Capitulo 2: No somos maquinas

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a veces recuerdo que de niño veía a los soldados cuando marchaban, los veía luchas en películas o en vídeo juegos y pensaba "ellos son muy fuertes, no sienten nada, son como máquinas" y eso me calentaba mas y mas a querer ser uno, ser una ruda máquina sin sentimientos...mi pequeña mente no me dejaba ver la mentira tan grande en la que creía...pero ese día descubrí la verdad...descubrí que no importa lo rudo y fuerte  que puedas ser...tus sentimientos siguen ahí...y pueden acabar contigo más rápido de lo que una bala lo haría.  

eran las 2:00 pm cuando el sargento entró a la barraca y todos nos pusimos en firmes, el semblante del sargento decía todo, pero había algo más....había mucho sufrir y dolor en su mirada, algo más le atormentaba.

Sgt. Brigs: descansen.... como ya lo saben, en San Francisco se libra una gran batalla por la ciudad principal, escarlata presiona mas y mas...nuestros chicos apenas resisten suspiro y nos miró a todos..quedamos atónitos al ver una lágrima rodar por su mejilla mierda...perdonen...es solo que... no fue la única noticia que recibí.... se sentó en uno de los catres y miró al suelo dejando caer mas lagrimas sin quebrarse 

todos le veíamos atónitos, veíamos a ese rudo hombre que combatió en innumerables batallas, que veía morir a sus hombres día con día y que mataba con sus propias manos a los escarlata que tuvieran la mala suerte de estar descuidados cuando el estaba cerca, no teníamos idea de que hacer, pero no lo podía dejar así, decidí acercarme y preguntarle.

Merrier: señor...¿está todo bien? dije algo temeroso por no saber como reaccionaria 

Sgt. Brigs: levanto levemente la vista y me miro, en sus ojos se notaba un dolor tan grande, un pesar que hacía notar el largo tiempo que el lo aguanto, sonrío de forma amable para luego decirme si chico... es solo un agobio personal...nada que no haya vivido antes...miro al resto del pelotón y sonrió con pesar  calmen chicos...estoy bien enserio jmjm....

Doomsday: aunque ser de apoyo moral no era lo suyo, decidió intentar ayudar  a su sargento se...señor, no oculte su sentir....no es bueno hacerlo, ese dolor que guarda... le  nubla aquí... le señalo la cabeza y daña gravemente aquí... le señalo el pecho refiriendo a su corazón se que no es de mi incumbencia pero...si eso que siente....le daña tanto....debería sacarlo señor, aquí, con nosotros... sus hombres.

Draco: se acerco lentamente y suspiro, se agacho un poco y dio una cálida sonrisa al sargento Doom tiene razón señor.... todos aquí nos preocupamos por usted señor y no solo por que sea nuestro sargento al mando, si no por que lo respetamos y apreciamos bastante señor dijo con una amabilidad incomparable.

Bandage: Bandage siempre fue un gran apoyo moral, amable y comprensivo y eso ayudó mucho en esa situación  señor, nadie le juzgara, nadie se burlara...¿sabe por qué?, porque lo queremos....le entendemos y respetamos......sin usted ninguno de nosotros estaríamos aquí, usted es el pilar central de este pelotón...y si esta mal...el resto le ayuda con la carga.

Sgt. Brigs: al escuchar a cada uno de sus hombres se le formo una sonrisa y las lágrimas no se dejaron esperar y salieron a cataratas de sus ojos abrazando a sus hombres como si de sus hijos se tratasen gracias.... enserio gracias  chicos... es bueno saber que en este mundo de mierda...aun hay gente buena que sin importar la armadura....saben que son humanos nos soltó y nos sonrió de una forma cálida y se volvió a sentar, sacó de su chaleco una carta del mando con el nombre del sargento  es..es esto chicos...el mando me envió esto hace 1 mes.... desee que fueran buenas noticias... pero muy dentro de mi sabia la verdad... la abrió y sacó la carta, la miró y luego suspiro diciendo esta carta chicos...esta....maldita carta..... me hizo querer acabar con mi vida...beber hasta quedar inconsciente y otras mil idioteces...esta carta, me informa de la muerte de mi... su voz se comenzaba a quebrar hermano..menor.... el cabo de 1ra clase... Alejandro Brigs...murió en la batalla de San Francisco...por.. por un tiro que penetro su peto.... dijo con lágrimas rodando por sus mejillas y su voz muy rota maldición.... perdonen chicos yo... yo necesito un minuto.... se puso de pie y salió de la barraca sin decir más.

Merrier: el hombre hecho por la guerraWhere stories live. Discover now