NO TE AME LO SUFICIENTE |JOERICK|✔️

C U A T R O

Narrador Omnisciente

Erick esperaba sentado la llegada de Joel, Erick se siente muy emocionado porque creé que podrá lograr su objetivo

Seducir a su Esposo.

Se escuchó la puerta abrir y Erick volteo hacia esta.

—Buenas noches Erickin—lo saludo Joel al entrar— ¿Ya llego la pizza?.

—Hola Joelin—se miraron y ambos sonrieron, Erick estaba muy feliz porque Joel se veía distinto, y eso le gustaba.

Comenzaron a comer mientras veían una película, estaban riendo mientras Joel abrazaba a Erick por los hombros.

Una escena muy tierna sin duda.

Terminaron de comer, esperaron a que la película terminara y Joel se paró del sofá.

—Vamos a dormir bebé—lo último salió sin querer haciendo que ambos se sorprendan.

—No quiero dormir—dijo Erick mientras lo veía con una mirada seductora.

Joel mordió su labio inferior.

—Entonces vamos al cuarto y hagamos algo más-le extendió la mano a Erick y este la tomó tan fuerte que parecía que no quería soltarla ni un solo instante.

Subieron las escaleras aún tomados de la mano, Joel abrió la puerta, ambos entraron y Erick la cerró.

Erick se sentía tan nervioso, no recuerda cuando fue la última que hicieron el amor, porque esto es lo que parece que harán, Joel está siendo muy tierno y gentil.

Joel ya quiere estar dentro de el, el sabe que aunque Erick no pueda tener hijos nada se compara en dejar su semen dentro de su esposo.

Joel tomó a Erick de la cintura y comenzó a acercarse lentamente hasta unir sus labios con los de el ojiverde.

Erick comenzó a desvestir el torzo de Joel, mientras seguían besandose.

Era un beso tierno, necesitado por ambos.

Caminaron hasta la cama y el más alto recostó al ojiverde.

Joel tomó el borde de la camisa del menor y la sacó de un tirón, comenzó a bajar dejando besos húmedos por todo su cuello hasta llegar a su clavícula.

Erick comenzó a acariciar la espalda desnuda de su esposo, Joel bajó sus manos hasta que sintió el bulto en la entrepierna del ojiverde, bajo los shorts que llevaba puestos dejándolo en bóxer.

Erick se estremeció al sentir las frías manos de Joel recorrer sus piernas.

Bajó sus manos quitando el cinturón que llevaba puesto Joel, su esposo lo ayudó quitándose su pantalón quedando también solo en bóxer.

—Date vuelta bebé—le susurró al oído con su voz gruesa— te quiero en cuatro—mordió el lóbulo del ojiverde haciéndolo gemir.

El ojiverde obedeció quedando en cuatro.

Joel bajó sus boxers quedando ambos completamente desnudos.

Joel se estiró sacando un lubricante de la mesita de noche, colocó un poco en sus dedos y comenzó a acariciar la entrada del ojiverde.

—J-Joel—gime—ya te necesito-dijo entre suspiros.

El rizado sonrió al recordar que siempre lo hacía suplicar que lo follara.

Metió el primer dedo haciendo que Erick arqueara su espalda y restregara su trasero en la mano de Joel.

El más alto entendió lo que el ojiverde quería y metió un dedo más haciendo movimientos circulares dentro de el.

Joel pegó su abdomen a la espalda arqueada del ojiverde, con su mano libre tomó el mentón del más bajo haciéndolo voltear hacia el, beso sus labios tiernamente.

—Eres tan caliente—dijo Joel volviendo a besa sus labios.

Sacó sus dedos logrando un quejido de molestia por parte del ojiverde haciéndolo reír.

Alineó su pene con la entrada del más bajo y lo penetró mientras sujetaba sus caderas.

Erick apretaba las sábanas fuertemente, mientras Joel aumentaba sus embestidas.

Ambos gemian sin control, estaban disfrutando este momento.

Joel le puso atención al miembro del ojiverde, comenzó a masturbarlo al mismo tiempo que lo embestía.

El ojiverde se corrió mientras gemía el nombre de su esposo, manchando la cama y parte de la mano de Joel.

El rizado al sentir como el interior del ojiverde se comprimía se corrió dejando todo su semen dentro del más bajo.

Joel salió del interior del ojiverde después de esperar unos segundos, fue en dirección al baño y volvió con papel para limpiar al ojiverde.

Después de que quedarán limpios se recostó atrayendo al ojiverde a su pecho.

—Te amo Joey—musito el ojiverde sonriendo.

—Hay que dormir bebé— beso la frente algo sudada del más bajo y se cubrió con las sábanas.

Erick trató de sonreír, pero que haya evitado decir que lo amaba le dolió hasta en el alma.

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