Donde las estrellas lloran

Capítulo 1

El verano había terminado para Frank Wolf. Aburrido y estresante fueron las palabras con las que definió sus vacaciones.

A finales de septiembre la familia Wolf decidió trasladarse a Autunmfield, un pequeño pueblo al norte del país, a Frank, no le agradó la idea de mudarse cuando ya el nuevo ciclo escolar había comenzado, ¿cómo podría adaptarse tan rápido a un nuevo ambiente? gracias al trabajo de su padre, nunca logró forjar una verdadera amistad con los niños de su edad, ni siquiera podía recordar sus rostros, comenzar de nuevo en un lugar desconocido le producía ansiedad, ¿sería capaz de pasar desapercibido con los otros estudiantes? . A su padre, Digory Wolf, poco le importaba la opinión de su hijo, eso no iba arruinar los planes del nuevo supermercado y tampoco la oportunidad de ingresarlo en Hawks Academy para su último año de preparatoria, su gloriosa Alma Mater.

—Frank, cariño, deja de ver a la nada y sube al auto—dijo Nancy con ternura.

Nancy, la madre de Frank, era una mujer delgada que gustaba de usar ropas finas y de cuidar su aspecto físico. Nunca se dejaría ver desarreglada o sin una pizca de maquillaje. Usaba un vestido rosa ceñido al cuerpo con unos tacones de punta blanco perlado. Su cabello negro caía en bucles sobre sus senos que dejaban ver el sutil escote donde resaltaba un collar de perlas.

—Madre, te dije que por este año no hacía falta que un chofer me llevara, puedo tomar el autobús escolar —dijo Frank entre dientes.

—¡No seas bobo! Este es un día muy importante, ¡Es tu primer último día de preparatoria! ¡Tú oportunidad de hacer nuevos amigos!

— y debería estar orgulloso de haber logrado que me aceptaran en este último año —interrumpió Frank —. Lo sé, lo sé. Además, no creo hacer amigos, seguro volveremos a mudarnos...

Nancy entrecerró sus ojos, y sin decir nada más, le hizo señas para subiera a la camioneta.

Una vez adentro, la camioneta empezó andar, vio a través de la ventana los frondosos árboles y las pintorescas casas a los lados de la carretera, cada casa estaba por lo menos cinco metros a distancia de la otra, aquello le daba inspiración para dibujar, guardó en su memoria los detalles de las casas y sus brillantes colores... Pero antes de que pudiera seguir imaginando lo que pintaría una vez tuviera una mesa frente a él, Nancy le interrumpió con un grito escandaloso de alegría.

—¡Frank mira! ¡Es nuestro local! —señaló Nancy.

Los Wolf eran dueños de la pequeña línea de supermercados "Kingswolf", la sede de Autumnfield era la cuarta de toda la franquicia. No era muy distinta a las demás, un cartel gigante con la cara de un lobo blanco y una gorra amarilla y verde, amplias ventanas que dejaban ver toda la mercancía que guardaba dentro, paredes blanco insulso y una gran pancarta que decía: "¡Gran abertura!" A Frank le sorprendió que hubiese tanta gente arremolinada frente al negocio.

—Dime Frank ¿Qué se siente volver a tu pueblo natal? Tu padre y yo compartimos muchos recuerdos aquí.

—Madre, realmente no recuerdo casi nada de mi infancia en este lugar...

Cuando llegaron al instituto, Nancy se despidió de su hijo con un beso en la mejilla, a Frank le incomodaba pero no hizo mala cara, bajó del auto y caminó entre los grupos de personas que estaban en la entrada

El instituto estaba compuesto por cinco edificios ubicados en forma de medialuna unidos por pasillos superiores, su fachada exterior era llamativa, tenía bustos de águilas a su alrededor y largos escalones, a los lados rampas para los discapacitados. Las paredes, en su mayoría, tenían cerámicas marrones y blancas, en una de ellas había un mosaico de dos águilas con unas palabras grabadas en latín "Natus Vincere", a Frank le pareció gracioso, a pesar de que no entendía lo que decía ahí.