Capitulo 65

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Llegamos a las puertas de la Abadia, saludé al sacerdote quien tenía una sonrisa enorme y eso me daba un poco de paz dentro de todo esto no era una persona que le dieran nervios porque toda mi vida he estado frente a cámaras y personas que me critican pero justo en este momento esa parte de mi que nunca fue nerviosa estaba saliendo.

—Hija mía, ¿estás lista?—pregunta el sacerdote y mis nervios me traicionaron soltando una risa de nervios

—Si tengo nervios pero debemos hacerlo—digo sonriendo, entre más nos demoramos mis nervios crecen

—¿Quieres unos minutos más?—pregunta y niego de inmediato necesitaba que esto terminara de una vez

—¿Quien te entregara?—pregunta, en el itinerario que había hecho yo había puesto a mi padre no se el porque de esta pregunta si todo ya estaba estipulado

—Será en partes, la abadía es enorme y dividimos en 3 para cada quien caminar contigo una parte, al último será mi padre por supuesto—dice William sonriendo eso no sabia yo era una sorpresa

—¿Que? ¿En qué momento paso esto?—pregunte con cara dudosa y vi una sonrisa de cómplices de William y Harry una sonrisa que hace mucho no veía

—Tu en nuestras bodas rompiste itinerarios porque nosotros ¿no?—dice Harry y solo negué

—Pónganse los cuatros como la familia que son—dice el sacerdote, mis hermanos se pusieron a nuestro lado

—Dios bendice a esta familia—dice y pone su mano entre los cuatro

—¿Quien empezará la caminata?—pregunta y encogí los hombros porque no sabia

—¡Yo!—dice Harry y se pone a mi lado dándome su brazo, se escuchó la canción de fondo y era la señal para empezar a caminar, no se a donde diablos se habían metido William y mi padre

—Aún y con velo se ve tu hermosura hermanita—dice mientras daba un beso en mi mano

—No puedo creer todavía que estemos haciendo esto, como convencieron a la abuela—digo sonriendo mientras veía a muchos familiares y amigos mientras caminaba 

—Use mis dotes de príncipe—dice repitiendo lo que yo le dije cuando logre convencer que fuera la abuela a su boda, no dije nada mas solo caminaba y sonriendo a las personas que me daba un sonrisa cálida

—Hasta aquí soy yo pero quiero que sepas que te amo y siempre seras la complice de aventuras —dice para dar mi brazo a William quien estaba ya enfrente de nosotros 

—¿Estas bien?—pregunta 

—Eso creo—dije mientras trataba de no quitar la sonrisa de mi rostro esto se estaba televisando en gran parte del mundo 

—Si quieres huir de esto, todavía es buen momento mira a nuestras lados hay entradas a capillas y de ahí podemos hablarle a Malcom y Zed que venga con un auto, te preguntaras porque a los dos para que uno nos sirva de señuelo y piensen que en ese irías—dice y me hace sonreír aun mas 

—William no haré eso pero ¿como se te ocurrió todo eso en este momento?—pregunto sonriendo

—No se me acaba de ocurrir Juliette tenia que tener un plan de escape por si no te sentías preparada o algo—dice y sonreí porque me lo imaginaba tratando de cuadrar las cosas por si decidía no casarme 

—Estate tranquilo—dije y sonrió levemente 

—Sabia muy en el fondo que no lo iba necesitar pero debía de tenerlo por si las dudas ¿no crees?—dice y niego divertida, creo que estos momentos con mis hermanos iba ser oro puro para los fotógrafos podía asegurar que era lo mas lindo que nos habían visto hacer juntos y era un gran gesto 

—Hasta aquí podre ser tu acompañante pero como dijo Harry te amo y quiero que sepas que eres una de mis personas importantes en esta vida—dice mientras daba mi brazo a mi padre

En este momento fue como balde de agua fría donde me daba cuenta que todo lo que había empezado con mi llegada de New York, un catalogo de prospectos para esposos donde la abuela quería que me casara para no dañar la imagen de mis hermanos con mis malos comportamientos, se vinieron a mi mente muchos recuerdos, la primera vez que vi a Juan Carlos después de tanto tiempo que no podía ni reconocerlo por lo cambiado que estaba vaya que había sido un año largo y ahora estaba caminando hacia el para casarnos. 

—Debo decirte que te doy gracias por todo lo que has hecho por tus hermanos, se que esto no lo haces por mi, si no por tus hermanos y creo que eso es la muestra de amor mas grande que existe—dice mientras tomaba mi mano con mas fuerza 

En ese momento volteo hacia un lado y justo estaba Blake no sabia que había confirmado, lo invente porque también fue parte de mi vida y creo que debía estar en este momento. 

—Juan Carlos se ve buen hombre—dice y me hizo regresar de mis pensamientos y me di cuenta que en todo este trayecto de caminata, no había volteado hacia el altar 

Al voltear no veía su cara estaba justo dando la espalda, traía un traje negro del ejercito de España supongo ya estaba a nada de llegar de hecho el sacerdote ya había llegado y algo le decía a Juan Carlos quien solo veía como asentía. 

Dimos alrededor de 5 pasos mas y ya estaba a su lado, volteo y realmente se veía muy guapo, ese traje lo hacia ver mas atractivo. 

—Te vez espectacular—dice bajito sonriendo, en eso empieza a cantar todos al mismo tiempo 

—Puedes quitarle el velo—dice el sacerdote, me volteo hacia el para quedar frente a frente y sonríe 

—Eres lo mas lindo que he visto y vere en esta vida—dice mientras pone el velo hacia atrás con sumo cuidado atrás 

Termina la canción y el sacerdote comienza hablar, en eso siento como toma mi mano pero lo hace para sentir mi muñeca creo que había visto el brazalete. 

—¿Como lo tienes? ¿Que hace aquí?—dice bajito para que nadie escuche 

—Nunca ibas a dármelo y alguien decidió que debía lucirlo hoy—digo también bajito  

—¿Quien entrega a esta mujer?—pregunta el sacerdote y mi padre toma mi mano derecha

—Carlos Felipe, entrego a esta mujer que es lo mas valioso que tengo, que cualquier otra cosa material y espero puedas cuidarla y protegerla—dice mientras entregaba mi mano en la mano de Juan Carlos 

—Prometo amarla, cuidarla y protegerla como nadie mas lo haya hecho, si es necesario hasta con mi vida—dice Juan Carlos eso deberia haber dicho, no se contestaba pero creo que quiso hacerlo solo le di un sonrisa de agradecimiento

No ustedes pero ya quiero oír los votos matrimoniales, lindo detalle de sus hermanos y las últimas palabras que dijo Juan Carlos en verdad fueron acertadas.

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Princesa RebeldeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora