Ronin

Capitulo 48: Onii-chan...

Los puntos se abrieron y el sangrado se estaba volviendo molesto, pero pudo volverlos a coser para detenerse el sangrado, se negaba a ir a un hospital, los médicos de los hospitales de su propia aldea preferirían perder su empleo antes de atender al contenedor del demonio de las nueve colas.

Ignorando el dolor el infante apretó las vendas de su brazo derecho, la bofetada de la madre de Takashi no estaba ni cerca de ser tan doloroso como lo que estaba sintiendo ahora, el pecho le dolía, su corazón sangraba.

¿Y si solo hubiera tomado a sus dos compañeras y los arrastraba a la seguridad de la aldea?

¿Y si se hubiera tragado su orgullo usando el poder maldito de la zorra de nueve colas?

¿Usar la quinta puerta?

Tantas posibilidades, pero todas daban con el resultado en que el moría... pero sus amigos hubieran vivido.

"Sabes que pudiste haber hecho mas..."

La Biju estaba jugando de nuevo, dando susurros que solo rompía su voluntad en pedazos.

"Mierda..." el dolor de cabeza se estaba volviendo insoportable, había abandonado el cementerio hace dos horas, solo caminando a un camino sin rumbo en las tierras de su aldea, bajo la mirada sucia de los civiles y otros shinobi.

"Dicen que su equipo entero murió en batalla, que patético"

"¿Qué esperabas de alguien relacionado con esa cosa?"

"No se cómo Hokage-sama permite que siga aquí"

"Ojala hubiera muerto también..."

Los susurros eran cada vez más fuertes y Naruto camino más rápido, casi tropezando por forzarse demasiado, dejando de caminar vio la multitud que lo rodeaba y seguía murmurando cosas de el, de sus camaradas y sensei, tomando con fuerza las muletas miro a su alrededor, todos sus ojos, todo su odio, repudio.

*Track*

La débil madera de las muletas no soporta la fuerza del jinchiruki que había teñido las vendas de sus manos con sangre, ese mismo color fue a sus ojos causando el pánico entre los civiles y varios ninjas, que vieron los ojos de la bestia.

"¡Largo de aquí demonio!"

"¡Fuera de aquí!"

"¡Llamen a las fuerzas Anbu! ¡El demonio esta mostrando su verdadera cara!"

El pánico empezó a enardecer a la multitud, todos conocían esos ojos y presencia siniestra, era la misma que hace años llego con la destrucción de la aldea.

"..." Naruto miro sus manos, sus uñas se convirtieron en garras afiladas, sus emociones estaban reaccionando al sello, mirando su reflejo en una vidriera vio como su cabello se torno mas oscuro y erizado, las marcas de sus mejillas se profundizaron y sus ojos brillaban en rojo.

Tenia que irse, sin pensarlo salió corriendo fuera de la aldea, corrió y corrió durante lo que parecieron horas, su cuerpo se estaba atrofiando más y más por el chakra contaminado que era como ácido en su sistema circulatorio.

Finalmente su cuerpo cedió y cayó en las cercanías de un gran rio, cansado y adolorido pudo sentarse en el suelo para recuperar el aliento.

"¡Debiste de morir tú! ¡Él era mi bebe! ¡Era lo único que me quedaba en este mundo y por tu culpa ya está muerto! ¡Es tu culpa demonio de las nueve colas tu culpa!"

Esos gritos hacían eco en su mente.

"¡Tu deberías de estar ahí! ¡Pudriéndote bajo tierra! ¡Tú no mereces vivir! ¡No mereces el volver a tu hogar y estar con familia! ¡No lo mereces!"