Si nunca sucedió

Capítulo 20

Estaba cansado, cansado de todo, cuando era minero ni siquiera tenía sitio en la vida, ¿Por ser pobre? ....¿Por su oficio? La gente se reía de él y le menospreciaba. Ahora que era gladiador ni siquiera podía salir de Kaon o pisar Iacon, ¿Por qué? ¿Porque era un bruto, sanguinario y podría matar incluso fuera de su trabajo? Ya no lo soportaba, solo existían peros...nadie le iba a seguir mandando de esa forma, si era posible, encararia al mismísimo consejo.

Y como lo penso...sucedió;

- Gladiador de Kaon, sabe que tiene prohibida la entrada a esta ciudad - habló uno de ellos, los mismísimos Prime.

- Perdonar, que haya entrado de esta forma pero vengo a proponerles algo, por el bien de los cybertronianos, por la igualdad entre todos - habló alto y seguro Megatronus.

- Te escuchamos, joven - Era Solus Prime quien hablaba.

- Desde sparkling, he visto y vivido desigualdad, no se trata de vivir separados y por categorías, ricos y pobres, cultos y incultos...bots que no tienen como aprender porque no pueden, por la manera en la que viven...se les está dando lo mejor a los que tienen una vida digna y se nos está dejando caer a los que no podemos llevar ni siquiera nuestra vida, se nos está ocultando del mundo, se nos separa por ciudades, por estudios y riquezas...esto no es igualdad. Yo fui minero, y lo digo con orgullo y sin vergüenza, hice lo que pude y ahora me gano la vida de gladiador, algo mejor, pero aunque esto los bots lo vean bien y se aficcionen no saben lo que hay detrás, nos temen y no saben lo buenas personas que podemos llegar a ser, se nos tiene enjaulados como bestias en el Coliseo, nuestra única casa, y no se nos deja salir de Kaon y pisar otra ciudad.
Yo os propongo una prueba, mi sparkmate vive aquí en Iacon, solo dejarme un tiempo, vigilarme si es necesario, demostrare que somos capaces de pasear libres por cualquier ciudad sin usar la fuerza o nuestros hábitos de pelea, porque esto es solo un trabajo para ganar nuestro energon. Por favor, un único intento - levantó la vista y miró a todos serio y decidido.

- Es peligroso - era Sentinel, no se fiaba.

- Pero es cierto lo que pasa, es una mala imagen para Cybertron- habló Prima.

Empezaron a hablar entre ellos en voz baja, se intercambiaban miradas y gestos...Megatronus solo esperaba impaciente.

- Hemos tomado una decisión, gladiador - era Alpha.

- Soy todo receptores, sabios bots.

- Te concedemos la propuesta, pero serás vigilado de vez en cuando, un paso en falso y serás privado de tu trabajo, vida social y encarcelado por eones - Megatronus Prime le había dicho aquellas palabras, el mismísimo ídolo del gladiador se lo había concedido.

- Os lo agradezco con toda mi spark, muchísimas gracias, les demostrare que soy capaz de vivir en cualquier lado de forma tranquila. - les hizo una reverencia y salió a paso lento.

Mientras se iba escuchó a una de las femme Prime decir que quien sería su conjux. ¿Acaso un gladiador no puede tener conjux? Se reía para sus adentros, ahora solo quería llamar al apartamento de Orion y contarle que podría estar con el por un tiempo.

Llamaron a la puerta, Orion pensó que sería Dion o algún otro compañero pero cuando se encontró cara a cara con su amado grisáceo se emocionó, le saltó encima abrazandolo fuertemente.
Megatronus iba a besarlo pero vio a Ultra Magnus acercarse hasta ellos, entonces soltó a Orión.

- ¿Que haces aquí, Megatronus? - lo miro de mala forma.

- Oh, me llamó por mi designación, que extraño....¿Quieres echarme verdad? Pues te digo que los Prime me han dejado estar en Iacon, a si que no puedes hacer nada. Orión, ¿Me permites quedarme en tu apartamento? - y dicho esto lo miró triunfante.

Ultra Magnus solo podía callar y aguantarse las ganas, eran palabras de Primes. Pasaba de seguir viéndole la cara. Se marchó del hall.

- Te he echado de menos...¿Es cierto que te han hablado los Prime? - le dijo contento el youngling.

- ¿Te crees que estaría aquí? Ya te dije que esto cambiaría y lo he hecho,este solo es el primer paso...el segundo es echar a ese Ultramierda de aquí, no le soporto y si no....solo tendrá que aguantar tus gemidos cuando tengamos interfaz descontrolada - le sonrío y le ladeo la cara para darle un besito.

Orion se puso rojo, cerró la puerta y se fueron a algún lado de la casa a hablar, comer o lo que fuera.