Contando estrellas

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La libertad está en ser dueños de la propia vida
Platón

Hogwarts
1997

La había jodido y de eso estaba más que seguro cuando Harry Potter seguía detrás de él apuntando con su varita a su espalda, dispuesto a desmayarle al menos. Cómo no.

—¡Quiero que ambos me expliquen que está pasando aquí, ahora!

Porque Potter podría ser todo, pero jamás sería el niño que vivió asesino de mortífagos, solamente un poco gritón.

—¿Vamos a seguir con esto?-Pregunto mientras el Profesor Snape le miraba de cerca sin prestar atención a Harry y con su enorme nariz ganchuda, acusador.—Me están poniendo nervioso y cuando lo estoy no reaccionó de manera adecuada.

Harry solamente se mantuvo en silencio cuando ninguno de los dos reaccionó de la manera en que pensaba y apunto de golpe a Snape, quien rodó los ojos, chasqueando los dedos para sacar la varita de sus manos.

Draco dió una risita por lo bajo. Había olvidado que su padrino era hábil en la magia sin varita, algo que él nunca había aprendido del todo, gracias a que Voldemort lo había matado antes de que pudiera lograr si quiera levitar una maldita pluma.

Harry se pegó a la pared, aún estando en la torre y dando un indicio de que probablemente se echaría a correr si no le cerraban el paso.

—Ahora, dime.-La voz de Snape termino con el silencio que se había hecho, regresando la mirada a Draco, dejando que Harry se fuera si eso quería— ¿De que año vienes?

El rubio observo un tanto desconfiado a Snape, no entendiendo porque Dumbledore había mencionado que sabía de la profecía. Cayendo en cuenta de golpe que también el hombre con aspecto de murciélago lo sabía.

Jodidos todos.

—De 1999.

Snape atino a asentir, mirando a Harry quien no se movió y a Draco de nuevo como si ambos tuvieran la respuesta al examen que iba a hacerles de estar en clases de pociones.

—¿Me están diciendo que viajaste en el tiempo?-Pregunto cara rajada, incrédulo de lo que sea que estaban platicando, sin entender la mayor parte de la conversación, ya atrapado por el tema.—No puede ser posible... No hay lógica.

Draco suspiro.

—Callate, Potter.-Dijo, mandando una mirada que esperaba pudiera servirle a Snape como indicador de que esperaba que hablara de una buena vez antes de que ambos, él y el cuatro ojos, se volvieran locos.—Yo también estoy tratando de entender que estoy haciendo aqui.

Ambos adolescentes miraron de nuevo a Snape, en silencio, Draco viéndose bastante cómodo y Harry con desconfianza.

—Cuando el Señor Oscuro se enteró de la Profecía que estaba escrita... Mando a sus discípulos a encontrarla.-La voz de Snape era casi hipnótica, sobre el ruido de los gritos de desesperación que provenían de los jardines.— Esta profecía fue cantada en dos partes, la primera trata del niño que vivió y la segunda de un mortífago traidor.

Draco se tenso levemente, desviando la mirada del hombre.

¿Que significaba para ellos traición? Si alguien se detuviera a ver dentro de aquel desmadre, había un bando de "buenos" y un bando de "malos", ¿Pero quién se atrevería a cuestionar para ellos que era lo correcto?

Presagio Where stories live. Discover now