Capítulo 4

3 1 0
                                    

Mierda.

Todo es una puta mierda.

Tengo que hacer innumerables cosas para esta semana y no tengo idea por dónde empezar.

Ensayos, pruebas, ayudantía, presentaciones, libros que leer...

No se les ocurre otra cosa que poner todo junto para una semana y avisar la clase anterior. Que estupidez más grande.

Y no solo eso, sino que también tengo un cansancio acumulado, entre que Mariana se gradúa este año y tengo que ayudarla con todo el estrés que eso conlleva, acompaño a Gastón a elegir su traje de novio estelar y mis padres últimamente se la pasan peleando por todo, simplemente me cansaba y no tenía quien me abrazara. Tenía tantas lágrimas aguantadas que al verme en el espejo con esas ojeras que demostraban cansancio, con ese cabello que notaba despreocupación y con esa mirada que era más tristeza que cualquier otra cosa, solté ese río que hace tiempo tenía ganas de existir.

Creo que una de las cosas más tristes es cuando te sientes tan solo que te miras en un espejo, sabes que eres fuerte por haber llegado hasta donde estás y también sabes que lo único que has logrado es una coraza para que nadie pueda ver tus debilidades y así no logren lastimarte. Después, en ese reflejo buscas a alguien que te entienda y por eso lloras y te miras llorar, con la finalidad de pensar que hay más de tu persona en otras dimensiones que te acompañarán. Estoy así ahora, porque entre el estrés de mi familia y el de la universidad me pierdo, me disuelvo en estrés y lo único que quiero es un abrazo y que me susurren que todo estará bien, que esto es simplemente un impulso para el éxito al que quiero llegar. Ni siquiera sé cuál es ese éxito.

Me tiré en mi cama, me acurruqué con las sábanas en posición fetal y seguí llorando, no porque sea hombre significa que no puedo llorar, me encanta llorar, me relaja. Sentía las lágrimas caer entre mis almohadas, como esas gotas lentamente me iban mojando la cara, como si aparte de querer demostrar mi dolor también quisieran ayudar a limpiarlo. Sé que en unas semanas me habré olvidado de esto, créanme mis queridos lectores de sea lo que sea que esto se convierta que yo sé que esto se acabará pronto, aunque en estos momentos el sufrimiento se siente eterno.

Decidí que lo mejor iba a ser anotar cada cosa que tenía que hacer en un papelito, arrugar cada papel y sacar uno de esos, así podría elegir como empezar a salir de este estado anímico no tan apetecible.

Tomé un papel y salió que lo mejor era leer el libro corto y hacer su ensayo comparándolo con la actualidad. En una esquina de mi habitación se encontraba mi mochila, la abrí y saqué el libro, me volví a acostar en mi cama para comenzar a leerlo. Apenas leí la primera página me di cuenta de que efectivamente estaba leyendo, mas sin comprender lo que estaba escrito en el libro. Y volví a ponerme a llorar.

El simple hecho de tener un cansancio acumulado de tantos años te va matando lentamente, lo quieras o no. Y eso es lo que me está pasando en estos momentos. Yo, Viator, me encuentro más cansado que un maratonista y no sé qué hacer con mi vida. Ya ni tengo idea de si quiero seguir estudiando Literatura. Mi papá tenía razón, tal vez fue un impulso de único y especial que debí haber pensado mejor. Y mis queridos lectores, ni siquiera sé si se me da la escritura, de si ustedes están disfrutando con mi amargura. Estoy que me ahogo con los nudos que tengo en la garganta, siento todos y cada uno de ellos como un obstáculo para poder superarme.

Tampoco sé si me quiero superar y si todo este tiempo he estado saboteándome a mí mismo, cada vez que pienso que puedo hacer algo con mi vida, me pongo a ver memes. Los memes no me van a dar de comer cuando me esté muriendo de hambre y en vez de hacer campañas para niños en África me las tengan que hacer a mí. Los memes no me van a dar nada útil, eso lo sé, ni siquiera me entretienen, ni sé que hago viéndolos.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Feb 12, 2020 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Luna VacíaWhere stories live. Discover now