Por última vez

Capítulo 24

Ha llegado el día, el gran y tan esperado día...nuestro día...
Hoy, 31 de diciembre, dentro de unas horas nos volveremos marido y mujer. Con Agus empezaremos a recorrer y a descubrir un nuevo camino, con nuevas experiencias, nuevas aventuras, nuevos aprendizajes y todo lo nuevo que nos depara el destino. No importa que el mundo se nos venga abajo, estamos juntos en esto y juntos podremos salir adelante, no vamos a dejar que nada ni nadie arruine lo que tanto nos costó.

Ustedes se preguntaran ¿Por qué un 31 de diciembre? Pues ambos amamos el clima de las fiesta en estas fechas, el sentimiento de alegría, el compartir con la familia y los amigos; diciembre en sí es un mes mágico y todo con respecto a la boda también lo fue. No tuvimos que hablar mucho para decidir cuando sería, pues ambos, mucho antes de que me hiciera la propuesta, dijimos que si nos llegáramos a casar, lo haríamos un 31 de diciembre, y lo estamos cumpliendo.
En este día decimos adiós al año vivido, a los malos momentos, a la tristeza, a las personas que ya no están; también agradecemos por las personas que llegaron y las que llegaran, por las alegrías, los aprendizajes, las risas. A media noche, estando todos reunidos damos bienvenida al nuevo año, a todo lo que nos espera, tanto bueno como malo, nuestra esperanza vuelve a florecer en eso que tanto deseamos, recargamos nuestras fuerzas para enfrentar lo que nos espera, y la alegría de saber que empiezas el año rodeado de las personas que amas. Por eso y mucho más es que elegimos este día.

En estos momentos todo es un caos, hay gente gritando y corriendo por todas partes.
La habitación donde nos estamos arreglando es todo un lío, hay brochas y maquillaje por todas partes, al igual que todo lo que tenga que ver con el cabello.
Estoy demasiado nerviosa y aunque intente disimularlo las chicas lo notan y tratan de tranquilizarme pero no puedo.
Cuando Valen termina de maquillarme y peinarme, llega el momento de ponerme el vestido y el resultado final es este:

Make up

Peinado

Vestido

Estando ya lista, las chicas, quienes van a ser mis damas de honor, se terminan de arreglar

Vestido de las chicas (el mismo para todas)

Y llego el momento de partir.
Si en si ya estaba nerviosa, en estos momentos, en frente de la entrada, estoy el doble o el triple.
Y de repente las puertas se abren, la música empieza a sonar y las chicas empiezan a entrar junto con chicos. De a poco, del brazo de mi padre, vamos avanzando al ritmo de la música. En el fondo se encuentra él, mirándome, con su hermosa sonrisa; sus ojos me transmiten alegría y paz, mis nervios desaparecieron y puedo apostar que los suyos también. Nuestras miradas se conectan y alrededor no hay nadie, solo nosotros dos.
Al llegar al altar mi papá lo saluda y se retira a tomar asiento.

– Estas bellísima —susurra.
– Vos no te quedás atrás —le respondo y sonrió.
En eso el padre comienza a hablar
– Queridos hermanos, hoy nos encontramos celebrando la unión en matrimonio de estos dos jovenes, Agustin y Carolina, que ante Dios piden la bendición de su amor, ya que es él quien los unió y fue quien los destino. Hoy y aquí vienen en agradecimiento y en busca de tu gracia, guíalos en este nuevo camino del matrimonio para que la felicidad y el amor nunca se acabe, y nada los separe. —nos mira y sonríe

– ¿Agustin aceptas a Carolina como tu legítima esposa,para amarla y respetarla, de hoy en adelante, en la prosperidad y en la adversidad, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte los separe? —

Agustin me mira y sonríe

– Si, acepto.

– ¿Carolina aceptas a Agustín como tu legítimo esposo, para amarlo y respetarlo, de hoy en adelante, en la prosperidad y en la adversidad, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte los separe? —

Al mirarlo noto en sus ojos que esta nervioso, le sonrió y respondo

– Si, acepto

– Ustedes han declarado su consentimiento ante la Iglesia. Que el Señor en su bondad fortalezca su consentimiento para llenarlos a ambos de bendiciones. Lo que Dios ha unido, que no los separe el hombre. —nos vuelve a mirar y continua— Los declaro marido y mujer. Joven —lo mira a Agus— puede besar a la novia —

Sin más que decir nos miramos y sonreímos, mi ahora esposo me agarro el mentón, me acaricio la mejilla y juntó nuestros labios en un tierno beso, mientras todos gritaban de fondo. Al separarnos, volvimos a sonreír, juntamos nuestra manos y comenzamos a salir de la iglesia.
Este día no lo vamos a olvidar nunca.

Ya afuera todos marchamos para el lugar donde íbamos a festejar.
Estando ya allí todo fue alegría, bailamos con la familia y amigos, brindamos, lloramos, reímos. Las horas pasaron volando y cuando nos dimos cuenta ya empezaron a salir los fuegos artificiales... Ya era año nuevo... Aguas me agarró de la cintura y nos apartó un poco de la fiesta, allí, en la oscuridad de la noche, bajo la luz de las estrellas y los fuegos artificiales, me besó
–Feliz año nuevo mi amor! Te amo infinitamente y prometo hacerte feliz todos los días de mi vida —dice mientras me mira.
–Feliz año amor mío! Que la vida los tenga siempre así, te amo infinitamente mucho, nunca lo olvides —respondo y sonreímos

Sin más nos volvemos a besar y al separarnos volvemos a la fiesta y nos ponemos a bailar.

Al finalizar la fiesta, ya de madrugada, nos despedimos de todos y salimos en marcha a nuestra luna de miel.

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Espero les guste
Gracias por todo y perdón la tardanza
Los quiero💖