Ha pasado una semana desde el combate que tuvimos en la mina, desde aquel entonces no nos hemos enfrentado a monstruos más fuertes, no obstante desde ese día tanto Rapthalia como Emil han mejorado mucho y a una velocidad sorprendente, Rapthalia es muy buena usando la espada y ahora prácticamente no duda a la hora de asesinar monstruos... Lo mismo va para Emil, su habilidad con el arma que le regaló Daniel ha mejorado bastante, hasta Daniel esta sorprendido de su avance, no obstante hay algo que me preocupa... Tengo el ligero presentimiento de que Daniel no ha sido muy sincero conmigo, me refiero a la batalla en la mina, el dijo que no quiso matar al monstruo por qué eso era incorrecto y cruel para el... Pero no le creo, estoy completamente seguro de que hay otra razón, le debo mucho a ese tonto por todo lo que ha hecho por mí pero eso no es excusa para mentirme tan descaradamente a mí y las niñas... Se lo diré en algún momento pero ahora... La segunda ola está por llegar
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-ay Rapthalia... Estoy al lado tuyo no tienes porqué gritar *diría Naofumi planamenté*
-¡Lo siento! Solo quería saber... ¿Por cuanto tiempo más el señor Daniel y Emil planean seguir con ese entrenamiento especial? La verdad es que los hecho mucho de menos *diría esto último con un poco de vergüenza*
-pero si solo se fueron hace cuatro horas, y tampoco se fueron muy lejos *diría Naofumi despreocupado* aunque si quieres podemos ir a ver qué tal están...
-¡Si! ¡Eso me gustaría! *Diría Rapthalia entusiasmadamente*
-Rapthalia... Te dije que estoy al lado tuyo... Deja de gritar estando tan cerca mío *diría Naofumi con un ligero tono de frialdad*
Así fue entonces el héroe del escudo y su esclava se dirigieronal paradero del caballero Jedi y su aprendiz, tal parece que Daniel ya le ha enseñado a Emil todo lo básico de defensa y ataque con sable de luz y ahora ha pasado a la siguiente fase del entrenamiento, en el lugar que se encuentran estos dos se podía ver a una Emil bastante más alta que hace una semanapero lo más extraño era el entrenamiento que estaban haciendo, Emil estaba amarrada en la rama de un árbol patas arriba y con sus brazos libres
-bueno Emil repasemos esto una última vez, dime ¿Donde esta la fuerza? *preguntaría Daniel serenamente*
-ay... Está en todas partes Amo Daniel, nos rodea, está dentro de mi... *Diría Emil con una expresión de incomodidad estando colgada*
-bien Aprendiz... Ahora intentemos esto de nuevo *Daniel tendría el sable de Luz de Emil y lo dejaría en el suelo* tu arma está ahí, completamente fuera de tu alcance, pero... Están conectados, vamos, usa la fuerza y llama a tu arma *diría Daniel serenamente denotando sabiduría*
