A medida que pasa el tiempo, nos convertimos no en personas intolerables, si no economistas de nuestro propio tiempo, porque al madurar aprendimos su valor y ya no deseamos perderlo en lo absurdo y lo estúpido
Autor Anónimo 55
A medida que pasa el tiempo, nos convertimos no en personas intolerables, si no economistas de nuestro propio tiempo, porque al madurar aprendimos su valor y ya no deseamos perderlo en lo absurdo y lo estúpido