lovefool ; 03

5.9K 779 454
                                    

Mirio nunca encontraba el momento indicado para decirle la verdad a su mejor amigo. Los días transcurrían mientras seguía estancado en el mismo punto, su mirada se enfocó en Tamaki quién no se encontraba muy lejos de él siendo receptor de sonrisas y pequeñas caricias en el cabellos por parte de la pelirroja que supuestamente era su amiga.

Bebió un largo sorbo de su jugo de naranja, mirándolos desde su lugar.

Sabía que al pelinegro le gustaban las caricias en el cabello.

El cabello de Tamaki era suave y su piel no se quedaba atrás, tenía un bonito perfil y cuando sonreía, dios, Mirio amaba lo suave que se volvían sus facciones, como sus ojos se cerraban suavemente y una reconfortante aura parecía rodearlo. Era simplemente...

Alto. ¿Qué demonios?.

Mirio!."Tapó su boca evitando escupir el liquido con el cual se atragantó, también, en un intento de esconder detrás de su mano sus mejillas ardiendo ante sus pensamientos. Miró a su costado alarmado."¿Estás bien?."Nejire golpeó su espalda preocupada.

"Estoy bien, por dios." Se apartó de su amiga quién golpeaba su espalda como so su vida dependiera de ello."Me asustaste."Limpió Su boca con la manga de su uniforme, aún con las mejillas rojas.

qué rayos le pasaba a su cuerpo. 

"¿En qué pensabas?."

Parecía que en cualquier momento desprendería vapor de sus sonrojada y ardientes mejillas.

Exacto, ¿en qué estaba pensando?.

Nejire apretó sus labios, tensa, había visto a su amigo mirar en la dirección de la pelirroja y Tamaki, hace dos semanas que se encontraba haciendo lo mismo. No era para nada disimulado.

"Mirio." Lo miró con seriedad."¿Acaso te gusta...?". Mirio abrió sus ojos con pánico.

No lo digas. Rogó.

"Tamaki, ¿quieres ir por una hamburguesa luego?." La pareja llegó al lado de ellos y Nejire calló al escuchar la voz de la pelirroja.

"Bien."  Tamaki le sonrió a la joven para luego mirar a su dos amigos que se mantenían en silencio mirándose el uno al otro fijamente."¿Sucedió algo?."

Nadie dijo nada. Nejire se mantenía observando a Mirio mientras este, ahora, miraba a su costado apretando la caja de jugo en su mano, la pelirroja los miró con cautela detrás del pelinegro.

"¿Mirio?." Tamaki insistió, buscando una explicación.

"Mirio, vamos al patio de atrás."Nejire caminó hacía el rubio y lo tomó del brazo arrastrándolo junto a ella.

"¿chicos...?." Tamaki intento seguirlos siendo detenido por la pelirroja."¿Nao?".

"Escucha, Tamaki. Luego hablas con ellos, ¿bien?."Le sonrió incomoda."Dales espacio para que arreglen lo que sea que pasara, no te metas."

"Pero..." Miró con preocupación hacía donde sus amigos habían desaparecido.

"Vamos, ellos estarán bien." Lo abrazó."Vamos por un jugo para que te relájes, yo te invito."

(...)

Nejire dejó libre a su amigo una vez lejos de la pareja. Observó al rubio con seriedad, Mirio sintió sus manos sudar y cada segundo deseaba con más fuerza lanzarse por algún edificio para evitar esta conversación.

"¿Mirio, a ti te gusta...?."Nejire apretó sus puños. Mirio sabía que cuándo Nejire lo dijera sería su fin."¿Te gusta Nao?."

¿Qué?.

"¿Qué?." No lo podías creer. ¿La pelirroja, gustarle a él?. Nejire lo miraba con seriedad."¡No!, no, ¿que mierda, Nejire?."

"¡Entonces por qué siempre miras hacía ellos como si estuvieras enfermo de amor desde que llegaste!." Reclamó."¡Admítelo, te gusta!." insistió. 

"¡Es por Tamaki!, dios." Mirio se dejó caer sobre el césped derrotado.

"¿Tamaki?, ¿Por qué mirarías a Tamaki así?, tu hilo...." Nejire estaba confundida, se supone que Mirio podía ver su hilo, entonces...

Entonces, si Mirio miraba a Tamaki de esa forma tan cursi, significaba que él es la otra punta del hilo, ¡claro!, el pelinegro aún no cumplía los 17 años. ¡Santo cielo!, ¿acaso su mayor sospecha se volvió realidad?.

"Sí. Tamaki es la otra punta de mi hilo." Soltó confirmando los pensamiento de su amiga.

"¡Eso es asombroso, Mirio!."Nejire se lanzo a su lado en el césped mirándolo con ilusión.

Miro hizo una mueca.

"¿Lo es?." Claro. Ellos siempre han sido amigos.

Nejire comprendió. Este maldito idiota.

"Mirio, pedazo de idiota. ¿Por qué no me lo dijiste?." Acarició su cabellos rubios dándole consuelo.

"Ni siquiera sé como lidiar con esto yo mismo, ¿como podía decirle a alguien?."

"Eres un idiota." Nejire suspiró."Es Tamaki, solo debes decirle y ambos podrán encontrar una solución, pero mírate quemándote la cabeza por algo que no puedes solucionar tú solo. El hilo tiene dos extremos y tú solo eres uno, esto es algo que deben resolver ambos".

Ella tenía tanta razón.

"Dile hoy, yo me llevare a la molesta pelirroja y los dejaré solos". Propuso animando a su amigo

Mirio no encontraba el momento para decirle, ni como, ¿qué mejor que hacerlo siendo presionado por su amiga?.

"Bien...".Mientras más rápido le dijera, seria mejor para ambos, ¿no?."Por cierto, ¿por qué te veías tan molesta ante que la idea de que me gustara Nao?."

El rostro de Nejire se tornó completamente rojo.

oh.

Mirio sonrió. 

"¡No digas nada!." Nejire lloriqueó.


lovefool | miritama Donde viven las historias. Descúbrelo ahora