4° Cuarto día.

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POV JIMIN°•

Lo único que quería era darme un baño para alejar esta resaca que cargaba conmigo. La cabeza que me quería estallar por el fuerte dolor que tenía, Emily Rose aún dormía no quise molestarla.

Después de varios minutos metido en la tina Salí, mi cuerpo refrescado me hacía sentir aliviado. Mi Emily Rose aún seguía dormida, seguramente estaba cansada y tenía el sueño pesado.

Después de vestirme me fui al restaurante del hotel a traer el desayuno de mi amor, hoy la quería complacer de todo para que ya no siguiera enojada conmigo.

Cuando llegue al restaurante no pensé encontrarme otra vez con Marcelo, él era como una plaga que en cualquier parte que me iba estaba ahí. Era estresante.

-JiMin. - se acercó a mí y como un saludo palmeo mi espalda.- veo que ya te sientes mejor. - quitó sus manos.

-Si. - respondí algo cortante.

-Ey, quería darte algo. - con sus manos buscaba en sus bolsillos traseros de su pantalón algo, la cual no entendía que era.

-¿Que cosa?. - una ceja se alzó dándole a entender que estaba confuso.

-Esto. - dijo cuando ya había encontrado lo que buscaba. Me entrego una tableta que contenía cuatro pastillas de color azul.

-¿Y esto?,¿Para que es?. - arrugue mi entrecejo.

-Es para que puedas complacer a tu esposa. Se llama Viagra y te ayudará a tener sexo con ella. - algo avergonzado lo mire, el solo sonrió divertido.

-Y-yo no necesito esto. - rechazé.

-Claro que lo necesitas, si sigues con ese problema, solo perderás a tu esposa.

Con cierto sonrojó en mis mejillas y mucha vergüenza agradecí. Aparte el tenía razón, necesitaba de estas pastillas.

-Tómalas en unos treinta o sesenta minutos antes de tener relaciones sexuales con tu esposa. -Se acercó a mí. - te ayudará mucho. - susurro cubriendo su boca. -Espero que funcione, yo ya me tengo que ir, te veo luego.

Se despidió con un apretón de manos, algo apenado volví al hotel no si antes pedir que llevarán el desayuno a la habitación.

Cuando me adentre no vi a Emily Rose en la cama, suponía que ya había despertado y ahora se estaba dando un baño.

-¿Debería de tomar estas pastillas?. -me senté al borde de la cama, entre dudas me pregunte a mi mismo, me sumergí en mi más profundos pensamientos que no me di cuenta que Emily Rose me llamaba.

-Ey Jimin, ¿En que piensas tanto?. - Preguntó poniéndose al frente de mí, se veía tan hermosa con el cabello mojado y su piel húmeda con pequeñas gotas de agua que invadían lo que es mío.

-¿Sigues molesta conmigo?. - Respondí con otra pregunta, ella solo rodó los ojos y chasqueó la lengua. Pero no respondió nada. -Emily Rose, estoy hablando. - ella me ignoró por completo, sin decir nada se fue a su maleta a buscar su ropa.

POV EMILY ROSE°•

Cuando encontré mi ropa quise irme al baño a cambiarme, pero no pude por el fuerte agarrón de muñeca que me dio JiMin.

-Ouch, Me estas lastimando. - me queje por el fuerte agarro.

-No te soltare hasta que hablemos, ¿Entiendes?. - con más fuerza se aferró a mi muñeca aumentado el dolor.

-¡Ya vasta, JiMin!. - alce un poco la voz. - me estás lastimando. - el suspiro pesado, para luego soltarme.

-Lo siento. - se disculpó, quiso abrazarme pero lo rechazé. - No me toques.

-¿Que carajos te pasa? Te vas a poner de ese plan. Solo quiero arreglar las cosas.

-No me importa lo que quieras, yo ya estoy cansada de lo mismo. - bufé. Con mi ropa en mano me acerque al baño para adentrarme en ella.

Un suspiro cansado se escapó de mis labios, deje de pensar en lo sucedió hace un momento y comencé a vestirme.

Cuando salí no vi a JiMin en la habitación, supuse que había salido. Estaba aburrida de estar encerrada en la habitación y también salí, me fui hasta la playa encontrándome con el tal Marcelo, él supuesto amigo de mi esposo.

-Hola hermosura. - su halago me incómodo.

-Hola. - respondí. - ¿por si acaso no viste a JiMin?. - pregunté, él negó varias veces con la cabeza.

-Solo en la mañana, pero luego no. ¿Lo estas buscando?.

-No. -Él rió. -¿Que es tan gracioso?

-hace poco me pareció que si lo estabas buscando por que preguntaste por él.

[...]

-Discutimos y lo primero que haces es irte a los brazos de ese Imbécil.

-Cálmate si, estas interpretando mal las cosas. Él solo me invitó a comer y nos pusimos hablar sobre él y de ti cuando estaban en la escuela.

-No me mientas, claramente vi como sonreía cuando hablabas con él.

-Ya vasta JiMin, enserio te vas a poner celoso solo por que hable con tu amigo.

-¡Si!. - grito.

Era mi primera luna de miel que la estaba pasando mal, se suponía que estos días la pasaríamos de maravilla como las otras parejas lo estaban haciendo.

Capítulo no editado, con fallas ortográficas y más.

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