Capítulo 2: Él

1K 104 18
                                    

Mi vida antes de conocerlo era "normal", si, normal entre comillas porque un famoso no puede tener una vida normal, creo yo. O al menos mi vida no lo es.

En mi punto de vista, la palabra normal significa trabajo, trabajo y más trabajo. Amigos, ¿Ya dije trabajo? Al conocerlo mi vida dejo de ser normal, empezó a tornarse de una manera interesante, empezó a tener sentido, color... Mucha más vida.

Amor.

Yo no había creído en el amor a primera vista, pero con él me sucedió; O al menos sentí una atracción inmensa. Me sentí completo al verlo, al estrecharle la mano, al ver sus ojos, esa sonrisa aniñada, esa dulce voz...

Krist fue y es para mí el hombre más importante de mi vida. El más valioso. Mi tesoro personal. Aunque me duela decirlo ya que tengo una familia...

Esposa e hijo.

Yo veía mi futuro con Krist, veía mi vida entera con él, pero por cosas y juego del destino... Todo se esfumo.

Como agua entre mis manos.

He aprendido a vivir con este dolor constante, día y noche, en sueños y despierto. ¿Un ser humano puede vivir con dolor toda su vida? Yo podría, siempre y cuando lo vean mis ojos. Con solo verlo de lejos.

Es lo único que puedo tener, que puedo pedir.

Aunque él y yo aún tenemos contacto nos tratamos como dos viejos amigos, a veces algo más... Por mi parte, porque él siempre pone una línea límite.

―Singto, tienes una familia, por favor... ― Son sus palabras.

Esas palabras me lastiman, cada vez que las escucho, cada vez que las recuerdo.

Krist es un famoso diseñador, él crea ropa impresionante, para mujer y para hombre. Por eso lo conocí.

Su línea de ropa me gusto desde el principio, en cuanto vi un conjunto en una tienda de ropa exclusiva me enamore, busque más ropa de la línea "ángel", esa línea de ropa, ese nombre, esos detalles, esa delicadeza. Todo me gusto desde el primer momento, desde el primer segundo. Y yo mismo investigue sobre él.

Krist Perawat.

Su nombre aparecía en muchas páginas de internet. Su carrera empezó en Nueva York. Ahí despego ese hermoso ángel. Con solo 19 años de edad él empezó su carrera como diseñador. A los 24 regreso a Tailandia en donde sus diseños fueron los más vendidos y lo siguen siendo. Estaba tan impresionado por sus creaciones que le pedí una cita de trabajo.

Él al principio se negó ya que así no trabajaba, no con citas, no con famosos en persona.

Pero insistí.

No podía dejar pasar una oportunidad así. Y lo conseguí.

―Es un placer señor Perawat.― Le había dicho mientras nuestras manos se tocaban.

―El placer es mío en realidad...― Se quedó callado pensando en cómo llamarme, su nerviosismo me llevo a mi primer limite.

Necesitaba más de él por alguna razón. Con ese primer contacto... ¿Es a lo que llaman amor a primera vista? ¿O conexión instantánea?

―Dígame Singto.

―Es un placer Singto.― Dijo con naturalidad y me regalo mi segundo limite.

Necesitaba esa sonrisa para sentirme completo.

―Gracias por aceptar mi petición.

―Debo decir que me tomo por sorpresa, es decir, un artista de su nivel hablándome por teléfono para pedirme una cita de trabajo... Le confieso que no lo creí hasta este momento.

Amor prohibido 「KristSingto- BL」Where stories live. Discover now