Porque aunque JiMin fuera el pasivo de la relación, eso no quitaba que la verdadera princesa allí era Min YoonGi.
-Vamos Hyung, solo un poquito, ¿Sí?
- Que no JiMin, que llevemos años juntos no te da el derecho de solo sentarte sobre mi, ¿Acaso soy...
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Era el cumpleaños de TaeHyung y la pareja se estaba alistando para salir juntos esa noche.
JiMin se había puesto unos pantalones negros que se pegaban a su cuerpo y una camisa, también negra pero transparente, y zapatos a juego. YoonGi al verle hizo una mueca de disgusto.
— ¡¿Qué?! ¿Estoy feo? — YoonGi rodó los ojos.
— No.
— ¿Y entonces?
— Es que justamente te había pedido que fueras tranquilo a lo de Tae y pum. Te vas así...
— Ains YoonGi, relájate.
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En el lugar...
Los amigos de YoonGi comenzaron a llegar, todos solos...sin sus parejas.
Y JiMin comenzó a sentirse incómodo, si el lo hubiera sabido, se habría quedado en su casa, no quería que pareciera que no dejaba que el mayor saliera solo.
Hasta que...
— Y ella es Lisa.
No hizo falta más para que JiMin prestará atención a la recién llegada.
"Zorra"
Allí estaba presente la chica que hacía menos de un mes había encerrado a Yoongi en un ascensor para hacerle vaya a saber Dios que guarradas.
Y no ayudaba el hecho de que a Yoongi le encantaba ser el puto centro de atención de todo, alías, "la última coca cola en el desierto".
— Y este es Minnie. — mencionó Tae.
JiMin puso su mejor sonrisa fingida ante la recién llegada, mientras veía como Yoongi tragaba en seco.
— ¿Cómo así?, ¿De verdad te llamas Minnie?, ¿Acaso eso es un nombre? — una vena se formó en la sien de JiMin.
— JiMin, me llamo JiMin.
— ¿JiMin o Minnie? Mmmm.
— Me dicen Minnie...
— Ah... Si, bueno. ¿Y el quien es? — Señaló a YoonGi, y todos le miraron raro, como diciendo "¿De verdad preguntas eso?, Si un poco más y lo violas, zorra".
- Emm.. YoonGi... Min YoonGi... Ya sabes — respondió TaeHyung.
— Ah... Bueno, como digas...
JiMin le dedicó la mirada asesina al mayor, y logro susurrarle:
— Si esta perra se te acerca siquiera para respirar el mismo maldito aire, la mato, si te metes, adiós a tu Sugaconda. Esto es justicia divina Hyung.
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