Remember The Time [Mericcup 1]

2) La exposición de hielo de Elsa

Narra Mérida

Apenas cerré la puerta mi madre me preguntó:

-¿Quién era ese chico? ¿Es tu novio? ¿Por qué no me lo has dicho?

-Antes que nada no es mi novio, es mi amigo. Se llama Hiccup. Lo conocí en el parque y es amable conmigo. Así que déjame en paz- respondí algo enfurecida.

Mi madre sonrió y se marchó. El móvil me sonaba. Atendí y dije:

-¿Hola?

-¿Mérida? ¡Soy yo, Anna!

-¡Anna! ¿Como estás?

-Excelentemente bien ¿Y tú?

-También. ¿Y tu hermana? ¿Cómo le va con el negocio de las esculturas de hielo?

-Según lo que me dijo Elsa su negocio va de maravillas. Oye ¿Quieres venir a la exposición de exposición de figuras de hielo de Elsa mañana a las cuatro? Es en la esquina de Galiotti y Floresta. La entrada es gratis.

-Claro que sí- pensé un momento en Hiccup -Llevaré un amigo ¿Importa?-

-No, mientras más gente venga, mejor. Una última cosa ¿Tienes un chico entre tus contactos?- dijo pícaramente

-Es sólo un amigo. Adiós.- ¿Es que tenía que decirles a todos eso?

-Adiós. Y no lo olvides, así empecé yo con Kristoff. - Y cortó. Kristoff era el novio de Anna. Lo conoció tres meses atrás.

Miré el móvil. ¿Llamar a Hiccup o mandarle un mensaje? Mandarle un mensaje.

Yo: Hey Hiccup! ¿Te apetece venir conmigo a la exposición de figuras de hielo de una amiga mañana?

Hipo: Claro ¿Dónde y a qué hora?

Yo: En la esquina de Galiotti y Floresta a las cuarto.

Hipo: Te pasaré a buscar ¿Sabes andar en bicicleta?

Yo: Sí ¿A qué viene la pregunta?

Hipo: Nada... nada... Estaré allí a las tres y media ¿Okay?

Yo: Okay

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Eran las dos. Ya había comido, así que me me duché y me puse una remera violeta y una calza celeste con lunares blancos. Me recogí el pelo dejando un mechón detrás de mi oreja.

Miré la hora. Eran las tres y media cuando alguien tocó el timbre. Abrí la puerta; era Hiccup.

-Hola! -saludé yo.

-Hola -respondió él sonriendo-. ¿Nos vamos?

-Claro, pero espera un segundo -me di la vuelta y grité-. ¡Mamá, me voy con Hipo a la tienda de Elsa! 

Cerré la puerta y vi dos bicicletas al lado de él.

-¿Así que por eso me preguntaste si sabía andar en bicicleta? -dije riendo-. Te juego una carrera hasta la exposición a la cuenta de tres ¡Tres!

Lo agarré por sorpresa, pero enseguida se subió a la bicicleta. Pedaleábamos y pedaleábamos. Yo reía sin parar, sin saber por qué. Llegamos a las 4 en punto.    

En cuanto Hipo vio las esculturas se quedó boquiabierto. Yo reí.

-Tierra llamando a Hipo; permiso para aterrizar.

-¿Eh? -preguntó él distraído.

-Olvídalo. Mira, allí están mis amigas -Lo arrastré por todo el local hasta que llegué a donde estaba Elsa.

-¡Hola Mérida! -dijo Elsa con su vestido azul.

-¡Hola Elsa! -la saludé mirando de reojo a Hipo-. Elsa, él es mi amigo Hiccup, pero todos le dicen Hipo.

-Encantada -dijo mi amiga.

Él sólo dijo un "Hola" y yo enseguida le dije:

- Oye Hipo ¿Por que no vas a hablar con Kristoff? Yo iré con Anna.

-Bien -estaba algo raro, eso no se podía negar.

Fui a donde estaba Anna (En la mesa de los bocadillos) y me quedé hablando con ella un rato hasta que oí a una chica:

- Ey, pelirroja ¿Que haces con mi chico?

-¿Qué chico?- apenas la vi la reconocí aunque sólo la había visto en fotos: Astrid.

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