Look at me ~ [Fanfic Taehyung]

D I E Z

Esperaba que fuera Castiel quien fuera a hablar con el profesor para restablecer la lista, pero fue Tae quien lo hizo. Después de que los tres juntos viéramos la lista, ni uno se atrevió a moverse hasta que Tae a paso apurado regreso al salón cruzándose con el profesor en la puerta de entrada. Desde el mismo lugar pude ver como prácticamente estaba a punto de sobornar al profesor para que lo puedan sacar del grupo.

-Típico de el.- Dijo Castiel después de soltar un bufido.

No respondí porque sabía que no esperaba una respuesta. El tomo su mochila, la acomodo en su hombro y se alejó.

Yo no espere que sucediera nada más, y camine tan rápido como pude a la cafetería.

Me encontré con Ro justo a la hora en la que habíamos quedado, ella estaba tomando un batido de alguna sustancia rara amarilla, y a su lado, había una chica tomando un batido de chocolate. De repente me acorde de la mesera de ayer, y suspire de alivio al notar que no era la misma chica.

-Hola.- Salude a ambas.

Ro me devolvió el saludo y su amiga me asintió con la cabeza en respuesta.

-Camile, ella es Tay. Tay ella es Camile.- Ambas nos sonreímos y Ro me señalo un asiento enfrente de ellas para sentarme, le hice caso y ella siguió hablando-. La conocí por internet hace unos meses. Estaba algo nerviosa por todo esto de la universidad.- Hizo una pausa y tomo un mechón de su cabello para ponerlo detrás de su oreja.

Nota mental número 2: Cuando Ro está nerviosa toma su cabello.

-En fin, ella está cerca de terminar la universidad, su graduación es en unos meses, así que si quieres saber algo sobre las clases o profesores, puedes preguntarle ¿Verdad Tay?

Ella asintió sin dejar de sorber su batido por un sorbete.

-Genial.- Respondí y soné más fría de lo que esperaba. El asunto con Tae y Castiel me tenía algo volada.

Ro carraspeo algo incomoda y tomo otro mechón de cabello para envolverlo en su dedo.

-Camile ¿Te sucede algo?

Solté un suspiro algo exagerado, y me debatí entre contarle mi asunto o no. Apenas la conocía, y había alguien con nosotras con quien no había intercambiado ni una palabra hasta ahora. Ya había cometido un error con un desconocido no tan desconocido, así que decidí solo fingir y decir que no me pasaba nada, que el cambio de horario me tenía algo desconcertada. Pero la voz de Tae no me dejo hacerlo.

-¡Camile!- Grito desde el centro de la cafetería mientras se dirigía hacia mí con la vena del cuello hinchada.

Todos alrededor de nosotros voltearon tan rápido como yo, hasta hizo incluso que Tay por fin ponga un poco de atención en lo que pasaba a su alrededor.

Todo el mundo se había callado y los pasos de Tae resonaban con eco en toda la habitación.

Cuando finalmente llego frente a mí, tomo una grande bocanada de aire antes de decir:

-Mándame un mensaje hoy, consigue el número de Castiel y crea un grupo de Whatsapp donde estemos los tres.- Dio media vuelta y estuvo a punto de irse pero se arrepintió al último segundo, se agacho y murmuro algo contra mi oído solo para que yo lo escuchara.- Y ni se te ocurra darle mi número a alguien, evítalas a todas.

Me entraron unas ganas irresistibles de tomarlo del cabello y estamparlo contra la mesa. 

Que arrogante.

-Como sea.- Susurre y me voltee para regresar a ver a Ro, que nos miraba de la manera más dramática que jamás he visto. Es como si hubiera visto a un mono bailando sobre un elefante mientras hacía acrobacias.