[Se que esta canción no tiene nada que ver con Yanderes, pero parece jajsjs. Además, me gusta la canción uwu]
》𝙍 𝙐 𝙉
－¿Porqué Pink Steven estaba afuera? ¿Tú lo llamaste para que viniera conmigo?－ Con esa pregunta, (T/N) desearía no haberla dicho.
Como era de noche, los ojos de Steven se iluminaban en un tono rosa, daba terror con solo verlo. Levantó ligeramente su camisa para mirar su gema, que estaba posicionada en su ombligo. Él no había notado que Pink escapó de él, para poder avisarle a (T/N).
Lo hizo enojar por el hecho de que Pink esté con su amada, pero lo ocultó con una sonrisa. －Oh, no lo sabía. Pero no te preocupes, yo me encargo después, tu solo ve a tu casa y descansa, adiós~－
La chica entró en pánico, fue hacía su casa para poder llamar a la policía.
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No había nadie en la casa, según sus padres fueron a la visita con el psicólogo de Luke. Inmediatamente se dirigió al teléfono de la casa, pero sintió un golpe en su cabeza y se desmayó.
...
...
¿Qué tonta eres, verdad?
Soltó algunos gruñidos de dolor, intentó levantarse, pero sintió cómo dos brazos la ayudaban. Dirigió su mirada arriba, topándose con ojos completamente rosas.
－¿E-estas bien?－ Preguntó con delicadeza mientras la dejaba en el piso. －¿Pink? ¿Qué haces a-aquí? ¿Q-qué está pasando?－ －No hay mucho tiempo. Tenemos que irnos.－
Agarró la mano de la contraria para salir corriendo. －¡Espera! ¡Mi familia!－ －No hay tiempo, lo inmovilizé, pero no por mucho.－ －¿I-inmovilizar? ¡¿A quien?!－ －Steven.－ Sintió un nudo en la garganta al pronunciar su nombre, odiaba quedarse callado y no hacer nada, era testigo de todo lo que paso, siente que él tiene la culpa por no decir nada.
Sostuvo los hombros de (T/N) y explicó: －Mira, Steven está adentro, yo necesito cuidarte. Voy a quemar esta casa.－ －¡Pero-!－ －Sin peros, tendrás que esconderte por mientras, aquí.－ La guió a un clóset de su tamaño, －Voy a quemar la casa.－ －¿C-cómo?－
－Aun conservo los poderes de Steven, uno de ellos es el fuego rosa, lo utilizare contra el tanque de gas, te sacaré de aquí y nos iremos mientras Steven muere quemado. ¿Entendiste?－ Temerosa, la chica asintió. －Bien, y porfavor,－ Besó la frente de la chica, junto a una sonrisa, una sonrisa verdadera. －No salgas hasta que yo vaya por ti.－
Y así empezó la pesadilla.
Pink Steven se dirigió sigilosamente al sótano, donde permanecía el tanque de gas. Dio unos pasos silenciosos, escuchó cómo se movía algo detrás de él, volteó, pero no había nada.
Siguió con su mirada en frente, escuchó unos pasos. Para asegurarse, sacó su escudo y preguntó: －Se que estás aquí, Steven. Sal de una vez.－ Más no hubo respuesta.
Cuando dio unos pasos más, algo se le abalanzó. Sus ojos directamente se ubicaron en los rosas tóxicos de Steven, llenas de odio y celos. －¿Porqué te vas? La fiesta apenas está empezando~－
Traía un cuchillo en manos, alzó su brazo para apuñalar a su contraparte. Pink rodó a un lado, evitando que el cuchillo le diera en la cabeza. Steven parecía molesto con esto, －No te muevas.－
Abalanzó el cuchillo hacía él, pero Pink utilizó su escudo para protegerse. －¡QUITA ESE MALDITO ESCUDO!－ Con varios impulsos, logró romper el escudo en pedazos.
Los ojos de Pink se abrieron como platos, empezó a sudar y a sentir emociones mixtas. －¿Qué? ¿Ya no puedes más? No te preocupes,－ Steven agarró un cristal del piso, －Yo arreglaré eso~－
'No pude salvarte, lo siento (T/N)...' Cerró los ojos llenos de lagrimas, sintiendo un dolor en el pecho.
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(T/N) seguía en el clóset, esperando a Pink preocupada. 'Ya se tardó demasiado...' Miró por un hueco, no había rastros de él por ninguna parte.
Claro, hasta que empezó a oler algo.
Parecía humo.
Pink Steven venía de las escaleras sosteniendo su brazo como apoyo, la de pelos (Color) sonrió, pero se formó en una mueca de temor al ver cómo Steven estaba detrás de él. Pink Steven cayó al suelo, un cuchillo clavado en su espalda mientras salía sangre rosa.
－Vaya, este humo me impide olerte, mi querida~－ Empezó a inspeccionar y buscar a su amada, quien se tapó la boca para que evitara escuchar sonidos.
－Vamos no seas tímida, no te haré nada. Lo prometo~－ Siguió mirando.
(T/N) intentó evitar lagrimas, pero era inevitable. Sus tres amigos estaban muertos por culpa de ella, todos esos golpes emocionales que han pasado en Ciudad Playa, ya casi no tenía nada.
Porque todo fue culpa de ella.
Salió de sus pensamientos al escuchar cómo abrían la puerta del clóset, Steven tenía una mueca loca plasmada en sus labios. －¡Te encontré!－ Abrazó a la chica, manchando la sangre rosa en ella.
－No sabes cuanto te quiero...－ －¡PORFAVOR SUELTAME!－ －¿Después de lo que hice por ti? Para nada~－ La chica intentó zafarse, pero sólo logró que ambos cayeran al piso, Steven arriba de ella. Miró su mejilla cómo si fuera una tentación, aunque lo era. Se sonrojó mirando al cuchillo en manos.
－¿Sabes? Siempre he querido hacer esto...－ Movió el cuchillo hacía la mejilla de la contraria, recibiendo un quejido de parte de ella. Deslizó el cuchillo por su mejilla y de esta, salió el liquido rojo. La chica soltó un pequeño grito al sentir el ardor por su cachete.
－Qué hermosa sangre tienes~ ¿Me pregunto a que sabrá?－ Se acercó y lamió la mejilla de su estrellita, saboreando la sangre. －Justo cómo lo pensaba, dulce, cómo tú~－
－¡¡PORFAVOR ALÉJATE!!－
El humo empezaba a hundir la casa, significa que el tanque ya estaba listo para explotar. －¡Porfavor Steven, si no salimos de aquí, AMBOS VAMOS A MORIR!－ Lo miró con ojos suplicantes mientras empezaba a toser, y de sus ojos empezaron a formarse más lagrimas.
－Claro, si quieres morimos juntos.－ Fuego empezaba a emanar por el techo, asustando a (T/N), pero Steven se mantenía preparado para estar con su amada. Posicionó el cuchillo por su cuello, deslizándose a si mismo.
Sangre se esparció por todas partes, hasta en la cara de la contraria. －V-vaya, te v-ves hermosa c-con mi s-sangre.－ Intentaba hablar bien, debido a que su sangre pasaba por su garganta. －Bien, t-tu t-turno.－
Puso el cuchillo sobre la garganta de su amada, (T/N) se quedó congelada. －Espero n-nos veamos e-en e-el más a-alla~－ Antes de poder deslizár el cuchillo, (T/N) gritó;
