Capítulo 25

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Y allí estaban, tomados de la mano a punto de ingresar a la primera parada de su luna de miel.
Se encontraban en unas cabañas ubicadas fuera de la ciudad, alejadas de todo el traqueteo. Allí mismo reinaba el silencio absoluto, y la oscuridad daba lugar solamente a la tenue luz de billones de estrellas y a la luna, que pareciese que festejaban su amor por la manera en que brillaban.
En ese punto, en ese lugar, solo eran ellos. No había nada que no fuera perfecto ante sus ojos. La noche era la mas estrellada que jamas habían visto, la paz y la alegría que sentían era incomparables, y el amor que los unía se sentía en el aire. Todo era mágico.

En ese momento ya eran marido y mujer, ya nada los iba a separar; en ese instante ya estaban en año nuevo, comenzaban el año juntos y de la mejor forma, ¿Qué más podían pedir?. Sin pensarlo más y con una sonrisa imborrable, ingresaron a la cabaña; en donde comenzaría su luna de miel y su vida de esposos.

Estando ya adentros la sensación de calidez los acogió. La habitación era muy linda y la decoración fue una total sorpresa para Caro por parte de Agustín. Instantáneamente ella corrió a sus brazos, abrazándolo, y le expresó cuanto lo amaba.  Así mismo, él correspondió al abrazo dándole vueltas en el aire, y tras la confesión ella, fue acercándola suavemente y unió sus labios en un tierno beso.
Al separarse, por falta de aire, ambos se miraron y una sonrisa volvió a surgir en ambos.
La distancia no perduró mucho, pues Caro lo atrajo hacia ella y volvió a unir sus labios. Esta vez el beso duró más y de a poco se volvía mas intenso, ya no era solamente tierno, la pasión se iba apoderando cada vez más de ellos. De a poco el calor fue aumentando y la distancia ya no existía; la ropa de a poco fue estorbando y desapareciendo. Sin separarse uno del otro, lentamente se dirigían tambaleándose a la cama, con la cual no tardaron en chocar y caer sobre ella. Fue allí donde consumaron su amor, ya nada importaba, eran ellos contra en mundo, nada los iba a separar.
Esa noche se amaron como nunca, fueron uno con el otro, solo la pasión y el amor que se tenían reinó en ese momento. Simplemente eran ellos.

Al día siguiente, ella fue la primera en despertar y una sonrisa no tardó en aparecer en su rostro tras recodar la hermosa velada. Su mirada recorrió la habitación mientras su mente era invadida por imágenes de su noche de amor, y posterior a eso, sus ojos fueron a posarse sobre su ahora esposo, él cual se encontraba aun dormido y la abrasaba como si ella fuera algo súper valioso y frágil, que en cualquier momento alguien vendría para llevársela. Con su mano empezó a acariciar y trazar círculos en su pecho, procesando todo lo acontecido.
Se encontraba tan sumida en sus pensamientos, que no se dio cuenta que Agus se había despertado, y que ahora era él quien no dejaba de mirarla y sonreír. Fue cuando él le besó la cabeza que ella reaccionó.

– Buenos días princesa —sonrió— ¿Cómo dormiste? .

– Mmm, buenos días mi rey... —sonrió y respondió — de maravilla porque dormí a tu lado —lo observó sonriendo y preguntó — ¿Vos amor? ¿Dormiste bien?.

– Estando a tu lado como no hacerlo bebé —contestó mirándola enamorado— te amo, eres lo mejor que me pasó en la vida.

– Te amo, vos también sos lo mejor que me pasó... —lo miró— siempre juntos amor.

– Siempre juntos bebé —concluyó.

Tras esas palabras ambos juntaron sus labios y se fundieron en un tierno beso.
Luego de unos mimos en la cama, ambos se levantaron, se ducharon, se arreglaron y bajaron a la cocina para prepararse el desayuno.

La mañana se pasó entre charlas, música, risas pero sobre todo amor.

Ya por la tarde, ambos ya tenían lista sus maletas y estaban de camino al aeropuerto, en donde los esperaba la segunda parada de su luna de miel, la cual duraría dos semanas y tenia como destino las Bahamas, en una cabaña en la playa rosada.
Felices, tomaron el vuelo y partieron hacia el cual sería su nidito de amor por esas dos semanas, en el que vivirían muchas cosas nuevas.

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Espero les guste!
Gracias por el apoyo
Los quiero💖

Por última vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora