lovefool | miritama

lovefool ; 02

Mirio nisiquiera quería mirar el lazo que colgaba de su dedo, portaba unas enormes ojeras debajo de sus ojos resultado de noches sin poder dormir. Su regreso en dos días más se vió atrasado y terminó siendo una semana, era absurdo, lo más sencillo sería contarle la verdad a Tamaki y vivir una vida felices juntos como él siendo novio de su amigo.

ex mejor amigo.

pero bueno, era un cobarde.

¿Cómo demonios podía aspirar a ser un héroe si nisiquiera puede lidiar con sus sentimientos?. Sí tan solo el otro extremo del hilo fuera alguién más.

Suspiró frustrado, divisó la silueta de su mejor amigo a la distancia.

 Sonrió automáticamente.

"Tama-".

"¡Tamaki!." Su voz fue apagada por otra.

Notó una silueta delgada pasar a su lado y su visión fue cubierta por una cortina de fino cabello color rojo brillante, enmudeció. La joven corrió hacia el pelinegro con una sonrisa y esté se la devolvió.

"Tamaki, vamos por un helado luego de clases, ¿sí?." Tomó su mano mirándolo animada.

"Bien." Respondió el pelinegro sin más, sin vacilar, la joven entrelazo sus dedo y se llevó al pelinegro mientras le hablaba de algo que Mirio no alcanzaba a escuchar.

Entrelazo sus manos.

La mano de Tamaki.

"¡Mirio!." La voz de Nejire lo sacó de sus pensamientos y sintió los brazos de su amiga rodearlo.

"Nejire." Le sonrió más animado.

"Esta semana sin ti fue horrible, Mirio. No lo hagas más." Lloriqueo abrazándose del rubio.

"Estaba Tamaki...".

"Ese pollo idiota me abandonó por su nueva..."

"Nejire, Mirio. Al salón de clases." El profesor los interrumpió.

Mirio quería arrancar su propio cabello, ¿su nueva?, ¿novia?, ¿amiga?.

¿novia?.

Por dios. Nejire lo arrastró consigo hacía el salón de clases.

"Como te decía, me abandonó por su nueva amiga." AMIGA. Mirio sintió su cuerpo relajarse, maldición, estuvo cerca.

Ambos observaron a la pareja que se encontraba a la entrada del salón de clase, conversando tranquilamente. Tamaki volteó a mirarlos y Mirio sonrió hacia este, la pelirroja volteó y su mirada se enfocó en Nejire quién ahora tenía las mejilla sonrojadas.

"Hola, Nejire." Sonrió la pelirroja casi con burla, ignorando a Mirio.

"Nao." Saludó e infló sus mejillas entrando al salón con Mirio a quién tironeo a su lado.

"¿Qué fue...?".Mirio miró expectante a su amiga.

"Es insoportable, Mirio. La odio." Lloriqueó sentándose en su asiento."¡Ella no me agrada!".

Mirio acarició la cabeza de su dispersa amiga quién lo abrazaba por la cintura y se restregaba contra su camisa como gato en busca de cariño, sonrió con ternura.

"Mirio, pensé que estarías otra semana en casa."Tamaki llegó a su lado, esta vez solo.

"Me siento mejor, Tama." Le sonrió y acarició su cabello haciendo sonreír al pelinegro.

Una explosión de estúpidas mariposas inició en su estomago. Estaba tan, pero tan jodido.

"¡Por dios, Mirio!. Ese bobo de Tamaki no merece tu cariño." Nejire tomó la mano de Mirio apartándola de Tamaki y la puso sobre su propia cabeza.

"Madura, Nejire. Nao es una buena chica."

"Cállate, burro."Gruñó." Traidor abandona amigas."

Mirio los miró a ambos sin comprender, al parecer mientras intentaba lidiar con él mismo se había perdido de mucho.