IṈEҒΔBLE~WOS (EDITANDO)

•6•

Las chicas me despertaron algo entusiasmadas, a decir verdad ni sé el porqué. Salí de mí habitación algo adormilada y fui a la cocina, ambas estaban sentadas frente a la mesa con el desayuno ya preparado. Las miré frunciendo el ceño aún sin entender a qué venía tanta vitalidad desde bien temprano.

-¿Me podéis decir que pasa ya?- preguntó sentándome tranquilamente.

-Dame mis 5 pavos Lu, sabía que no se acordaría- dice Isa divertida.

-Joder macho, Rocío¿tú estás consciente de lo que vives día a día?- pregunta Lu incrédula.

-¿Qué dices? ¿De qué habláis? A veces me asustaís- digo dando un muerdo a mí tostada.

-Tía que hoy viene uno de los jurados del quinto escalón a hablar contigo y entrevistarte- exclama Isa perdiendo la paciencia.

-Ah eso, es verdad- hago una mueca.

-¿No estás nerviosa?- pregunta Lucía frunciendo el ceño -Es una oportunidad de oro Ro, puedes dar mucho juego-

-Sabes perfectamente que no me gusta sobresalir, además los argentinos son demasiado buenos- me encojo de hombro mientras friego todo lo que hemos utilizado.

Llaman al timbre de repente cortando la conversación, voy a abrir aún en pijama y me encuentro con un chico de cabello castaño más alto que yo enfrente mía.

-Hola, ¿Está Rocío?- pregunta mirándome de arriba a abajo.

-La tienes enfrente- digo divertida.

-Perdona no sabía quién eras- dice él riéndose -Soy Santi uno de los jueces del quinto escalón y quería hablar contigo si puede ser-

-Claro, pasa por favor- digo guiándolo hasta el salón -Me cambio y en un momento estoy contigo-

Me dirijo a mí habitación deprisa, agarro unos vaqueros pitillos, una blusa suelta y mis vans. Promo mis rizos con mis dedos y sonrío al espejo, a pesar de no estar muy convencida me hace ilusión que apuesten por mi.

-Lista- digo apareciendo de nuevo en el salón.

Santi deja el móvil sobre la mesa y me mira sonriendo. Me siento a su lado en el sillón y lo miró expectante dejándole paso para que hable.

-Bien tu interrupción de ayer al principio no nos gustó pero lo vimos lógico ya que los muy salames te metieron en el embrollo- digo rodando los ojos -Cuando escuchamos tu rima nos quedó bastante claro que te gusta el free y queremos saber si vos podés participar en nuestras competencias-

-No lo sé Santi, yo no creo que dé el nivel que vosotros buscáis- digo suspirando.

-No buscamos nivel, si no calidad. Necesitamos minas que promuevan que el free no es sólo de pibes y vos podés comenzar con ese movimiento. Además se empieza por una base, no se puede comenzar ganando- añade él encogiéndose de hombros.

Me quedé unos segundos callada, pensando que hacer realmente. Mi corazón me decía que aceptara pero mi cabeza me repetía una y otra vez que era una tontería.

-Está bien probaré, pero si no me siento cómoda lo dejo- digo muy seria.

-Trato hecho, ahora te haré unas preguntas y todo listo- dice preparando la cámara del móvil para grabar.

Comienza a hacerme preguntas de todo tipo para conocerme mejor, también me pregunta sobre cómo entre en el mundillo del freestyle y sobre cómo me di cuenta de que quería improvisar. Le cuento todo y le contesto a todo, tardamos una hora con la entrevista pero mereció la pena. Cuando está todo listo se marcha, no sin antes darme su número para mantenerme informada.

Las chicas al escuchar la puerta salen de sus respectivas habitaciones y comienzan a bombardear me con preguntas.

-Ay ya, cuéntanos- dice Lu zarandeando me.

-Por dios, que si, que he aceptado- digo de golpe haciendo que me suelte.

-SI- grita Isa triunfante -Sabía que podrías-

Ambas me abrazan y yo niego levemente riendo, son mis amigas, están un poco locas pero de no ser por ellas me perdería muchas cosas en la vida por mis miedos e inseguridades. Deciden salir a comer por ahí para celebrarlo, lo que es obvio es que no les apetece esperar a que yo cocine porque ambas no saben cocinar, entonces han buscado una buena excusa.

Como ya estoy lista solo me falta esperar las a ellas, cuando se cambian y todo ponemos rumbo a un restaurante que Zaina me recomendó el otro día. Al entrar no me creo la mala suerte que puedo llegar a tener. Wos se encuentra comiendo allí mismo acompañado por una chica.

-Haz como si no estuviera- dice Lu tirando de mí hacia una mesa lo bastante alejada.

Nos sentamos y pedimos la comida, con nuestras cervezas brindamos por mi decisión y por lo bien que nos iba a ir todo aquí en Argentina. Noto como no me quitan la vista de encima, levanto la cabeza de mi plato y veo a Valen mirándome, en cuanto veo que lo he pillado se acerca a la chica susurrándole algo y pasa una mano por su espalda bajándola lentamente.

Ruedo los ojos y vuelvo a prestar atención a la comida, ahora mismo la milanesa que tengo ante mí es lo más importante. Si Valen se cree que me voy a poner celosa por esas tonterías no me conoce bien.

-Vamos a dar una vuelta anda- dice Isa tirando de ambas hacia fuera del local.

Comenzamos a andar por la zona, como es de costumbre suelo llevar a veces mi cámara encima y por suerte hoy la llevaba. Mis amigas me piden un montón de fotos y yo encantada de las hago. Mientras reviso las fotos antiguas me encuentro con las de los chicos el primer día que los conocí en persona, sonrío inconscientemente al verlas.

-No quiero interrumpir el momento tan bonito con tus fotos- dice Lu divertida -Pero nos hemos alejado demasiado creo-

Miro a mí alrededor y tiene razón, hemos llegado a una zona que no me da buena espina. Saco mi móvil y justo me pone que no tengo batería, bufo mirando a Isa que está con el suyo entretenida.

-Decidme que tenéis batería- las miro entrecerrando los ojos y Lucía niega haciendo una mueca.

-Yo sí- dice Isa encogiéndose de hombros -Bueno me queda un 1%-

-Tía, manda un mensaje a alguno de los chicos que no sabemos dónde estamos- digo rápido quitándole el móvil.

Como puedo le mando a Trueno nuestra ubicación corriendo y justo se apaga el móvil, al menos he podido decirle dónde estamos.

-No nos podemos mover de aquí- les comunico devolviéndole el móvil a Isa.

-Esto no me da buena espina eh- dice Lucía mirando hacia el final de la calle donde hay un grupo de chicos mirándonos.

-Creo que mejor nos vamos de aquí y luego volvemos- Isa nos agarra de las manos y comenzamos a andar deprisa.

Nos dirigimos a una zona más iluminada y nos sentamos en el primer banco que vemos, suspiro pesandamente frotándome la cara, no sé cómo somos tan tontas de ir sin batería y por un sitio que aún no conocemos bien.

Para calmar los nervios nos pusimos a cantar de coña. Isa y su salamandra, Lu con su Louis Tomlinson y yo con Wos, como no. De repente que me quedo en silencio y miro a todos lados buscando algo, juraría que he oído pasos cerca. A lo mejor soy muy dramatica pero estás cosas son las que peor llevo.

-Lindas cómo andáis tan solas por acá- dice de repente una voz grave.

Nos tensamos y nos giramos hacia un lado viendo a el mismo grupo de chicos de antes. No parecen muy amigables, es más uno de ellos se acerca a Lucía y la agarra de mala manera haciendo que me ponga alerta.

-SUELTALA- le gritó de mala gana yendo a por él.

Unos brazos muy fuertes me atrapan dejándome inmóvil y miro a mis amigas con miedo, nos tienen muy bien sujetas. Lu comienza a gritar pero nadie a estas horas la va a escuchar y si lo hacen pongo la mano en el fuego al decir que pasarán, porque ya están acostumbrados de seguro.

Intento zafarme del agarre del chico que tengo detrás pero es imposible, lo único que hace es apretarme más cortándome un poco la respiración.

-Pibes vamos a divertirnos- dice uno sonriendo.