sufra, la mayoría de fics Nico es quien sufre y es muy repetitivo.

Gracias por leer.   Voten y Comenten.  M.A

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