La Chica de Luke || ashton irwin (pausada)

>capítulo tres.

Ashton's POV

Mis ojos se quedaron pegados en el lugar dónde “Skyler” había estado parada hace menos de 10 segundos.

Literalmente, la clase ya había comenzado, la chica esa ya estaba instalada, y yo seguía mirando la alfombra color café oscuro que cubría el piso.

—Irwin—una regla de color amarillo golpeó mi cabeza tres veces—Deje de recordar la pornografía que vió anoche y preste atención a mi clase.

Instantáneamente me enderecé y sentí como el calor se acumulaba en mis mejillas. Mi mirada se posó en Mike y vi como Mike se mordía su camiseta para no soltar una carcajada. Le sonreí hipócritamente y le levanté el mi hermoso dedo. Bastardo.

Fijé mi vista al frente. La Profesora —que ni carajos se cuál es su nombre— escribía en el pizarrón babosadas que yo no podía entender.

-—Bien muchachos. Pondré aprueba sus conocimientos. Formarán parejas, no quiero grupos de a tres, ni de a cuatro, solo parejas. Van a entregarme un informe sobre la teoría de la relatividad.

Esperen, paren todo, ¿yo no estudiaba música?

—Y todo esto entrará en el examen final, ¿alguna duda?

Rápidamente alcé la mano.

—¿Usted no ensañaba a tocar guitarra?—pregunté perplejo.

La señora esa me miró como sí hubiera dicho un embrujo contra suyo o algo parecido.

—¿Y usted es tarado de nacimiento o se lo pegó sus padres?

Por alguna razón, esta profesora se empeñaba en dejarme en ridículo frente a la clase. Y lo estaba logrando… pero yo no me quedó atrás.

—Disculpe, pero que yo recuerde, usted no es mi madre.

La hice.

Entrecerró sus ojos, tratando de lanzarme rayos lasers o algo parecido. Pero creo que soy inmune a sus poderes de maldad.

—Y para usted, contará un 60% de la calificación final, así que no sólo le afectará su promedio y su estadía en este Instituto, sí no a quien lo elija de compañero.

Y en ese instante como por obra de magia me llegó una idea a la cabeza.

—¿Puedo elegirlo ahora?

—Dudo que alguien quiera trabajar con usted, o mejor dicho… para usted—Me sonrió cínicamente—Pero le doy la oportunidad de intentarlo.

—Oh, que considerada es—llevé mi mano a mi pecho, fingiendo estar conmovido— Quiero a Skyler como compañera.

La pequeña de la trenza se dio vuelta a mirarme. Si sus ojos no estuvieran fijados a su rostro, podría jurar que en este momento se les hubiera salido. Sonreí complacido, un nuevo plan estaba en marcha.

—Señorita Bennet, ¿está de acuerdo?

—Eh… bueno… yo, este… yo… n-n-no lo sé…—tartamudeó. La fase uno comenzaba de manera correcta.

—Bueno, ¿hay alguien que quiera ser con ella?

Se podría decir que había una Ley en este Instituto. Desde que entre, me hice respetar, a la gente no le conviene estar cerca de mi, a menos que sea una chica… linda. Si observo una chica, es mía. Te metes con ella, te metes con mi puño. Directo y simple.

Skyler esperanzada observó la clase, casi rogando que yo no fuera su compañero, ¿por qué? ¿tan mal le había caído?... ¿o le daba miedo?

—Muy bien, Bennet no te quedan opciones— La profesora volvió a su asiento y empezó a escribir cosas babosas en su ordenador. —Ya pueden organizarse.