Querido Sr. Evans

tensión

Volteo y veo al profesor de pie a un lado del escritorio recargado en el con los brazos cruzados, me encanta cuando los pone de esa manera pues se marcan demaciado pues su camisa está tan ajustada que parece marcarse cada detalle de su piel.

Me pongo nervioso y me quedo frente a el tratando de sostenerle la mirada pues cada que me voy acercando me pongo más nervioso.

— Quiero preguntarle algo Eric. Me dice un poco serio mientras voltea a ver a la ventana. No sé si lo distrajo algo ahí afuera o simplemente está nervioso por la situación y trata de no mirarme.

—¿Que pasa?.   Le pregunto mirándolo y viendo cómo cada vez se pone mas nervioso y cambia su postura.

Se aleja del escritorio y veo que se dirige hacia la puerta, echa un vistazo a fuera del salón y regresa hacia mi.

—vera, e notado este tiempo que llevo aquí con ustedes algo.. mmm... — pasa su mano por su nuca y la baja algo nervioso y mete su mano en el bolsillo. — no crea que no me doy cuenta, se que... Usted... E notado sus miradas siempre que que estamos en clase, incluso cuando estamos fuera del aula.

Estoy más nervioso que hace rato y mi corazón está a punto de estallar, no sé que decirle, que le digo, que no puedo evitar verlo, que estoy locamente enamorado de el, que me masturbo pensando que me está cogiendo, que le digo!...

—no se que decir al respecto profesor, lo siento si se pone incómodo cuando lo veo, no es mi intensión hacerle pasar un mal rato, lo siento. Me levanto rápido y mientras doy mis primeros pasos para retirarme el se incorpora y me toma del brazo..

—espere Eric! No le eh dicho que se valla aún.. no eh terminado. Me dice sin soltarme, yo solo me le quedó viendo.         — no se sienta mal Eric, yo solo... No sé... Cómo le explicó, desde que llegué aquí me di cuenta en la manera en que me ve y si le digo esto no es por qué me moleste.— mientras me lo dice me suelta con suavidad y dirige su mano de nuevo hacia su nuca cómo si no supiera que decir al respecto.

Me quedo frente a el viéndolo a los ojos tratando de adivinar que es lo que me quiere decir.

—vera Eric, no me molesta en absoluto que lo haga, pero sabe que está mal, yo soy mayor que usted, tengo 38 años y usted apenas tiene 17 años, esto... Esto no puede ser!

Nunca me imaginé que me diría esto, es como si me estuviera confirmando que es gay y que le encanta que lo vea de esa manera tan absurda que delata a kilómetros que me encanta.

—que me quiere decir con eso?... Sabe que no lo puedo evitar, sería inútil intentarlo.— le digo mientras me acerco a él y noto que se pone mas nervioso y comienza a voltear hacia la puerta, como vigilando que no nos vea nadie.  — sabe, no sé cómo decirle esto pero usted me gusta mucho y no sé cómo lo tome usted, desde que lo ví el primer día me volvió loco y desde entonces no hago nada más que verle y soñar con usted.

Se comienza a hacer para atrás pero topa con el escritorio, me dice que me detenga pero yo sigo hacia el, el solo pone su mano en mi hombro y yo le hagarro el brazo.

—no me diga que pare profesor, porque a estas alturas no creo que pueda.
El me ve a los ojos y noto que su respiración aumenta cuando le tomo el brazo mientras me agarra del hombro.

—no lo haga Eric, no sé si me pueda controlar. —   me acerco más a él y noto como su mano la cual me sostenía del hombro se recorre un poco y la desliza por mi cuello hasta mi mejilla.  — aquí no Eric, por favor.

Yo me acerco a el y con mi otra mano le tocó el pecho y la deslizo hacia su brazo para sentir sus músculos con mis dedos y recorrer todo su brazo hasta regresarla a su pecho.

—nunca pensé tenerlo así de cerca.  Le digo  mientras lo miro y el me mira con nerviosismo.

—eric, porque me hace esto.  Me dice y acerca su rostro al mío lentamente asta que nuestras narices se rozan por un segundo y lentamente nuestros labios se comienzan a rozar hasta quedar Unidos en un beso con gran pasión que nos quita el aliento, un beso que dura una eternidad como si fuera el último de nuestras vidas.

Mientras me besa, con una mano me sostiene por detrás de mi cuello y con la otra me sostiene de la cintura mientras me pega más a él como si quiera formar un solo ser, yo por mi parte le tomo el brazo con el que me toma del cuello y con la otra le tocó el pecho y la paso sobre el para sentir ese enorme pecho fuerte y duro.

—eric, no sé que voy hacer con usted. Me dice mientras me rosa la nariz con la suya.

—hágame suyo!.   Le digo con voz agitada y nos comenzamos a besar de nuevo.

Bajo su mano por su abdomen notando lo bien marcado que está y la paso por parte de su cintura hasta bajar hacia su pene y lo noto que está demaciado duro, noto que es como me lo imaginé, grande y ancho.

Al tocarle el pene por encima del pantalón noto como suelta un aliento de placer mientras me besa interrumpiendo a este.

—quiero que me haga suyo profesor, lo quiero sentir dentro de mi... Le digo jadeando...

—asi será. —Me dice el — pero aquí no, es demaciado peligroso para los dos y lo sabes, si queremos que esto sea enserio tenemos que ser cuidadosos.

—tiene razón..

—si, ahora váyase y más tarde lo platicamos con calma, solo te pido una cosa.. me dice un poco agitado por la situación..

—que cosa?.  Le digo viéndolo a los ojos,
me toma del brazo y me hacerca a él..

—trate de controlar frente a los demás porque no creo poder hacerlo yo!. Me agarra la mejilla y me hacerca a él para juntarnos en un beso de despedida con el cual se marca el inicio de una relación apasionante y peligrosa a la vez.

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