Capítulo V

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Hola •u•)/

Pues aquí está el capítulo, lo más pronto que pude publicar :p

Esperó que lo disfruten~

•-•

Las cosas que habían pasado, las cosas que habían vivido, los sentimientos que habían tenido, todo, poco a poco quedó en el pasado, muy oculto dentro de sus corazones. Sin embargo, nunca los olvidaron pues eran parte de su primer y único amor.

Ahogándose en un mar incierto, sintiendo como su pecho se oprimía cada vez más, jugando al buzo, no eran más que pecesillos navegando en las lúgubres corrientes de la vida.

Levi, vivía en la antigua casa de sus padres, aquel lugar cerca del lago donde había conocido a Eren.

Después de que Eren huyera, él se había refugiado y había trabajado en el pueblo.

Esperó a su amado cerca de un río a las afueras de la ciudad sin importar que lloviera o nevara, él lo esperaba cada noche en vano con la esperanza de que bajara como siempre con esa gran sonrisa que siempre lo animaba.

Años más tarde, después de trabajar tanto y en cualquier cosa que le diera un poco de dinero, así fuese como leñador, ayudante de carpintería, mesero en un bar o labrador de campos, volvió a su hogar, aunque era la cabaña más lejana al pueblo, sentía que aquel era el lugar al que a Eren tal vez, le gustaría volver.

Pero no fue así, el extraño ser de la Luna no apareció por aquellos escondidos rumbos en ningún momento.

A pesar de eso, Levi no desistió, él siguió esperando cada noche, por siete años.

Muy de vez en cuando, Farlan iba a visitar a su amigo, Levi llegó a preguntarse porque Farlan era el único que se acercaba por ahí, nunca vio a otra persona vagar por aquel lugar mas que a su antiguo amigo.

Y así era, la Tierra en un desesperado intento por ayudar a las dos soltarías almas, impedía el paso a cualquier extraño que intentar acercarse al lago.

Pero, todo fue inútil.

Un día, mientras Levi cortaba leña en el bosque, descubrió el motivo de su encanto por Luna años atrás.

No era la Luna quien lo atraía, sino Eren, era por eso que desde que se encontró con aquel chico tan extraño a las orillas del lago, la había olvidado por completo. Se sintió alegre al descubrirlo, porque entonces, era Eren quien le había robado el corazón desde antes de conocerse.

Pero ya era demasiado tarde, lo había perdido y quizá, nunca más lo volvería a ver.

Cuando se dio cuenta de eso, lo invadió la tristeza, pero no podía darse por vencido, nunca perdió la esperanza aun cuando ya no lo esperó más.

Porque aun cuando Eren no volviera, él lo seguiría amando hasta en fin de los tiempos.

Más arriba, allá donde las estrellas se podían observar todo el tiempo independientemente de la rotación de los planetas, donde no había primavera o invierno, día o noche, donde el tiempo no existía, donde todos vivían eternamente. Se encontraba el hijo de la Luna.

Acostado sobre su madre, contaba los meteoros que pasaban sobre él, allá, más arriba en el espacio, ignorando a la vieja Tierra.

Aquella vez, cuando escapó corriendo a los brazos de su madre, comprendió que era verdad lo que ella le decía sobre los humanos, "eran seres egoístas y salvajes, criaturas peligrosas a las que había que temer".

Llorando fue consolado por Luna, quien lo llenó de amor y compasión.

Aterrado por lo que había pasado, decidió ya no regresar a la Tierra y, aunque amaba a Levi, no se acercó más a ella, le temía demasiado para volver.

Hijo de la LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora