- Logan, detente -dije tratando de salir de debajo de él.
- ¿Qué pasa? -pregunto dándome su maldita media sonrisa que sabe que me derrite- ¿No te gusta lo que te estoy haciendo?- sus manos siguieron moviéndose dentro de mi camiseta y estoy tratando muchísimo de no jadear, porque sé que si lo hago no me va a tomar en serio.
- No es eso. Mis padres van a llegar en cualquier momento y no quiero que vean a su adorable hija enrollándose con su supuesto "mejor amigo" en el sofá de la sala- contesto mientras intento sacar sus manos de mi sujetador.
Él bufó.
- Tus padres me adoran. Estás exagerando. -murmura dándome besitos en el cuello. Me encanta cuando besa mi cuello es tan jodidamente increíble.
-Logan- susurro sin mucha convicción. Es un maldito manipulador y lo peor es que me pone caliente que no pueda despegarse de mí.
- Tranquila, además no creo que nadie se entere de nuestro pequeño sucio secreto -sonríe maliciosamente. Si, como que lo nuestro es una especie de secreto. Ni siquiera estoy segura de que clase de relación tenemos.
Yo diría que somos... amigos con derechos.
Hace un par de semanas, cuando terminé con Dave, estaba algo deprimida en mi habitación comiendo helado y viendo algún programa aburrido en la tele. Es mi rutina típica post-ruptura. Todavía no puedo creer que el imbécil me haya engañado. Ugh.
Bueno me estoy desviando del tema. La cosa es que estaba en mi cama auto compadeciéndome cuando entró Logan.
- Oye, ¿por qué estás aquí encerrada? -pregunto sonriéndome cálidamente y mirando burlonamente mi camiseta con conejitos que uso para dormir.
- ¿No escuchaste las noticias de último momento?- pregunté cubriéndome con mis sábanas.
- ¿Que el idiota de Dave te engañó con una zorra de segundo? - arqueo una ceja.
- Ugh. ¿Cómo puedes decirlo simplemente así? ¿No ves que estoy en pleno duelo? -conteste arrojándole una almohada.
- Oh vamos... No estabas enamorada de ese imbécil. Creo que estás más enojada porque te engañó con una mocosa que por el hecho de que te "rompió el corazón" -manifestó entre risas.
- Eres un idiota. No veo como me estás ayudando -respondo toda enfurruñada.
- Aaaw. Me encanta cuando frunces el ceño así... Te ves malditamente ardiente. -el se iba acercando sigilosamente. No había terminado de procesar lo que había dicho cuando de pronto saltó encima de mí en la cama y comenzó a hacerme cosquillas.
- ¡NOOOO! BASTA LOGAN. ¡POR FAVOR! - grité entre risas tratando de liberarme. El sabía que odiaba las cosquillas.
Se puso a horcajadas sobre mí y me miró fijamente. Estaba jadeando por aire después del súbito ataque cuando acercó su rostro a centímetros del mío.
- Abby... -susurró con una voz ronca que nunca había escuchado pero era sexy como el infierno.
- ¿Si? -pregunté dudosa. De pronto había una tensión sexual en el ambiente que no estaba segura de donde había venido. Se me hacía difícil respirar.
¡POR DIOS! Era mi mejor amigo desde niña... Jamás había pensado en él como algo más que un amigo. Siempre me trataba como un chico más. Pero ahora viendo sus grandes ojos color avellana de repente ya no estaba segura de si quería que fuera mi amigo.
- Te voy a besar en este momento. - siguió susurrando con esa jodida voz ronca y gruesa.
- ¿Uh? -no tuve tiempo de decir nada más cuando sus labios se estrellaron con los míos.
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!Sabia que serias un problema!
Novela JuvenilMi nombre es Abby Johnson y tengo 18 años. Mi vida es normal: es mi último año en la escuela, amigas, fiestas, soy medianamente popular, mi familia es unida, tengo una especie de novio/amigo con derecho... Todo es bastante perfecto, ¿no creen? ¿Ento...