No me fío, Yuu|| MikaYuu|| #Wattys2019

7. Primer día

Se podían escuchar gritos prominentes fuera de mi mundo, a medida que me iba alejando de él podía observar una silueta negra, se podía escuchar que alguien en la lejanía decía mi nombre, lo notaba distante, mi sueño era mayor, me estaba costando despertar. Derrepente sentí que me pellizcaban de la mejilla, eso me hizo despertar.

-¡AGHHHH! -Le pegué a lo primero que pillé y el que recibió fue BakaGuren por ponerse en mi camino.

-¡Maldito mocoso!- Cuando pude divisar a Guren lo hallé con la nariz enrojecida debido al golpe que recibió.

-JAJAJAJAJ. -Una sonrisa invadió mi cara, me sentí bien porque el pesado de BakaGuren recibió mi golpe.

Guren me miró con cara de víctima mientras mi hermano, que se había despertado por el ruido, reía junto a mi.

-¡Agh! ¡Os odio mocosos! -Dijo irritado tocándose la nariz.

-No decías lo mismo en tus sueños. ~-Un Shinya salvaje apareció de la nada, haciendo que el tonto de Guren se llevará un susto.

-¡Mentira! -Se oponía con las mejillas coloradas debido a la vergüenza.

Esa mañana BakaGuren fue motivo de burla, ya me podía preparar para lo que pasara de aquí en adelante, ya que yo sería el siguiente, al ser el detonante de todo aquello.

Como se acordó, hoy salimos a caminar. No era nada del otro mundo, ya que Asu-nii y yo no salíamos mucho y el único deporte lo hacíamos en clases.

El paisaje era bellísimo, la vegetación se veía de un precioso verde brillante y los rayos de luz anaranjados que traspasaban las hojas le daba ambiente. Además de eso, se podían ver pequeños ríos de aguas cristalinas que a medida que ibas avanzando uno de ellos se iba ensanchando. A través de estos ríos se podía ver el rocoso, con rocas de diferentes colores, de blanco nuclear, a un negro grisáceo. Aquellos paisajes me dejaban boquiabierto, todo se veía muy bello y esperaba poder ver diferentes paisajes otra vez en mi vida.

Al fin llegamos a nuestro deseado destino, una hermosa cascada de agua cristalina, nos hallábamos rodeados de agua y césped, se podían apreciar los picos aún nevados de las montañas.

Decidimos refrescarnos los pies en el agua, nunca había probado un agua tan congelada, esto era debido al deshielo de esta, el hielo se derretía y esta bajaba helada, pero luego al estar un rato se sentía bien, te dejaba los pies como nuevos.

Después de otras cuatro horas caminando llegamos a casa y nos rifamos las duchas, ya que solo había una a pesar de haber tres baños, uno en cada planta.

Yo fuí el más veloz, la apuesta era que quien llegará con su ropa de cambio y todo eso se llevaba la ducha, me hallaba quitándome la ropa para poder ducharme cuando todos entraron al baño, yo me cubrí con la toalla avergonzado,

-¡Oye! ¡No es justo que entréis así como así, yo llegué antes!- Grité sonrojándome.

Los demás se miraron entre ellos y cerraron la puerta, nunca me sentí tan avergonzado en mi vida.

Al final Guren y Shinya se ducharon juntos, ya que no llegábamos a la reserva del restaurante, hoy no cenábamos en casa.

-Yuu, cariño, no puedes ir así a un restaurante. -Me miré y me encogí de hombros, no sé porque a Shinya no le parecía bien que llevará una camiseta y unos vaqueros. -Ven conmigo, te vestiré yo. -Shinya me tomó de los hombros y me cambió como a él le pareció.

Iba vestido con una camisa blanca y unos pantalones vaqueros negros con un cinturón blanco, los zapatos no me los cambié porque iba bien con esos, o eso es lo que dijo Shinya, que me miraba con cara de madre orgullosa, creo que le gustó su trabajo.