Capítulo 2: Creo que sí quiero ser tu amigo

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Capítulo 2

"pobre pequeño de mi corazón, sabes qué mi corazón es tuyo desde el momento en que nos vimos, ¿bailarías esta pieza conmigo?

El sonido de las gotas de lluvia golpeaban la ventana, Frank estaba recostado en su cama, con la mirada al techo, recordando todo lo que había ocurrido en el día, las personas que conoció, las palabras que a lo mejor no tuvo que haber dicho, o su reacción espontánea con Ibra a un lado, le daba tanta vergüenza, ¿qué iba a pensar Ibra? Y ya por si fuera poco, había olvidado también su mochila. La opción más viable, era ver si alguien la había llevado a la zona de cosas perdidas —o eso quiso suponer — o también podía dar por perdido sus cuadernos y su mesada de la semana.

Pero entre todos sus recuerdos, la imagen del vídeo seguía vívida en su memoria. Encendió su pc y acto seguido empezó a googlear en incógnito la página, Frank pensó en si no era un poco extraño, estarlo haciendo de esta forma, pero era normal entre adolescentes.

Después de una corta búsqueda encontró el vídeo, detalló la figura femenina y lo marcado del cuerpo del actor, a los pocos minutos, sintió otra vez el bulto que se formaba en su pantalón ¿no era extraño tocarse mientras veía un vídeo, cierto? Pensó. Pasó su mano por la bragueta, el calor que emanaba era particularmente fuerte, pero cuando estuvo a punto de bajar el cierre escuchó a su madre llamándolo.

******

La casa era mucho más grande de lo que Ibra había imaginado cuando la orientadora escolar le dijo que Frank vivía en uno de los barrios más caros, el acabado en piedra caliza de la entrada parecía nuevo, no era la casa más resaltante de la zona, pero sí una de las más bonitas, con sus puertas de madera y pilares blancos, ¿realmente esa era la casa de Frank?. Era una noche fría y nublada, el suelo expendía un sutil olor a tierra mojada, en cualquier momento empezaría a llover, y el rubio tenía que irse antes de que pasara.

—¿Por qué de todos los estudiantes tenía que ser yo el que trajera su bolso? Grandioso, orientadora de mierda. ¡Solo quería llevarlo a objetos perdidos! No me importa si es nuevo y necesita hacer amigos. —pensó ibra.

Ibra tocó el timbre, tuvo que probar varias veces hasta que por fin salió la madre de Frank, Nancy Wolf, al rubio le pareció una mujer hermosísima, pero su presencia lo ponía nervioso. Nancy saludó amablemente y lo miró de pies a cabeza, vio que tenía el bolso de su hijo, le dio las gracias por traerlo, a lo que Ibra respondió con un tono frío y cortante un simple "De nada". La pelinegra lo invitó a pasar, pero Ibra se mostró incómodo ante su petición, se dio media vuelta sin responderle a Nancy y bajó unos cuantos escalones, pero antes de pisar el último, las gotas empezaron a caer, en pocos segundos lo que parecía ser una llovizna se convirtió en una gran lluvia.

—Niño, no creo que puedas irte con esta lluvia —dijo suavemente.

—No tiene por qué preocuparse señora —le dijo sin aún mirarla a los ojos.

Nancy caminó hasta él y colocó su mano en el hombro, Ibra la sacudió.

Nancy quedó sorprendida, no esperaba tal gesto de una persona menor que ella, Ibra estaba avergonzado aunque no lo demostrara, retrocedió unos pasos e hizo una pequeña inclinación para disculparse. Pero ibra no se percató de que un auto se estacionó en el garaje, de él bajó un hombre alto con un traje ceñido y oscuro como la noche, sus zapatos de charol chapoteaban en los charcos, no parecía importarle que se mojaran, y a juzgar por sus ropas y su obvio parentesco con Frank, por supuesto se trataba de su padre, Digory Wolf.

—¿Qué sucede aquí, Nancy? ¿Quién es este muchacho? —su voz era más profunda de lo que Ibra se había imaginado.

— Mi nombre es Ibrain Wesleck y....

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