Hablando con las flores

Carta 5: Distintos matices de un mismo cielo

Jueves 30 de Enero, 2020. 

Ha sido una semana bastante loca. Llena de emociones fuertes y de nuevos descubrimientos sobre mi misma y lo que realmente quiero. He descubierto que me gustaría seguir pintando. No con una gran técnica ni con un gran propósito detrás; más bien, me gustaría entender la pintura como un medio por el cual poder expresar mi libertad. Mi arte, no siempre metódico o sistematizado.
He descubierto que debo comenzar a practicar más seguido mi escritura espontánea, porque es otra manera de practicar la introspección. También he descubierto que me apasiona la vida salvaje, y me encantaría trabajar estudiando el comportamiento de la naturaleza, y aplicando eso a nuevas y mejores formas de vida para ellos. Sí, se podría decir que ha sido una semana muy clave, aunque probablemente dentro de unos años no recuerde si no lo esencial. ¿Y qué es lo esencial? Tal vez, los momentos que he compartido con mi familia, o las madrugadas mirando series y escribiendo, o mi inconsciencia detrás de estas palabras.

Hoy fue uno de esos días. De descubrimientos, ideas que no alcanzan a ser a metas, y algo de estrés. Pensaba que todo sería tranquilo, pero no lo ha sido en realidad.
Hoy, luego de almorzar, quería hacer mis tarjetas de invitación para mi cumpleaños que es este lunes, pero terminé llorando y sintiéndome mal nuevamente. Creo que realmente tengo un problema de fijación por la niñez, debería ir al psicólogo porque yo misma me pongo a pensar que..., tal vez..., no sé, no sea del todo normal. Cuando le pido a mamá que me compre muñecas, o cuando bailo, salto o brinco en la calle no lo hago para llamar la atención, no lo hago como un juego. Lo hago porque realmente lo siento. Y le decía a mamá: "Por Dios, la gente se llena la boca hablando de lo imaginativo que son los niños, y los increíbles mundos que crean... ¡La gente no entiende!, no hay un manual que diga que ciertos comportamientos solo le pertenecen a los niños, o a los adultos. Me da rabia cuando dicen 'David se comporta como un niño', NO, David se comporta como David. Nadie dice que solo los niños aman la navidad, o solo los niños aman los pequeños detalles. Así como hay adultos que adoran jugar, también hay niños amargados". Mamá no lo dice, pero se que está preocupada por mí. Y que se entristece cada vez que lloro al pensar en que tendré que crecer y ser encasillada en lo que la sociedad considera "ser adulto". Al final, se me quitaron las ganas de todo y no hice mis tarjetas de cumpleaños. Mamá se fue a descansar a la habitación contigua a la cocina, y yo me quedé callada y triste (Ambas cosas son rarísimas en mi persona. Hablo hasta por lo codos y siempre estoy alegre). Por alguna razón, me puse a pintar con mis acuarelas y terminé haciendo un cielo con distintos matices: Verdes, marrones, azules, celestes, rosa..., me gustó mucho el resultado porque es mi primera pintura. A mamá le encantó, a papá igual. Y así es como descubrí que el pintar puede ser un buen método para liberar mis emociones. No usar un método para pintar, si no usar el pintar como un método. Me gusta.
En la tarde vinieron mis tíos: Mirta, Sonia y Andrés y la familia Villablanca Diaz, pastores al igual que mis padres, y nuestros amigos. Hicimos una comida y hablamos, reímos..., se me quitó la frustración y la tristeza. Macarena, la hija mayor de nuestros amigos, hace atletismo. Es muy buena. MUY buena. Tiene tan solo 13 años y promete ser una gran atleta. Rápida, ágil y..., no me sorprendería que con trabajo y esfuerzo llegue a ser la mejor de nuestro país. Estuvimos hablando sobre el atletismo y queremos salir a trotar con papá David y ella. No voy a mentir, me motivé muchísimo. Por lo pronto, mañana la acompañaré al taller para ver como trota y..., no sé nada más. Enserio espero que logre cosas increíbles porque incluso camino a la tienda de la esquina, mientras hacía carreras con su hermano menor, pude notar la velocidad que tiene.

Mañana debo despertarme a las 8.00 a.m, Adiós.