Vergüenza
┈┄┈┈┄┈┄┄┈❀┈┄┈┈┄┄┈┄┈JungKook siempre supo que hacer ese tipo de apuestas era una estupidez, pero era divertido, eso también.
Era divertido como alguien se creía inalcanzable y un par de regalos y gestos amables le hacían caer.
Jeon no creía en el amor, y no era por ninguna decepción en el tema o algo, solo que en casa tenía un claro ejemplo de que tal sentimiento no existía, o quizás si, pero era tan banal que con el tiempo se acababa, así que le era lo mismo.
Las personas enamoradas solo eran una bola de idiotas tratando de buscar en alguien, lo que no tenían. Eso pensaba JungKook.
Pero él lo tenía todo, así que no necesitaba nada ni a nadie realmente.
Aunque claro, el sexo no podía faltarle.
Escuchar a EunWoo hablar del enfermero despertó su curiosidad, el mayor pocas veces se veía tan interesado en apostar por un hombre, Jeon por su parte, no tenía preferencias marcadas.
¿Era gay, hetero o bisexual? No lo sabía, así como tampoco le importaba. Para el castaño un buen polvo era un buen polvo, ya sea un culo o una vagina, cualquiera le valía. Si estaba caliente y le tenía ganas a alguien, poco importa si había o no un pene de por medio.
Woo no pensaba lo mismo, él prefería a las mujeres, aunque se había acostado con hombres precisamente por apuestas que fue JungKook quien propuso.
Era nuevo que quisiera, e incluso fuera él quien propusiera, apostar por un hombre.
Debía ser una verdadera maravilla.
Pero bueno, ver para creer, ese era el lema de Jeon.
Miró el reloj de su muñeca e hizo un gesto de disgusto, debía asistir a una clase justo ahora, pero la intriga en su pecho pudo más que su responsabilidad, que siendo honestos, verdaderamente no tenía.
Caminó hasta la enfermería por primera vez en todo lo que llevaba estudiando en la universidad Guk. Jamás se había enfermado o lastimado para ir antes, lo que si había escuchado era que la enfermera tenía unos buenos pechos grandes, pero ya que aquello no era de sus principales gustos, solo lo había dejado ser.
Se preguntaba desde cuando la habían cambiado por un hombre.
Llegar no le costó en lo absoluto, pero antes de entrar, decidió mirar un poco.
Para su buena suerte, la puerta estaba entre abierta y se podía ver hacia adentro, así que se asomó.
Rosa. Eso fue lo primero que vio.
¿De verdad habían contratado a alguien con el cabello tintado en rosa? Es decir, no tenía nada contra el color o contra teñirse el cabello, pero se suponía que eso estaba prohibido en el reglamento, ¿acaso eso solo aplicaba para los estudiantes? Bah.
De todas formas tampoco era como que la idea de cambiarle el color a su cabello fuera muy atractiva para él, le gustaba su color castaño natural.
Volvió a asomarse una vez más, sin duda la bola rosa dentro del lugar era el enfermero, llevaba puesto el uniforme. Estaba de espaldas, así que JungKook se permitió mirar de más, ¿ya habíamos mencionado que el castaño estaba seriamente obsesionado con los traseros grandes? ¿No? Pues lo está, y mucho.
No le importaba que una chica tuviera pecho plano, mientras su cadera y culo fueran grandes, Jeon estaría encantado. Quizás por eso le valían los hombres también.
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𝓑𝓸𝓽𝓽𝓸𝓶. 지국 [JiKook]
RomanceLa apariencia pomposa, suave y dulce de JiMin podría engañar a cualquiera y JungKook no fue la excepción. Su intención era follarse al lindo enfermero de su universidad, pero sin siquiera esperarlo, quien terminó mordiendo la almohada fue él. Jeon s...