Q U I N C E

23 5 0
                                    

No puedo hacerlo.

Mis piernas corrían y no tenía ni idea de a donde me estaban llevando, solo quería huir, escapar de nuevo. No se supone que venga al otro lado del mundo y sienta como si nada hubiera cambiado.

Esa persona, me sigue. Me sigue y no dejara de hacerlo hasta que este seguro de que hare lo que me pida.

¿Pero debería? ¿Debería escapar y hacerle caso?

No merecía esto, no merecía seguir escapando de mi pasado toda la vida. Cometí errores que nunca poder corregir y que estarán en mi mente siempre. Pero no por eso debería dejar de vivir el ahora.

Mis pasos empezaron a hacerse lentos y mi respiración volvía a ser normal.

¿Debería?

Abel tiene razón, debo hacerme cargo de mis problemas y no dejar que alguien juegue conmigo a su antojo.

Había logrado encontrar un asiento para cuando note que había tenido un ataque de ansiedad de nuevo, y sonreí al darme cuenta de que logre calmarme yo sola, de nuevo. Mi psicóloga tenía razón.

Tomándome mi tiempo, saque mi celular y marque el número de Tae.

-¿Camile? Gracias a Dios estas bien ¿Dónde estás? Intente seguirte pero eras demasiado rápida y termine perdiéndote, mándame tu ubicación para pod...

-Tae, espera.

Pude escuchar su respiración agitada, había corrido tras mi enserio.

-Hay una cafetería en frente mío.- Dije.- Te mandare el nombre. Espera media hora, y luego ven en tu auto. Te estaré esperando y por favor asegúrate de que nadie te esté siguiendo.

-¿Qué? Pero porque...- Colgué.

Esto dejo de ser un juego, no es normal vivir con miedo. Y decidí que sea quien sea que me esté siguiendo, le hare saber que cometió un error al meterse conmigo.

Desearía que la Dr. Torres pueda escucharme ahora, es verdad que he mejorado mucho gracias a la terapia.

Fue inevitable no sonreír.

Y después de marcar el número de mi psicóloga, cruce la calle hacia la cafetería.





Como le dije, Tae llego media hora más tarde, ni un minutos más ni un minuto menos. Me puse en una de las mesas de al fondo para poder evitar cualquier tipo de miradas curiosas.

En cuanto entro a la cafetería, nuestras miradas cruzaron directamente y vino hacia mí sin pensárselo.

-¿Estas bien?- Pregunto mientras tomaba asiento frente a mí.

Asentí y llame a la camarera para pedirle un café sin azúcar para Tae. El no dejaba de mirarme y yo aproveche ese momento para poder ordenar mis pensamientos una vez más.

Una vez que la camarera se retiró, Tae carraspeo.

-Por favor no me dejes así, me has asustado realmente. No tengo ni la más mínima idea de que hacer o decir en situaciones como estas.

-Tae quiero que me escuches detenidamente, presta toda la atención que puedes en mí, porque estoy a punto de contarte algo muy importante para mí que necesitas saber.

No dijo nada, su respiración seguía agitada y su mente parecía estar en todos lados menos aquí. Sin embargo, asintió. Arreglo su cabello, tomo una bocanada de aire y dijo:

-De acuerdo, estoy listo.

De alguna manera, ese gesto se me hizo tierno.

-Bien.- Suspire.- Últimamente he recibido mensajes, en un principio no los tomaba enserio, pero con el tiempo se volvieron mucho más personales.- Tome una pausa.- Y esos mensajes están relacionados contigo.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: May 24, 2020 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Look at me ~ [Fanfic Taehyung]Where stories live. Discover now