LA ORDEN DE SANGRE

capitulo uno

Muchas personas alrededor de su vida tienen recuerdos gratos con su familia, son marcados por una sola persona. Se que el amor como muchos dicen no dura para siempre, no existe un final feliz, donde tampoco existe la familia perfecta. Mi vida era eso.

No soy la primera ni la última adolescente con padres divorciados, pero es difícil perder a personas quien tu creías que estarían para ti siempre, mi padre es un gran ejemplo de eso, pero ella siempre estuvo ahí, ni si quiera fue capaz de querer rehacer su vida, así era mi madre.

¿Por qué todos los funerales tienen que ser en un día lluvioso?... jamás me imagine estar frente el ataúd de mi madre, nunca imagine que este día llegaría tan rápido. Los doctores dicen que yo me salve de milagro, hubiese querido morir con ella en aquel accidente.

Desde aquel día no he podido dormir, todavía me cuesta aceptar que todo esto esta pasando. Jamás había llorado tanto, en eso siento a alguien acercarse hacia mí, esa persona era mi padre, no lo había visto desde hace seis años, no he recibido de el ninguna sola llamada y ahora aparece como si nada.

ꟷSiento mucho lo de tu madre. ꟷsusurro, sus ojos delataban ojeras, lucia muy cansado. No dije ni una sola palabra, el sabia interpretar mi silencio.

Por como estipula la ley todavía soy menor de edad, así que tendría que mudarme con él, eso equivalía a dejar todo aquí. Charlie vive en la ciudad de Ohio, seria un viaje tan largo.

Se que Charlie se volvió a casar, bueno eso fue lo que dijo mi madre, ella aun tenía mucho cariño hacia él. Durante todo el viaje, ninguno de los dos hablo ni una sola palabra, me resultaba difícil entablar una conversación con él, era como si fuese un extraño, se sentía bastante incómodo.

Este dolor que siento en el pecho es algo que no me deja respirar, sentir miedo es terrible, dejar todo lo que conocía ya me da igual, ya no tengo nada que perder.

No soy la misma después del accidente, no he podido dormir bien he tenido pesadillas las cuales no me dejan en paz. No quiero preocupar a nadie, tampoco quiero que piensen que perdí la cordura, pero puedo ver cosas extrañas y desquiciantes, como gente morir frente a mis ojos y se siente tan real, si lo se suena extraño o algo ilógico, pero lo puedo ver y ellos saben mi nombre, los escucho gritar por mi ayuda.

En el hospital pude ver muchas cosas, enloquecí estoy más que segura, ¿porque pienso todo esto justo ahora?

De repente Charlie da el primer paso para entablar una conversación.

ꟷEl clima en Columbus es algo frío, sé que estás acostumbrada a otro tipo de clima y. ꟷdijo de manera nerviosa, lo interrumpí ya que, lo que menos quería en este momento era conversar.

ꟷNo importa estaré bien. ꟷrespondí sin mucho interés.

No sé porque, pero presiento que mi vida empeorará a partir de ahora.

La ciudad se veía algo apagada y sí tenía razón con respecto al clima. Odio el frio.

Mis padres se divorciaron cuando yo tenía once años y me enteré de que mi padre se había vuelto a casar no supe más de eso ya que no me interesaba, lo único que quiero es terminar este año e irme de aquí.

Por lo general no soy una persona que hable mucho, siempre me gusta pasar desapercibida mientras menos me noten será mejor.

En mi anterior escuela no llegue a socializar muy bien que digamos, tampoco es que necesite amigos, me tengo a mi y eso es lo que importa.

Llegamos a la nueva casa, es una casa bonita, al entrar me percató de que en la entrada nos estaba esperando una mujer, supongo que es la esposa de Charlie. Aquella mujer era alta y bastante atractiva, se mostraba tan sonriente.

ꟷ¡Hola! Mucho gusto soy Helen, estaba muy ansiosa por conocerte Rose. ꟷexclamo con entusiasmo tras verme. Di una leve sonrisa en forma de cortesía.

ꟷIgualmente, y gracias por recibirme en su casa. ꟷrespondí mientras entrabamos hacia la sala de la casa. Ahí se encontraba un chico al parecer de mi edad, quien se acercó hacia mí.

ꟷHola, de seguro ¿no sabes quién soy verdad? ꟷexclamo sarcástico, algo que puso incomodo a Charlie.

ꟷRose, él es mi hijo Guy. ꟷrespondió Helen de inmediato.

ꟷSi supuse que no le habían hablado de mi pero bueno siempre me olvidan, también ¿le hablaste de Kayla? ꟷrespondió encogiéndose de hombros mientras sonreía, esas preguntas solo los incomodaban a ellos al parecer.

ꟷ¡Guy! ꟷrespondió Helen en reproche ꟷdisculpa Rose, me gustaría presentarte a mi hija Kayla, pero ella no está en casa, ella y Guy son mellizos.

ꟷSi, pero yo soy el mayor. ꟷrecalco Guy.

ꟷNo le hagas caso, Guy es así, pero es un buen chico. ꟷrespondió Charlie.

ꟷDebes estar cansada, deja que te guiemos a tu nueva habitación. ꟷexclamo Helen con entusiasmo.

Me ayudaron con mi equipaje hacia el dormitorio, cuando Guy vuelve a hacerse presente.

ꟷHace unos días pinte tu habitación, no sabía cuál era tu color favorito, tampoco papá así que lo pinte de rosa.ꟷ anunció Guy. Así que el le dice papá, ¡que gran familia!

ꟷOdio el rosa. ꟷrespondí y la expresión que hizo en su rostro fue impagable.

ꟷ¡A todas las chicas les gusta el rosa! ꟷarqueo sus ojos y suspiro. ꟷbien de ¿qué color quieres en tu habitación? ꟷreplico.

ꟷDescuida está bien, tampoco estaré aquí para siempre.

ꟷBueno... entonces baja a cenar, mi mamá estuvo toda la tarde en la cocina solo por que tu venias... ꟷexclamo de pronto.

Al bajar aquella mesa estaba repleta de demasiada comida.

ꟷSiéntate, Rose. ꟷexclamo Helen al verme. ꟷElla es mi hija Kayla. ꟷañadió mientras se hacía presente aquella rubia.

ꟷ¿Qué hay? ꟷrespondió, eso fue lo único que dijo, se gano la mirada molesta de su madre.

ꟷBueno de seguro sé que papá no te lo ha dicho, pero desde mañana tu asistirás a la escuela junto con nosotros. ꟷexclamo Guy para quebrar aquel silencio incómodo.

ꟷ¿Mañana? ꟷmire de inmediato hacia Charlie.

ꟷSi, creo que no seria bueno que te atrases con la escuela.

Ir a la escuela de un día a otro no era algo que me emocionara.

ꟷ¡La escuela es increíble, ya verás! ꟷcontinuo Guy intentando emocionarme.

Aquella chica no dejaba de mirarme y no me veía de una forma tan amigable por así decirlo. Al terminar agradecí por la comida y subí de inmediato a mi habitación.

Me dedique a desempacar y ordenar todo, me considero una adicta a la organización, al menos si son mis cosas. Tratar de dormir y pensar como mi vida dio un giro de trescientos sesenta grados de un día a otro, ah sí y agregando de que mañana comienza mi vida en una nueva escuela. ¿que más me puede pasar?