Destino

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Jinyoung jamás fue tan feliz en su vida, ya que, finalmente, el destino lo unió a la persona que amaba. El corazón del castaño latía de felicidad; los cinco meses, antes de la boda, resultaron maravillosos. Jaebum pudo recuperar la movilidad de las extremidades inferiores, incorporándose a la universidad y al nuevo trabajo en la compañía de su padre. Por otra parte, gracias a los esfuerzos de ambos, el nuevo hogar Im-Park era todo un hecho, haciendo crecer las ansias en cuanto al matrimonio.


El castaño necesitaba cerrar un proceso pendiente, Mark Tuan. Desde la perspectiva de Park, el americano era una buena persona, la cual salió perjudicada en el proceso; por lo que tuvo la descabellada idea de citar al rubio en un café y, de esta forma, recuperar a su gran amigo.


- ¿Mark?- inquirió el castaño, regalando una sonrisa al contrario.

- ¡Jinyounggie! Te extrañé...- Mark estrechó a Park, quien se removió incómodo ante su gesto.

- ¿Cómo estás? También, te extrañé- formuló Jinyoung, sentándose en el otro extremo de la mesa.

- ¿Por qué me deseabas ver? Es decir, has tomado una decisión...- Jin lo miró sorprendido, pues, al parecer, aún tenía esperanzas.

- Necesitaba pedir disculpas. No he sido sincero, lo siento...-indicó, agachando la cabeza.

- ¿A qué te refieres?- expuso, un tanto confundido.

- Amo a Bummie, más que a mi vida...- exteriorizó, elevando la mirada.

- ¡Estás loco! Ese tipo casi destroza tu vida ¡¿Todavía lo amas?!- expresó irritado.

- Sí, jamás lo he dejado de hacer...- manifestó Park, demostrando seguridad en sus palabras.

- ¡¿Qué dices?!- indicó, golpeando la mesa, en plena cafetería.

- Por nuestra antigua amistad, mantén la calma...por favor- dio a conocer Jinnie.

- ¡No puedo dejar que hagas una idiotez! Él, no te ama y es una mierda...-Jin apretó la mandíbula.

- ¡Respeta a Jaebum! Nos casaremos- soltó con rabia, frente a la mirada atónita de Mark.

- ¡¿QUÉ?!- clamó incrédulo; los ojos ardían de rabia.

- Me casaré con Bummie, hoy...- reveló a un iracundo Mark

- ¡NO! No puedes ¡Te hará daño! Y yo...- el castaño detuvo al contrario.

- Perdón Mark, eres un gran amigo y siempre fui sincero...- aclaró su garganta- Cumpliré mi sueño, junto al hombre que amo- Jinyoung decidió terminar aquella ridícula discusión.

- ¡Te arrepentirás!- voceó el americano, apretando la mandíbula.

- Puede ser o quizá no. Sé feliz, por favor cuídate...- Jin esbozó una sonrisa. Salió del lugar, entre los gritos y maldiciones de un alterado Tuan.


El castaño dejó atrás una gran carga. La relación con Mark fue confusa, desde un inicio, lo quería, tan solo, como un buen amigo y a pesar de que no se daba por vencido, lo mejor era que conociera la verdad, puesto que, Jinyoung, iba a comparti la vida con Im. Por primera vez, velaría por su felicidad, sin dar cabida a otros; parecía egoísta, pero, sin duda, era el momento.



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Caminó, por las calles de Seúl, despreocupado, a pesar de que, en ocho horas, la boda se llevaría a cabo. Era un buen instante, para organizar y dejar, atrás, ataduras del pasado; el cambio resultó trascendental. Respiró confiado y una sonrisa se gestó en sus labios, cuando vio a Seulgi, quien ayudó con su regalo de bodas. Ella brindo algo que, tanto él como Im, codiciaban con devoción.

Awake // Bnior - JJPROJECTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora