Eithg.

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-¡Auu!- Siseé al sentir el algodón empapado en alcohol recorrer por mis cortaduras.

-Listo muñeca, he terminado con mi curación- Dijo Austin al finalizar. Lo miré seria refiriendome a la palabra "Muñeca" Y el sonrrió.

-Vale, no era necesario pero gracias.- Me paré del butaco y agarré mi bolso para salir del apartamento. Pero Austin me jaló el brazo. -Que quires.-

-Te vas sin despedirte? Sin darme un besó- Actuó con drama.

-Pero que clase de dramático eres, eh.- Reí.

-Sigo esperando tu beso.-

-Pues síguelo esperando.- Reí nuevamente, le dí la espalda para dirigirme a la puerta pero nuevamente me detuvo. -Pero que intenso eres.- Me rendì.

Me puse de puntitas. Era muy pequeña para su enorme altura. Le di un beso en la mejilla, pero Austin lo hizo más largo y cerca a nuestros labios. Me sonrrojé, Austin lo notó pero no dijo nada.

Finalmente salí lo más rapido que pude del apartamento para llegar al mío.

Siendo la una de la mañana abrí con cuidado mi apartamento para no despertar a nadie. Logrè entrar a casa. Todo estaba totalmente oscuro. Subí las escaleras hacia mi habitación y antes de entrar miré de reojo la habitación de mis padres, todo seguia oscuro.

Entré a mi cuarto y cerré la puerta con mucha delicadesa. Prendí la luz, me empijamé. Apagué la luz para dirigirme a mi cama y poder dormir.

Un Vecino ¡INSOPORTABLE! (Austin Mahone.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora