「𝐖𝐨𝐧𝐝𝐞𝐫𝐰𝐚𝐥𝐥 ; 𝐀𝐧𝐧𝐞 × 𝐆𝐢𝐥𝐛𝐞𝐫𝐭」

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«Los chismes se expanden más rápido que un resfriado» Solía decir Marilla Cuthberth, y así era. Esa tarde, todos estaban a la expectativa de por qué Gilbert Blythe había elegido de entre todas las chicas hermosas de la escuela a Anne Shirley Cuthberth, Ruby Gillis se sentía indignada.
«Pensé que querría ser novio de Prissy Andrews, incluso de Jane, después de todo, son como uña y mugre» Diría esta misma cruzada de brazos mientras se dirigía a la ventana para observar lo que ocurriría entre ambos, el arroyo estaba algo lejos, así que era un poco difícil escuchar lo que decían aquellos dos.

-Hola -dijo Anne al ver al chico sentado sobre una roca.

-Hola -murmuró inexpresivo.

-¿Me necesitabas? -preguntó- Jane me dijo que querías verme.

«Si» dijo el muchacho para sus adentros «A ti es quién necesito».

-Eres buena en lectura ¿No? -levantó su mirada entrecerrando sus ojos gracias al resplandor.

-Así es -alargó sus palabras la pelirroja.

-Verás ¿Anne? -pasó una piedra de una mano a otra, esta asintió- Tengo ciertos problemas con eso, confundo algunas palabras... ¿Cuanto cobrarás?

-¡¿Que cuanto qué?! ¿Por qué?

-Por ir a mi casa mañana por la tarde con un buen libro y ayudarme.

La chica retrocedió.

-Es algo inapropiado, señor Blythe.

Confundido pero sin mostrar expresión alguna se levantó y la vio a los ojos.

-Entonces... ¿Cuanto cobras por yo ir a tu casa y que me ayudes a leer un buen libro? ¿Green gables se llama, no? -asintió- Iré después del almuerzo ¿te parece?

-Bien -sentía que cada vez le gustaba más y más del chico, solo que no sería tan obvia.

Gilbert Blythe se marchó con las manos en los bolsillos, pensó en como esa chica podría estar interesada en él cuando era prácticamente un maniquí, no tenía vida ni ganas de vivirla. Al llegar a su casa se tiró boca abajo en su cama y esperó a que las lágrimas salieran, quería un amigo. Jane lo era, pero no lo suficientemente alegre para serlo... tampoco comprendería lo que era ser él, a pesar de que lo conociera desde que sus madres los amamantaban. Tenía la fe en que Anne podría ser ese alguien que sacaría esas ideas locas de su mente y quería que amaneciera lo más pronto posible para poder comprobarlo.

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Amigos, acabo de ver Mujercitas y no se imaginan en la depresión que caí. Creo que no fui la única que lloró cuando lo de Jo y Laurie, ¿no es así?

Se despide limpiando sus lágrimas;
~Cassie.

Amor y luz🌻🌈