Ten.

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-Que linda decoración.- Comenté aun mirando el atrapasueños. Austin también lo miró y una graan sonrrisa adornó su rostro.

Se estiró para acomodarlo y se levanto un retazo de su camisilla. Ví un arma metida en sus Jeans. Me inundé de pánico y recordé el día de ayer. Actué tan tranquila. Pero no sólo actuaba. Me sentía así. Me sentía protegida. Esta vez no. Estaba llena de miedo.

Abrí los ojos y Austin me miró y siguió la trayectoria de mi mirada. Iba a abrir la puerta del auto pero Austin no me dejó.

-Caitlin...-

-Nada, sólo explícame lo de ayer.- Me tranquilize.

- No te incumbe.- Miró hacia adelante y arrancó. Salimos del portal directo al institudo

-Estamos hablando de MI SEGURIDAD. Me importa mucho.

- Sólo no andes sola de noche tan tarde y estarás a salvo.

-¿QUÉ? ¡EXPLÍCAME!

-Mmmh, yo soy una especie de policia, trabajo en algunas cosas para ellos, y pues ya teniamos bronca con el chico de ayer, contenta?- Sonó muy dudoso al decir eso. Y también estaba dudando de él.

-Claro que no. ¿Tienes que cargar un arma a toda hora?- Frunci el ceño.

-¿QUE PARTE NO ENTIENDES QUE ES MI TRABAJO, BAST.ARDA?- Austin se alteró de una manera que dio miedo. Lo miré inmediatamente "Bastarda".

-¡TU POLL.A!- Le grité devuelta. -Para aquí por favor.

-Caitlin, lo sien...

-¡QUE PARES!- Quedé anonadada ante su expresión tan irrespetuosa. Austin paró, baje del auto y le dí un portazo a la puerta. Furiosa caminaba hacia el instituto, no estaba muy lejos. Pero no estaba del todo sola vi que el auto de Austin seguia mi paso.

Finalmente logré deshacerme de Austin al entrar al instituto, nuevamente no había nadie. Me asusté y corrí al salón, entre y no estaba nadie.  Me sentía extraña, siempre acostumbraba a llegar tarde. Aproveché la situación para tomar una cómoda siesta.

Bostecé, aún sin abrir los ojos. Me sentía en una superficie diferente a la del instituto, abrí un ojo para observar. Me asuste al ver nuevamente el carro de Austin en su interior, abrí completamente los ojos y miré hacia mi lado izquierdo.

-¿Que hago aquí?- pronuncie con miedo.

-Lo siento mucho, no quería tratarse así, es que no me dejan hablar mucho de el trabajo así que es mejor que te reseves tus preguntas.- Acarició mi mano y la solté con brusquedad.

Un Vecino ¡INSOPORTABLE! (Austin Mahone.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora