5-"Gracias"

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PD: todo lo que está pasando ahora mismo en el manga en esta historia va a pasar un año después para que encaje. Si no lleváis el manga al día aviso que el siguiente capítulo tendrá algunos spoilers.

Había pasado solo un poco más de un mes desde el concierto y ya solo faltaban alrededor de dos para pasar a su tercer y último año en la UA. No había pasado nada especialmente importante en ese lapso de tiempo. 

Excepto una cosa: desde aquel día en el que estuvo enferma, Kyouka empezó a pensar que tal vez le gustaba Bakugou.

No estaba segura de que lo sentía por el chico fuese realmente algo romántico. Sí tenía claro que era uno de sus mejores amigos y una de las personas en las que más confiaba para lo que fuera. Tal vez, por eso, no quería admitir que sus sentimientos hacia él podrían haber evolucionado.

También había dos factores más que la hacían dudar: primero, el hecho de que la tratara bien y tenga gestos con ella que no hacía por mucha otra no gente no tenía por qué tener connotaciones románticas. Kyouka pensaba que su mente solo la estaba ilusionando porque no mucha gente tenía esos gestos con ella, pero eso no evitaba que su corazón se acelerara un poco, como pasó cuando estuvo enferma. Segundo, tal vez solo le había empezado a gustar porque Mina y Tooru no se callaban sobre el tema desde aquel día. 

Al parecer, todos se habían enterado de que Bakugou le había hecho la comida y se la había llevado a su habitación después de haber ido la noche anterior a un concierto los dos juntos y solos. Kyouka no lo podía negar: sonaba totalmente romántico, aunque sabía que en aquel momento no había intenciones románticas por ninguna de las dos partes. Pero estaba hablando de Mina y Tooru, dos románticas que veían amor en todas partes. Desde aquel día no paraban de molestarla con que si a ella le gustaba Bakugou o incluso al revés: que si Bakugou hacía todo eso, era porque estaba enamorado de ella.

Kyouka quería reírse de lo último. Por mucho que a ella le gustara, Bakugou nunca había mostrado interés romántico en nadie, ni chico ni chica. Su único interés parecía ser el convertirse en el héroe número uno, y Kyouka pensaba seriamente que a lo mejor al chico no le interesaba tener relación romántica alguna y punto. Y ella lo apoyaba completamente si ese era el caso.

Pero a ver cómo le explicaba eso a sus amigas sin que se quejaran de que estropeaba toda la diversión y sus esperanzas de que uno de sus ships (porque a sus amigas les encantaba emparejar gente por alguna razón) se volviera realidad.

De todas formas, aunque se diera el caso de que a Bakugou sí le interesaran las relaciones románticas, jamás se enamoraría de ella. Era imposible. Así que pasó ese mes desarrollando sus sentimientos sin decirle absolutamente nada.

Había veces que no podía evitar ponerse nerviosa a su alrededor o decir cosas extrañas, y estaba segura de que Bakugou lo estaba notando. O no lo habría hecho si un día no se hubiera puesto a divagar nerviosa sobre la letra de una canción romántica porque le recordaba a él y fue tan estúpida de preguntarle si le gustaban ese tipo de canciones. Bakugou solo respondió que le daban exactamente igual. Kyouka se quedó en blanco. Quería decirle más cosas para ver si le podía sacar si estaba mínimamente interesado en cualquier tipo de romance, pero solo pudo cerrar y abrir la boca varias veces sin decir nada. Eso siempre exasperaba a Bakugou.

-¿¡Cuántas veces te tengo que decir que si quieres decir algo, lo digas y punto!?

-¡No es nada!

-Parecías un pez, ¿y me dices que no es nada?

-¡No parecía un pez y te digo que no es nada!

Sabía que Bakugou no la creyó, pero el chico lo dejó estar. Esa misma situación volvió a ocurrir un par de veces más y siempre acababa igual. Kyouka jamás iba a decirle nada, no se atrevía y menos sin tener totalmente claros sus propios sentimientos.

Gracias [Bakujirou]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora