Los copos de nieve caían uno por uno haciendo que Katsuki se sintiera impresionado. Nunca había visto una obra tan preciosa como esa, ¿cómo se sentirá tocarlos?, ¿a que sabran? tal vez a... ¿picante? ¿o que tal si es dulce?
No lo sabía con certeza pero le intrigaba.
A pasos lentos se dirigió a los aposentos del que decía llamarse Midoriya-kun o al menos así le decía una mujer de cara redondita que llegó hace unas semanas de visita.En la cama del tal Midoriya-kun se encontraba un caniche durmiendo, había entendido que se llamaba Dabi, pero que nombre más raro pensó el rubio cuando escuchó que lo llamaba el chico peliverde.
Sin embargo su madre le había enseñado a no juzgar los nombres de cada quien y él no era nadie para hacerlo.Katsuki estaba aburrido de residir en esa casa, no podía hacer nada más que robar el cereal del brócoli andante y robar los potes de ramen que escondía en la cocina... como si quisiera que nadie se los llevara, lástima que él había aprendido a preparar esos fideos tan largos y con un picor demasiado peculiar, já humano tonto.
Habían pasado ya tres semanas y no había tenido oportunidad de poder salir, se estaba exasperando e incluso le preguntó a ese caniche negro cómo salir a lo que le respondió que no se podía a menos que saltara de la ventana que estaba en el baño pero Katsuki no iba a lastimarse las patas saltando de un quinto piso. Ni de loco.
Esta vida no era la que estaba esperando descubrir, pero en cierto modo agradecía que ese chico amable de pecas le hubiera salvado el pescuezo. Gracias a eso su primera experiencia en el mundo humano no fue tan desastrosa.
Decir que no se sentía decepcionado por no poder explorar como él quería sería una completa mentira.Con pasos cansados salta a la cama al lado de Dabi y deja que el calor corporal del perro le haga dormir.
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―Por favor senpai, deje alojar al pequeño gatito, he buscado a su dueño pero no ha habido noticias de alguien reclamandolo, además, no puedo tenerlo en mi departamento, me echarán si se dan cuenta que tengo dos mascotas ahí.
― Midoriya, ya te había dicho que sí desde hace rato― exclama el hombre de cabellos largos y mirada cansada.― así que deja de lloriquear y empieza a hacer el papeleo para el nuevo bebecito.
Izuku sonríe esplendidamente, Aizawa piensa que se le van a quemar los ojos y prefiere regresar a tejer un suetercito para la linda Luna, una gatita viejita pero muy tierna y traviesa de color atigrado.
Normalmente Aizawa dejaba que se alojaran todo tipo de animalitos domésticos y no podía decirle al pobre y desesperado muchacho que no trajera al gatito, incluso le mostro fotos de dicho bebé y quedó encantado por la ternura del gatito pachonsito y naranjita que tenía Midoriya en su departamento.
El peliverde se dedicó a terminar el papeleo anotando los datos para la llegada del gatito y se lo entregó al mayor.
― ¿No le pondrás nombre?― dijo el hombre al notar un espacio en blanco donde debería ir el nombre del minino.
Izuku se queda pensando, ¿un nombre? no había pensando en ello, nunca era bueno para elegir nombres y eso era algo que su caniche sabía muy bien, pues el nombre de Dabi llegó gracias al actor de una novela que se encontraba viendo en esas épocas.
Suspiró, ¿qué nombre sería perfecto pars ese peludito?, ¿naranjita? ¿pachonsito? ah, no lo sabía.
Se dedicó a recordar alguna característica especial del gatito y rápidamente se le vino a la mente la peculiar K que tenía en su patita derecha.― ¡Kacchan!― exclamó sonriente― su nombre será Kacchan.
Y aquí comenzaba la dura crianza de un gruñón minino sin esperanzas a ser adoptado. Oh bueno, compadezco a estos chicos.
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La mayoría me dijo que no podía, me subestimaron, de mi se burlaron, pero hoy que cumplí todas mis metas solo queda burlarme en sus jetas... Bueno, no
¡hola hola!
estoy muy feliz de que al fin tuve el valor de escribir este capitulo chiquito pero escrito con mucho amor uwu
espero y les haya gustado, nos vemos después, lxs quiero.no olviden votar y comentar que les pareció esta historia
besitos en sus caritas todas bonitas
🍒✨
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explosivo ↬ dekukatsu
FanfictionEncontré un gato, no sé exactamente de que raza pero su pelo es muy largo y crespo, es gruñón y siempre se la pasa durmiendo, pelea con sus demás compañeros en el refugio, por su mal comportamiento nadie lo quiere adoptar, ¿qué haré con este gato fa...