GaaraLee

GaaraLee 8.5

-¿Qué boda Gaara-kun?- preguntó Lee. Suspiré.

Iba a rodear a Temari con arena cuando la viera. Ahora mi plan quedaba arruinado, todo se basaba en el elemento sorpresa. Tendría que mentir.

-Nada importante. Una pareja en Suna que se va a casar, pero ambas son mujeres.- Dije. La pareja mencionada sí existía, pero acababan de comenzar a salir, así que la boda era algo distante.

- ¿¡De verdad!? !Es maravilloso Gaara-kun! ¡Eso nos acerca aun más a la posibilidad de estar juntos!- Dijo Lee con entusiasmo. Tenía una enorme sonrisa en los labios, y sus grandes ojos brillaban de emoción.- Sin esperarlo, me volvió a levantar del suelo en un abrazo apretado. Su olor, a hierbas y a Lee me inundó la nariz, comencé a reír. Tenía semanas sin sentirme así, seguía sin comprender completamente como se puede amar tanto a una persona.

-Lee bájame.- Le pedí entre risas. Por fin se detuvo. Sentí como mis pies tocaban el suelo, al tiempo que sentí sus labios sobre los míos. El beso fue casto y muy suave, pero expresaba todo lo que sentíamos por el otro.

-Te amo Gaara-kun. Te extrañaba mucho.- Dijo Lee en un susurro. Miré sus grandes ojos, brillantes por las lágrimas.

-No llores Lee.- Le rogué. -Ya estoy aquí.- Le coloqué la mano en la mejilla. En ese momento lo decidí. Olvida el elemento sorpresa, tendrán que haber algunas modificaciones al plan, pero iba a proponerle matrimonio. Ya hablaría después con Kakashi. -Ven.- Dije entusiasta. Comencé a caminar. Lee se quedó estático, sorprendido por mi cambio repentino de humor. Como no me seguía, envié un hilo de arena a rodearle la cintura y jalarlo hacia mí. Sonreí con ganas, y eso le sacó una sonrisa a él.

-¿A dónde vamos Gaara-kun?- Preguntó intrigado.

-A uno de mis lugares favoritos.- Dije. Sonrió y me tomó de la mano. Caminamos en dirección a nuestro árbol, aquel que había sido testigo de innumerables besos.

bien, le voy a dar el anillo en nuestra rama, donde nos dimos nuestro primer beso, estuve entrenando y logré compactar la arena lo suficiente para crear algo similar a un cristal, entonces haré un anillo de esa manera, frente a él...

Estábamos en el bosque a unos dos minutos de llegar. -... Eh... ¿Gaara-kun?- Me llamó Lee. Deteniendo mi monólogo mental. Lo miré. - Creo que sé hacia donde vamos... y no podemos ir ahí... hay algo que no te he dicho...- Se detuvo, me giré para encararlo. Lee se veía consternado. El corazón me comenzó a latir con fuerza.

-¿Qué sucedió Lee?- Le pregunté. No dijo nada, solo comenzó a rascarse la nuca, buscando las palabras.  -¿Lee?, ¿por qué no podemos ir ahí? - Le volví a preguntar. Una delgada nube de arena comenzaba a rodearme. Lee se había puesto rojo, y le brillaba la cara de sudor.

¿Qué estaba sucediendo?, ¿¡Habría besado a alguien más!? ¿¡En nuestro árbol!?... y... ¿y si la distancia y tanto tiempo sin vernos había cambiado sus sentimientos? Mi rostro debió dar señales porque inmediatamente se acercó y comenzó a hablar tan rápido que atropellaba las palabras.

-GaaraKunLoSientoMuchoDeVerdadNoFueMiIntenciónPorFavorPerdónameSeLoEspecialQueEraEseÁrbolParaTiYoNoQueríaNoEntiendoComoSucedióNoVolveráAPasarPorFavorPerdóname.- El mundo se me vino abajo, el calor que normalmente sentía en el pecho cuando estaba con Lee, ahora lo sentía convertido en una capa de arena que me rodeaba, tan gruesa que me impedía ver bien. Era real, Lee había estado con alguien más. Lee intentó tocarme, pero la arena se interpuso haciéndole daño. Pero no me importó. Estaba tan triste, que no pude controlar mi furia. Iba a matar al que se atrevió a estar con Lee.

-¿QUIÉN ES?- Grité furioso.

-¿Quién es quién?- Dijo Lee confundido, y levantando las manos intentando detener la arena que le golpeaba el rostro

-¡QUIERO SABER EL NOMBRE DEL QUE ESTUVO CONTIGO EN NUESTRO ÁRBOL!-

-¿¡Qué!? Na-nadie estuvo conmigo. Estaba solo...- Lee comprendió por fin lo que pasaba por mi cabeza y como se habían escuchado sus palabras y se relajó un poco. Mi arena cedió un poco ante su reacción. -Gaara-kun, jamás te engañaría, eres todo mi universo, eres la persona más bonita de la historia de la existencia. Te amo con todo mi corazón.- Lo miré muy confundido, pero la llama de mi pecho se encendió un poco con sus palabras.

-Gaara-kun, no podemos ir allí porque fui a entrenar mientras pensaba en ti, y al abrir la séptima puerta, no logré controlarme bien y destruí completamente el árbol. Lo siento mucho. Sé lo especial que es ese lugar para ti, y no había tenido el valor de contártelo y menos en una carta. Por favor perdóname.- Dijo.

La arena había cedido por completo. Comencé a reírme. Era tan ridículo. Lee me miraba confundido, y un poco dolido. Me acerqué a él.

-Lee, antes de venir tuve un sueño, donde abrías la 7ª puerta y donde tuviste que abrir la 8ª. Ese sueño me había tenido estresado todos estos días. Me urgía venir a verte. Es maravilloso e impresionante que lograras abrir la 7ª puerta. Además, creo que la octava se fue en el pobre árbol, pero no era el árbol en sí el que era especial. Lo que siempre ha sido especial, eres tú. Todos los lugares se convierten en lugares especiales cuando estoy contigo. Te amo Lee.

-¡¡Gaara-kun!!, ¡¡Te amo tanto!!-. Se lanzó a mi con un río de lágrimas, me rodeó levantándome del suelo por tercera vez ese día.